Nuestro amor tras los años

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—Lincoln yo quería ser mamá—dijo Lynn totalmente roja mientras sé rascaba su nuca.

—¡¿Que?!.....de verdad lo dices—dijo el albino también rojo.

Lynn no contestó solo asintió con la cabeza para luego decir.

—Me aleje por eso, sabía qué estaba llegando muy lejos así que fingí que no me interesaba ese sentimiento y fingí que tú no me importabas—dijo Lynn ya cambiando a tener una expresión triste.

Lincoln sé acerca hacía Lynn la abraza, donde Lynn corresponde el abraso y este dice.

—Es raro lo que diré pero....yo también había pensado en eso—dijo volviendo a sonrojarse.

—¿De verdad lo pensaste?—pregunto Lynn separándose de el abraso para mirarlo a los ojos.

—Si yo también tenía esos pensamientos y también sentía algo de atracción física por ti, pero, yo también negaba eso, no quería aceptar—dijo completamente rojo y desviando la mirada.

Lynn sé había puesto algo feliz por lo que dijo porque había una pequeña posibilidad de que algo más pasé entre ellos en un futuro a lo que cuando Lincoln.

Lynn después le da un beso en la mejilla a Lincoln diciendo.

—Gracias por aceptar—.

—¿A-aceptar?—dijo Lincoln mirando a Lynn.

—Ya lo sabrás—.
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Después de esto algo más se añadirá a esta hermosa relación, pero bueno aquí estamos para ver después de esto a la pareja de hermanos evolucionar y llegar a hasta ser unos completos pre-adultos.

Después de tan solo una semana de esto, Lynn y Lincoln siguieron siendo herma-novios en secreto, casi siempre cuando podían sé besaban, debajo de la mesa sé tomaban la mano entre otros más, pero había algo raro porque los padres de la familia numerosa miraban con ojos sospechosos Lynn y Lincoln, claro esta que ambos hermanos sé dieron cuenta de está rara acción de sus padres, pero ambos en el momento le dieron poca importancia, fue así donde las semanas se transformaron en meses y después en años donde con cada pasada de año Lynn y Lincoln se acercaban más al momento de ser padres y es ahora donde nos frenamos en el tiempo.

Podemos ver o mejor dicho leer que ahora hay una castaña de 20 años, que llegaba a la casa Loud cansada.

—Un día de mierda fue hoy—dijo Lynn enojada entrando a la casa Loud y al entrar a la sala está tira su mochila en una esquina y se sienta en el sofá.

Mientras está estaba en el sofá sentada, comienza a acercarse un peliblanco de 18 años.

—Llegaste temprano hoy—dijo bajando las escaleras y dirigiéndose para sentarse también en el sofá.

—Si llegue más temprano porque.....nos dejaron salir más temprano—dijo nerviosa mientras miraba que Lincoln sé sentaba junto a Lynn.

—Volviste a escaparte—dijo Lincoln mirando a Lynn.

En ése momento Lynn sé sube lentamente encima del albino mientras que llevaba una mirada llena de lujuria y de deseó dijo.

—Queria llegar más temprano para estar a solas con mi chico—dijo Lynn estando encima del albino.

—Oh pues tú chico tenía muchas cosas que hacer hoy.....pero puedo quedarme contigo un rato más—dijo Lincoln poniendo sus manos en la cintura de Lynn con un leve sonrojo.

—Jeje pero dime a qué hora llegan nuestros padres con las demás—pregunto Lynn.

—Pues hoy llegarán a la noche por eso tenía muchas cosas que hacer el día de hoy—dijo Lincoln.

—Esa es una buena noticia porque hoy es el día más esperado–dijo Lynn acariciando la mejilla de Lincoln.

—¡¿Hoy?!.....tiene que ser este día–dijo Lincoln nervioso.

Lynn solamente asintió con la cabeza para luego comenzar a besar a Lincoln, para luego pasar sus brazos y encadenar el cuello de el peliblanco, pero después de unos minutos Lynn deja de encadenar en cuello de Lincoln para levantar la remera naranja que aún usaba solo que con otra talla, entonces Lynn comienza retirarle su remera pero Lincoln rompe el beso y dice.

—No, no podemos...está Lisa trabajando arriba—dijo Lincoln acomodándose su remera.

—Me hubieras avisado—dijo está poniendo sus manos en el abdomen del albino para después llegar a su intimidad.

—¡Oye!...te dije que no podemos ahora—dijo sonriendo un poco.

—Ah vamos Linc....Lisa nunca sale de ahí y justamente cuando estemos haciéndolo saldrá ella—dijo Lynn con una sonrisa.

—¿Y si quedas embarazada?—.

—Eso quiero—dijo Lynn para luego volver a besarlo.

En la cabeza de Lincoln estaban pasando millones de pensamientos como estos: ¿Que hago ahora?, Tengo miedo, ¿Como diré a nuestros padres que la embaracé?, ¿Que pasará de nosotros si somos padres a tan temprana edad?, entre otros más pero a Lincoln le comenzaba a ganar el deseó de quitar su virginidad con su hermana, dándole miedo pero de la nada comenzó a sentir qué la preocupación desaparecía y las ganas de hacerlo con ella llegaban duplicadas, fue así dónde sé rindió y comenzaron con algo que los marcará para siempre.

Lynn sin romper el beso comienza otra vez a levantar la remera del albino y está vez Lincoln había dejado que lo haga, dejando a la vista  el cuerpo ya muy bien desarrollado del peliblanco y decir.

—Al fin serás solo mío—dijo mientras tocaba el cuerpo desarrollado de Lincoln, con una mirada llena de deseó.

—Si lo hacemos no hay vuelta atrás amor—dijo Lincoln también este levantando la remera deportiva de Lynn.

—Lincoln quiero ser tuya, quiero que tú seas mío y de nadie más para siempre—dijo está ya dejando a la vista su brasier.

—Te amo Lynn—.

—Yo también te amo—.
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Fingiendo que no me interesas (Lynncoln) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora