Atados a una mierda llamada droga

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Jared pasó la peor resaca de su vida o esa pensaba él, intentaba recordar alguna de las cosas que hizo anoche, llamó a todos los chicos para saber como estaban Frank, hablaron y le conto el desastre que había en su casa.

De Lumicas no había ninguna señal de donde estaba. Jared fue a la cada de él y el muy flojo estaba durmiendo. Estaba preocupado por no saber nada de Lumicas, se sintió tranquilo cuando por fin lo vio.

Jared empezó a bajar sus notas en la escuela y a faltar. Se iba a beber alcohol con sus amigos, se la pasaban borrachos. Por las noches iban en grupos para robar en los centros comerciales. Una noche entraron a uno para divertirse, cuando vieron una caja de dinero la rompieron, les tocó correr para que no los atrapara la policía.

Iban a una discoteca que era la sensación de la ciudad, pues en la discoteca vendían toda clase de drogas, la que quisieran.

Conocían personas y el grupo de los suburbios parecía crecer cada vez más.

Mientras veían películas fumaban algo de hierba, otros se iba a tener sexo.

Conocieron a tres chicos y a una chica, se llamaban: Rick, Axel, Martin y Erika. Rick y Martin consumían drogas desde los 12 años, Erika terminó en las drogas por querer probar todo lo de su novio Axel, estos chicos consumían cosas fuertes como la heroína, estaban atados porque cuando te enganchas a la heroína se sabe que nunca vas a ganar. Eran chicos inocentes que no querían hacerse daño solo divertirse se inyectaron y ya no son libres.

Jared por suerte aún no caía, había consumido algunas cosas pero no era un adicto, buena la suerte la de él, mientras que el resto estaba atado a una mierda.

Aquella porquería rompió sus sueños, cayeron en su propio infierno esclavizados por un momento de diversión que los destruiría por el resto de sus vidas. El joven Jared estaba muy aburrido, no tenía con quien hablar pensó que beber un poco le ayudaría, en la noche salió con sus amigos, fueron a un burdel. En la borrachera de Jared hablo con un señor que le propuso un negocio, él aceptó, pero en su estado insano no supo cuál fue el trato, Jared vendería drogas mientras que Frank hizo otro trato, cambio de chicas por comida estos chicos necesitaban alimentarse y las drogas no les daría lo que necesitan para vivir. Iba un tipo rico en su porche, se llevaba algunas chicas y les dejaba comida, Frank no hizo un mal negocio, pero un día le pidieron a su hermana, él muy enfurecido no aceptó, nunca dejaría que su hermana se prostituyera, Erika a diario lo hacía solo para conseguir su dosis, a Axel no le gustaba que hiciera eso, pero al él solo le importaba drogarse. Una noche que se acostaron prometieron que dejarían de consumir, dos semanas después su amigo Rick salió en la prensa muerto por sobredosis. Axel empezó a prostituirse, término contagiado de VIH, no solo se acostaba con mujeres también con hombres, su novia no lo sabía, ella igual se contagió. Estos chicos no tenían porqué sonreír, no tienen ningún futuro ni nada que ofrecer.

En los conciertos Jared vendía drogas, él chico empezó a ganar dinero, se compraba buenas cosas, a su tía se le hacía extraño de donde conseguía dinero.

En uno de esos conciertos Lumicas creyó conocer el amor de su vida, no paraba de mirar a una chica, ni a su forma de andar. Se hicieron amigos, la hermosa chica se llamaba Daniela, en las salidas del grupo esos dos se la pasaban besándose y alagándose mientras Jared se metía más a fondo en el negocio de las drogas. Frank conseguía dinero por prostituir chicas, ya no era solo comida. Erika terminó quedándose embarazada, esa fue la razón de Axel para dejar las drogas, ser padre.

Daniela y Lumicas la pasaban genial. Ella le contó su historia a su amante Lumicas, le contó que ella escapó de casa por el hecho de que su padrastro abusaba de ella. Él prometió protegerla siempre. Ellos dos pasaron cosas inolvidables, Lumicas dio a conocer su lado cursi, una noche entre todos le dieron una serenata, los músicos del grupo eran Jared, Yeiler, Lumicas y Amy que cantaba. Una noche cuando se acostaron a dormir Daniela le pidió a Lumicas que le leyera un cuento, él le dijo que si ya no estás un poco vieja para esto (se rieron). Cuando despertaron fueron al cuarto de Daniela, estaba con llave no podían abrir, entre todos rompieron la puerta y la vieron a ella tirada en su cama sin moverse, Jared la tocó y dijo que no respiraba, Erika encontró una carta que había dejado, era una carta suicida la carta decía algo como esto:

Ya no lo soporto más ¿cuándo terminará esta agonía? Cada día ante un espejo infiel que refleja todos los defectos que siempre tendré. Hoy pudo haber sido un día más, pero no lo fue. Queridos mamá, papá y mis amigos, perdónenme, sé que es difícil leer esto, para mí tampoco es fácil escribirlo, pretendo ser breve, supongo que están muy tristes por lo que he hecho, pero no deben preocuparse, estoy bien ha sido mi decisión y creo que es correcta. Hace mucho que no quería seguir en esta vida, ya que no tengo ningún motivo para continuar, a veces creo que quiero ser escritora, otras veces que quiero ser médica, talvez pintora o desnudista, a veces prostituta... Otras veces me encantaría solo ser una soñadora con sueños reales, pero soy tan patética que no tengo nada porque luchar. Mamá perdona por tomar tu rímel, igual aún sabiendo que era yo. Papá perdona por tomarme tu vodka, el cual tomas a media noche y te duermes en el sofá desde que estas separado de mamá. Y tu Williams puedes irte al infierno por lo que me hiciste, espero que te vaya muy bien martirio. Frank cuida bien de tus hermanos. Amy eres hermosa. Yeiler me encanta tu cabello. Axel dale un futuro a tu hijo y a Erika. Sé feliz Jared por favor, abandona este lugar y vuelve a tu rutina, aquella porquería que tanto detestas. Por favor amigos dejen esta mierda que nos ha roto, nos rompió las entrañas y los sueños, ya saben de qué hablo... está bien lo escribiré, ¡la puta droga! Los quiero mucho y en especial a ti Lumicas, gracias por hacerme creer que existe el amor y sentirme protegida, lo siento por decepcionarte. Amigos por favor sean felices y huyan. Dejaré que mis brazos se desangren por última vez ¿será esta la última vez?
Tantas veces lo dije, jamás lo hice. Con amor: Daniela.

Todos terminaron alterados después de leer la carta.

Lumicas lloró, nunca lo habían visto a llorar, y dijo: ¡bien hecho drogos de mierda hay tienen!

Se llevaron el cuerpo de Daniela, dedujeron que murió por sobredosis. Todos fueron a su funeral, no dejaban de mirar a estos chicos como la cosa más rara, pero el funeral terminó mal, el padrastro los hecho y terminaron peleando. Lumicas golpeo a Williams y le grito: ¡Cállate hijo de perra! ¿Que hay de lo que le hiciste a ella? Era una chica inocente ¡y tú te aprovechabas en las noche de ella! Que todos sepan lo que hiciste y como dice su carta ¡vete al infierno martirio!

Después de que sacaran a todos a la fuerza y de recordar momentos que pasaron con Daniela, todos estuvieron en silencio, Lumicas dijo que mantendría su luto por largo tiempo y le pidió a Jared que los salvara.

Jared era el único que no estaba hundido en la droga, quizá Jared era la única esperanza de estos chicos. Pero allí no terminaron los problemas, Rick se perdió y no volvieron a saber nada de él, Erika y Axel ya no consumían pero sentían tanta ansiedad que temblaban, sudaban, estaban desesperados y desgraciadamente volvieron a caer y Axel siguió prostituyéndose.

Una noche Erika fue a la casa donde se quedaba su novio. Era la casa de un hombre, decía que le pagaba bien, ellos no dejaron de consumir, lo que Axel hacía era acostarse con cualquier mujer u hombre para conseguir su dosis. Una mañana Erika fue al cuarto donde estaba Axel, encendió la luz del cuarto y vio lo que hacía su novio, le dio tanta repugnancia que lloró, y lo abandonó. No soportaba ver a su novio acostarse con otras mujeres así fuera solo para conseguir su dosis diaria no quería esto para ella.

Erika se fue de la ciudad, volvió con su madre.

Erika: Hace 6 meses que vivo en Aracoiba y hace mucho que deje Colombia, aquí me he mantenido limpia de drogas ya no sé que es sentir una aguja en el brazo, a veces recuerdo a unos chicos, un grupo de chicos que podía llamar familia, y esta él, no hay momento que no piense en él, a veces quisiera volver e ir a salvarlo, espero que todos estén bien. Ojala algún día mi hijo conozca a su padre.

Los Abandonados de la calle 82Donde viven las historias. Descúbrelo ahora