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Paró en la puerta de la librería al tiempo que se daba cuenta de que una gota de agua caía sobre su rostro. El cielo estaba lleno de nubarrones y cada vez caían más rápido las gotas de lluvia. Tenía dos opciones: quedarse con el dependiente acosador-violador o empaparse con una buena lluvia. No tuvo que pensarselo mucho. Escondió el livro dentró del suéter y se colocó la capucha sobre la cabeza. Comenzó a caminar dando pequeños brincos para cruzar los charcos mientras aceleraba el paso. Paró en  seco cuando casi resbala y se dio cuenta de que no había sido tan buena idea, teniendo en cuenta lo lejos que se encontraba su casa de ese lugar.

  Siguió su camino hasta llegar a un árbol, era el refugio más cercano que podía encontrar. Las gotas de lluvia recorrían su rostro hasta la barbilla y comenzaba a haber un frío que la hacía temblar. Se abrazó a sí misma intentando frotar sus brazos en busca de calor.

   De pronto las gotas cesaron envima de ella, pero a su alrededor seguía lloviendo a cántaros. Subió la mirada hasta un sombrilla y se detuvo al encontrarse el rostro de aquel chico, Shane. Él la observaba mientras esbozaba una sonrisa preciosa.

-¿Cómo...?

-Pasaba por aquí y te he visto- Intervino él, recogiendole a Ashley tras su oreja un mechón de pelo que ocultaba sus ojos-No entiendo cómo siempre te ves tan bonita- Ashley sintió como ardían sus mejillas al tiempo que él se acercaba más a ella-Vamos- La aferró a él por la cintura y comenzaron a correr debajo de la lluvia, riendo a carcajadas como dos locos.

Hola bonita (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora