It has to be you (Fate series 1: LuzuPlay)

Capítulo 10

Capítulo 10

Al llegar al pueblo lo primero que sintió fueron los brazos de Rubius rodeándolo mientras lloraba diciendo cuanto lo había extrañado. Detrás de él, la gente con la que había entablado relación se encontraba en la entrada del pueblo dándole la bienvenida. Después de que lograra separarse de Rubius se encontró con las amables miradas de Willy y Mangel, una de alivio de Vegetta y más allá la sonrisa tranquila del anciano Merlon. Lolito llegó corriendo hacía los brazos de Mangel, quien lo recibió con la misma felicidad que manifestaba el pelirrojo, Auron notó que éste último le susurraba al de lentes, por la cara de ambos supo que era algo que no le incumbía.

Luzu pasó una mano sobre sus hombros y le indició que entraran al pueblo, algunos guardias ya se había llevado el equipaje de los tres hombres. Se despidieron de los demás chicos cuando llegaron al centro del pueblo, con sonrisas en el rostro, todos le desearon una buena estadía en Karmaland. Auron rió divertido cuando vio como Willy se llevaban a Rubius para su entrenamiento y Vegetta sólo parecía ponerse de mal humor por la escena que estaba montando el rubio. Cuando vio desaparecer a su amigo decidió que era momento de marcharse también.

―Bien, Luzu, muéstrame donde me quedare, ¿o será de nuevo en la casa de Rubius? Si es así conozco el camino y puedo ir sólo, también debes descasar.

―Bueno, sobre eso... No te quedaras con Rubén.

―¿Tendré mi propia casa? ―Luzu negó―. ¿De nuevo con Mónica y Adán? Tal vez no sea buena idea ―pero Luzu volvió a negar, parecía nervioso de lo que iba a decir.

―Pensé que ya podías vivir conmigo... ―Luzu sonrió nervioso mientras ponía una mano tras su nuca.

Auron trató de mantener su sonrisa, pero su expresión decía claramente lo que estaba pensando. ―¿Vivir juntos? ¿Tan rápido? Luzu, sé que estamos saliendo, pero ni siquiera ha sido un mes, aun tenemos que conocernos, saber que le gusta al otro, que no, como somos dentro de una relación y cuando nuestra relación sea más estable y fuerte decidimos vivir juntos.

―¿Por qué? Somos almas gemelas, además, dijiste que esperabas que mi invitación de vivir en mi casa aun siguiera en pie.

―Eso no era tan literal, me refería más al pueblo ―Luzu parecía realmente confundido―. Mira, no es que no piense en hacerlo en un futuro, pero creo que en este momento debería vivir aparte y dejar que nuestra relación fluya normalmente.

―Bueno, creo que es cierto, olvide por un momento que eres de afuera. Debo parecer intenso o algo así a dicho Rubius alguna vez.

―Un poco sí, pero no tanto para que huya... aun ―Auron se empezó a reír y Luzu lo siguió.

―En ese caso te dejare en la casa de Rubius y haré que lleven tus cosas allá.

―Me parece perfecto ―Auron se acercó y le dio un pequeño beso a Luzu. Aunque Auron intentó negarse, al final Luzu terminó acompañándolo hasta casa del rubio. Ambos se despidieron y Luzu le avisó que pasaría por él más tarde.

Auron decidió descansar un poco antes de que Luzu pasara por él a la hora acordada. Tomó la habitación que sabía estaba desocupada y se tiró en la cama para dormir una siesta. En cuanto sus ojos se cerraron una serie de escenas formaron un sueño agradable donde estaba con Luzu, el castaño lo miraba con un amor infinito y su sonrisa era demasiado hermosa. De un momento a otro de nuevo estaba en esa habitación, mirando el vestido blanco. Era la segunda vez que sucedía, podía notar que el vestido de novia era de un estilo muy antiguo, estaba por tocar el vestido cuando la puerta de aquella habitación se abrió y un Luzu sonriente entró al cuarto.