It has to be you (Fate series 1: LuzuPlay)

Capítulo 12

Capítulo final. Gracias por todo. Los amo.

Capítulo 12

Cuando abrió los ojos sólo pudo ver oscuridad. Su cabeza dolía un poco y su cuerpo se sentía cansado. Intentó acostumbrar sus ojos a la oscuridad de la habitación. Al moverse escuchó un extraño tintineo, al tratar de levantar su brazo sintió el contacto frío del metal que rodeaba su muñeca. Metal que rodeaba sus muñecas, y mientras empezaba a estar más lúcido, también notó un frío peso en su tobillo. Sus ojos, que empezaban a acostumbrarse a la oscuridad de la habitación, se encontraron con un cuarto que no conocía.

Ambos brazos se encontraban esposados en su espalda, pero sólo su tobillo derecho estaba encadenado. Intentó levantarse de lo que ahora sabía eran sabanas sucias y viejas que trataban de simular una cama. Se le dificultó lograr erguirse al tener ambos brazos aprisionados, pero después de unos minutos lo logró. Mientras más tiempo pasaba, sus sentidos despertaban poco a poco y empezaba anotar cosas que al principio no. Por ejemplo, que la habitación era más una celda, el lugar olía asqueroso y pudo jurar que había visto algo moverse en la otra esquina. También probó la resistencia de las esposas. Parecían que eso era lo único nuevo y limpio de aquel lugar. Mientras que la cadena que rodeaba su tobillo estaba sujeta a alguna parte del suelo de la celda/habitación.

No sabía cómo había llegado a aquel lugar, lo último que recordaba era aceptar aquella bebida de parte de Brett. Se había empezado a sentir un poco mareado y, en algún momento, cuando intento irse... Nada, no recordaba nada más. No tenía que ser un maldito genio para unir las piezas y darse cuenta que Brett lo había llevado a ese sucio lugar. Pero, ¿por qué? ¿Estaba obsesionado con él? ¿Quería matarlo? ¿Hacerlo un tipo de esclavo? Todo aquello hizo temblar a Auron.

Estaba bien, Luzu se percataría de su desaparición, no tardarían en buscarlo y todo estaría bien. Luzu lo encontraría, sabía que lo haría. Y mientras esperaba, debía encontrar una forma de también intentar escapar. Observó de nuevo la habitación y notó algo en el techo que no había visto antes, parecía una pequeña rejilla que daba con el exterior. Pudo ver que el cielo empezaba a aclararse.

...

Luzu contemplaba el techo de la sala. Ya habían pasado horas desde que había sucedido la discusión. Sintió una nariz mojada sobre su mano, alejó la vista del techo para encontrarse con los oscuros ojos de Manolo, quien también le devolvía la mirada. El cerdo hizo un pequeño oing y se alejó. Luzu lo siguió con la vista, Manolo se movía lentamente hacía una esquina de la habitación, una esquina donde distinguió una bola de plumas blancas acurrucada. Frederick. Luzu recordaba que Auron se había llevado al pollo el día siguiente de que se lo regaló, por lo cual lo había llevado también la noche anterior a la cena.

El castaño siguió mirando al cerdo que se acostó a un lado del animal blanco y sonrió. Ambos animales se veían adorables, sin duda Auron amaría ver eso... Auron. La había jodido en grande con el otro hombre. A su mente regresaron los recuerdos de hace unas horas, cuando en un momento de ira se había desquitado con el menor. Ahora, menos nublado por el alcohol, Luzu se dio cuenta de las cosas sin sentido que le había dicho a Auron.

Luzu era consciente de que Auron no recordaba nada, que en ese momento no era lo que Lana fue en su tiempo, era alguien distinto con una vida pasada que él recordaba y aun añoraba. Ese era el problema, que aun añoraba esa vida que tanto amo, lo cual lo llevo a sentirse herido cuando parecía que para Lana no había sentido lo mismo viviendo a su lado, ella añoraba una vida diferente. ¿La odiaba? No, nunca podría odiarla. ¿Estaba molesto? Sí, pero no con ella, sino con la idea de que no fue lo suficiente confiable para que ella pudiera hablar con él y decirle que la esperara. Luzu hubiera aceptado, siempre lo haría, él hubiera esperado.