Crush. Intendenteplay

12

Simplemente pasó un largó rato, hasta que Jack dejó de llorar, en todo ese tiempo Gustabo no le soltó, quería saber que tenía, pero le daba miedo preguntar.

—Joder, detesto esto...

—¿El que? ¿Estas bien? —se notaba demasiado preocupado el dueño de la casa—

—De quedarme sólo

—No se que tengas Jack, pero desde ahora estare siempre contigo, nunca te voy a dejar, siempre me daba miedo hablarte, pensé que te caía mal, pero quiero creer que no y desde ahora seremos amigos ¿bien?

Le dolió un poco aquello a Conway, el verdaderamente lo quería a su lado, pero como algo más que un amigo, aunque no podía decir mucho, apenas y lo conocía bien, sabía cosas básicas de el y ya, sólo suspiro, y comenzó a corresponder el abrazo sólo necesitaba aquello.

—Te parece que para conocernos ¿nos hagamos preguntas? —preguntaba Gustabo con una sonrisa mientras rompía el abrazo—

—Bien

Estuvieron haciendo preguntas por un rato, poco a poco se fueron conociendo, iban q continuar cuando la madre de Gustabo llegó esto le sorprendió al otro y más al ver la hora, el reloj marcaba las 9 de la noche, sabía que era hora de irse.

—Buenas noches —solto Conway con una sonrisa—

—Oh querido, eres el chico de la otra vez ¿no?

—Amm si

—Si es que vino a acabar un proyecto

—Y ya me iba...

—No, no nada de eso —solto la mujer en un tono preocupado.— Sólo ve la hora, es peligroso ya sabes cómo es esta ciudad, mira quédate y mañana temprano te puedes ir

—Bien...

Después de aquello la madre de Gustabo les invitó a cenar, se le veía feliz.

—Hijo de verdad me alegra que seas amigo de este chico, es una buena amistad no como los demás

—Madre, mis demás amigos también son buenos

—Si claro, son sólo malas influencias hijo sólo te llevarán a ser una porquería

Gustabo simplemente se paró rápidamente de la mesa para irse a su cuarto.

—Disculpe que la dejé, pero iré a ver a Gustabo

—Esta bien

Camino en dirección al cuarto de Gustabo y lo pudo encontrar sobre su cama llorando, verle de aquella forma lo destrozaba, sólo decidió acercarse al chico

—Gustabin, tranquilo por favor —solto para después en voz baja soltar.— Porque si no yo tambien lloro