Minnie Hyung

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Jimin terminó su guardia sin poder ver o chequear al pequeño ingresado, por lo que se dirigió hacia su sala para saludarlo. Sorpresivamente el pequeño estaba despierto, aun siendo las 6 de la mañana. Jimin toco la puerta de la habitación y entró saludando suavemente. El cachorro lo miró sorprendido y algo a la defensiva.

-Hola Soobin, soy Jimin. ¿Cómo está todo?- preguntó mientras se sentaba en la silla al lado de la cama.- Soy el doctor que te atendió en cuanto entraste, no pude venir antes porque estuvo movida la guardia- sonrió suavemente.

-Hola- contestó suavemente el pequeñito. Su cara no estaba afectada por las quemaduras por lo que no se habían comprometido las vías aéreas.

-Duele algo?- pregunto jimin mientras por instinto comenzaba a despedir un olor dulce para calmar al cachorro. Este pareció relajarse un poco.

-no tanto- contestó suavemente.

-Me alegro tanto, si en algún momento duele dinos, la idea es que no suceda. Quieres un poco de agua?- a la pregunta los ojos del menor se abrieron con deseo.

-si por favor- Jimin ayudó a que se incorpora y le ofreció un vaso con agua. Por suerte las quemaduras no abarcaban la cara, más bien el torso, muslos y parte de los brazos.

Cuando soobin terminó de tomar con la ayuda del omega volvió a recostarse.

-Bueno, soobin te sientes bien como para hablar del futuro preguntó mientras una nueva punzada aún mayor que las anteriores le recorría el vientre. Se dobló levemente y su olor se agrió un poco, pero el pequeño lo notó.

-Está bien señor Jimin?- pregunto algo preocupado

-Si cachorro, un simple dolor. Debo estar cansado no te preocupes- respondió sonriendo y revolviendo el pelo del menor.

-Bueno como decía, no vas a volver a casa. Tu padre los descuidó demasiado y eso es algo que ni yo ni ninguno de este hospital puede perdonar. En cuanto estés mejor como para darte de alta irás a la casa de Baek que es un amigo mío y después se verá.

-Que pasara con mis hermanos, no quiero que se queden ahí.- el dolor y el miedo se podía ver en los ojos del pequeño.

-eso no pasará, en este momento están con Baek y Chanyeol en su casa y te esperarán ahí hasta que tu puedas unirte

-Son buenas personas?- pregunto un poco más calmado pero alerta

-Claro que sí! Baek ama los abrazos y es la persona más viva y alegre que conozco. Chan es un osito, gigante pero cariñoso y hasta algo torpe. Son muy buenas personas no tienes porque preocuparte por eso.- contestó mientras acariciaba la cabeza del menor.

-gracias- fue lanzado suave y aireado mientras el menor comenzaba a llorar.

El corazón de jimin se apretó y se acercó para poder contenerlo. Acercó la unión de su cuello con su glándula de olor a la nariz del menor mientras acariciaba el pelo con sus manos. El olor a omega calmaba al cachorro mientras que las caricias lo reconfortan. Los ojos del mayor comenzaron a llenarse de lágrimas y comenzó a llorar con él, por el dolor que debió haber pasado, por la soledad y miedo que ese cuerpito tan pequeño había atravesado. Cuando ambos se calmaron y se separaron se oyó un golpe en la puerta y luego Jungkook apareció en el umbral

-mhh hola, Minnie entre porque sentí tu tristeza está todo bien?- a la presencia de olor alfa el menor se encogió un poco y se colocó detrás de jimin

-si Kookie no pasa nada, soobin el es mi pareja jungkook, amor este es soobin el cachorro valiente del que te hable- hablo mientras sonreía y acariciaba el pelo del menor.

-oh, Hola! Encantado pequeñín, no te preocupes no te haré daño solo vengo a llevarme a casa a mi omega que debe estar cansado. Sabes, a veces se sobre exige y luego tiene que dormir un día entero para recuperarse- dijo alegre mientras dulcificar su aroma

El pequeño abrió desmesuradamente los ojos

-Un día entero!!!- preguntó más tranquilo

-Sip puedes creer eso, cuando se despertó tenía un hambre que por poco me come vivo- siguió el alfa risueño. La risa del alfa contagio al pequeño que comenzó a reír y jimin simplemente sonreía mientras no dejaba de peinar el cabello del cachorro
-No no, señor Jimin, debe ir a dormir. No puede comerse a una persona!!- contestó divertido el menor.

-Esta bien muchachito, me iré a casa a descansar, tómese todas las medicinas y descansar. Si siente algún tipo de dolor, avise a cualquiera de los chicos, entendido soldado?- exclamó risueñamente.

-Sí señor!- respondió el menor.

Los mayores se despidieron alegremente y comenzaron a caminar hacia los lockers para retirar las cosas del menor y volver a casa. A la vez que se alejaban de la habitación del menor, el aroma del omega se agriaba. En cuanto llegaron al auto, Jung Kook abrazó a su omega dejando que el aroma de su lobo calmara al contrario. Jimin dejo que la tristeza que lo llenaba, largandose a llorar mientras absorbía el aroma contrario.

Luego de que el omega se calmara, ambos entraron al auto y el alfa comenzó a manejar, tratando de mantener una mano en el omega, calmandolo. Cuando llegaron a la casa, el omega se metió en la cama a dormir, mientras el alfa se sentaba junto a él en la cama, disfrutando el contacto entre ellos y la calidez del hogar.

Cuando el omega despertó eran alrededor de las 9 de la noche, Jungkook no estaba en la cama, sin embargo en la cocina se escuchaban sonidos de la cocina, además de un show en el televisor. Estirándose se levantó de la cama para ir hasta la cocina, donde se encontró al alfa peleando con una cebolla que no se dejaba cortar. Sonrió con ternura y se acercó a la espalda del menor para abrazarlo y absorber el aroma del contrario.

-Hola hermoso, cómo dormiste?- preguntó el alfa mientras llevaba un brazo hacia atrás para acariciar la cintura del omega.

-Mhhh, bien- contesto mientras se separaba- necesitas ayuda con eso?- pregunto

-Si quieres puedes ayudarme con esta cosa, no se deja cortar.- contestó mientras revolvía las cosas que ya estaba cocinando.

Jimin se lavó las manos y comenzó a ayudar a cocinar al menor, mientras se reían de un chiste del show en la televisión y el seguimiento de la broma del alfa. Mientras comían el omega sintió una punzada en el abdomen, lo cual empezó a preocuparlo por su reiterado, pero no le dio mucha importancia al desaparecer al poco tiempo.

Luego de comer los dos decidieron ver una película mientras se abrazaban, el omega para lograr calmar a su lobo y el alfa porque si bien quería preguntar y tratar de que el omega le contara lo que pasaba por su mente, sabía que eso no pasaría si él estaba todavía procesando, por lo que prefería esperar y ayudarlo a calmarse.

Hola!! lamento la tardanza pero con esto de las clases online, la uni y mis cosas no e tenido tanto tiempo para escribir. Pero acá esta, después de años, un capitulo un poco mas corto. Espero que lo disfruten y prometo intentar escribir mas seguido!!