Desahogo

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Desahogo

Llore hasta mas no poder; poco a poco sentía como la melancolía se apoderaba de mi cuerpo y succionaba mi energía , hasta que no me quedó otra opción más que abrazar fuertemente mi almohada y sollozar hasta quedarme dormido.

Viejos recuerdos me torturaban y me hacían creer que este sería el fin de mi historia; la depresión usurpa cada fragmento de recuerdo negativo que existía en mi memoria y lo usaba para llevarme hacia un vacío mental en el cual era vulnerable, pero aquel insoportable dolor en mi pecho me recordaba que aún estaba con vida y que podría darle vuelta a la página.

En el momento más álgido de mi vida, necesité de los que hasta aquel entonces considere mis amigos; sorpresivamente todos me dieron la espalda y me hicieron sentir que no tenía ningún valor. Me costó levantarme y superar aquellos estragos emocionales que me aquejan, pero lo logré y por fin pude darme cuenta que, los amigos falsos son como sombras: siempre cerca de ti en tus momentos más brillantes pero no se ven en ninguna parte en tus horas más oscuras.

Desahogo

Justo en el fondo de mi ser, aún se encuentra aquel pequeño niño recogiendo cada fragmento de mi corazón; se encuentra destrozado lleno de tristeza y con sus pequeñas manos magulladas intenta reparar algo que hace tiempo dejó de funcionar.

Mi cara se demuestra fría, inexpresiva, carente de alguna emoción y se ha transformado en la celda que mantiene reprimido a ese pequeño niño que grita con todas sus fuerzas e intenta desahogar todo ese dolor que por años ha soportado, solo pocos pueden entender que no es más que una máscara que me ayuda a mantener aislado todo el dolor que estoy albergando.

Todos suelen opinar sobre tu vida, creen conocer lo que alberga tu corazón y tu mente, pero jamás podrán entender el caos que habita en el interior de ambas.



Desahogo

Detesto cuando pasa esto, sentir que tengo tantas cosas por expresar y no encontrar las palabras suficientes para hacerlo; Son múltiples las ocasiones en las que mi alma abandona mi cuerpo, forzando un viaje que pone en contacto cada parte de mi ser con su naturaleza misma, mi mirada permanece fija y mi mente entra en una crisis en la que se bloquean cada una de las ideas que esta alberga.

Dicen que las mejores cosas en la vida llegan en el momento más inesperado, pero yo me niego a dejar las cosas al azar y siempre ando en búsqueda de todo lo que anhelo, es curioso cuántas oportunidades dejamos pasar , cuantas personas alejamos de nuestras vidas por temor al fracaso.

Una vez más intentó levantar la voz por todos los que temen hacerlo y están cansado de sentirse insuficientes, solo les pido que pongan empeño en cada uno de sus proyectos, que sigan sus sueños y que en mi podrán encontrar alguien que
siempre creerá en su potencial.

Desahogo

Cómo podría describir la sensación que recorre mi pecho cada vez que las cosas salen mal y todo va cuesta abajo, podríamos decir que es dolor, tristeza o quizás decepción por no ser capaz de mantener las cosas en pie y arruinar cada una de las cosas buenas que llegan a mi vida.

Muchas veces suelo destruir a las personas que se acercan a mí; no me creerían si les digo que jamás ha sido mi intención lastimarlos y ocasionarles tantas decepciones, no soy culpable de las expectativas que se crean al conocerme, mucho menos soy culpable de intentar ser fiel a cada uno de mis principios.

No es fácil sentirse de esta forma, pero basta de lamentos, solo debo socavar la grieta que se está construyendo entre mi felicidad y la absoluta tristeza, para tener una visión clara de cómo seguir una vez más hacia adelante, debo esforzarme en cumplir cada uno de mis sueños y brindándole mi amor a aquellas personas que siempre están para mí.


Cartas de un soñadorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora