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—Tanto me has pedido perdón que parece que soy un moribundo y solo te disculpas para no quedar mal, no demuestras con acciones tu arrepentimiento.

Soltó Tine haciendo sonreír al otro.

—Lo se, pero no puedo parar de decirte perdón por cada cosa que hago, siento que incluso si tomo un vaso de agua te hará daño y te meteré en problemas.

Tine finalmente pareció calmarse un poco ante eso.

—No discutamos más, se esta haciendo tarde, tengo que volver a mi casa, tengo que estudiar para un examen.

—Los exámenes son asquerosos...

Sarawat tan solo se acomodo en el sillon de manera mas correcta.

—Eso mismo creó yo, pero a mi profesor le resultan muy divertidos y disfruta ver mi cara de frustración junto a la de mis compañeros en estos tiempos.

—¿Quieres que haga que lo corran de su trabajo?

Tine soltó una leve carcajada.

—Exclamó el señor todo poderoso.

—Si pudiera alejar a todos lo que no te gustan de tu lado lo haría.

Tine se sentó sobre las piernas de Sarawat quedando frente a frente al punto de tocar sus narices en leves rozes.

—¿Estas conciente que tu tambien te irías con ese montón? 

Sarawat tan solo fruncio el ceño y arrugo sus labios formando un suave puchero que hizo enternecer a Tine.

—No me hagas caso, no lo digo en serió.

Al día siguiente Tine estaba a mitad de su ultima clase cuando comenzó a recibir mensajes

"Quiero verte"

—"Estas en plena sesión de fotos y yo en clase"

"Estoy tan aburrido sin ti"

"Siguelo estando, hoy iré a trabajar"

*Sarawat ha mandado una foto*

Tine no evito reir al ver la foto, era Sarawat con una expresión molesta pero no de verdad, eso le daba ternura

Decidió contestar la foto.

—"Tienes cara de enojado, necesitas muchos besitos"

"Pero que sean tuyos"

Finalizó la conversación de esa manera.

Al poco rato de acabar la clase Tine salió directo a su trabajo que seguía siendo la cafetería

Estaba ahí P'Mil
Cabe decir que ahora eran buenos amigos y Mil siempre le daba consejos de amor al chico sin que los dos supieran mucho al respecto.

Había un pequeño problema en esa amistad
Nada personal.

Pero Phukong no soportaba el hecho de que Tine se acercará a Mil.

Cada día Phukong se podía ver ahí sentado en una mesa mirando con odio a Tine cuando le hablaba a Mil.

Ya se lo había comentado a Sarawat
Y tan solo consiguió hacerlo reír
Pero sin duda le dijo que lo reprendería por molestar a su novio. 

—Seguro ni siquiera habla con su hermano.

Paso varías veces por la mente de Tine.

Pero de todos modos, lo dejaba pasar.

Phukong se acerco a la barra que era entendida por Tine.

Eso se le hizo curioso púes Mil estaba en la cocina y no con él.

De pronto el otro habló.

—Tine.

—Hermano de Sarawat.

—Me agrada más Lalaby.

—¿Pues que te digo? Anda a verla a su estudio y no en la cafetería.

Dijo Tine con una enorme sonrisa aún en su rostro.

—Le voy a decir a Sarawat sobre como me tratas.

—Ok.

—cínico.

—Lo aprendí de tu hermano.

Él menor tan solo rechisto los dientes y se volvio a sentar en su mesa dejando solo a Tine.

Recibió mas mensajes de nueva cuenta Sarawat.

"¿Puedo ir a verte a tu trabajo?"

—"Ño"

"Shi"

—"Ridículo, ven si quieres"

Si le preguntarán a Tine lo que sentía por Sarawat justo ahora diría que sin el no puede vivir, su amor había crecido de manera abrupta por él desde hace tiempo.

Han tenido sus diferencias pero el cortejo que le brindaba el modelo hacía que se sintiera en la nubes y no regresará en un buen rato.

Sarawat le había dicho miles de veces cuanto lo sentía por la manera en la que llegó a tratarlo los primeros días de conocerse y por no tomarse el tiempo de conversar como personas normales.

Algo en lo que no estaba feliz el chico era que Sarawat trataba de hacerlo pensar que serían buenos amigos después de que terminará esta mentira.

Pero algo no sabía Tine

Lo que pasaba por la mente de Sarawat ya no eran aquellas vagas y tontas palabras que siempre le murmuraba al oído cada noche que estaban juntos.

Sarawat ya no lo veía como un amigo, ni como una mentira.

Eso hacía que se sintiera repulsivo mediante sus actos pasados y todas las mujeres y romances que alguna vez tuvo.

Lo hacía sentir confundido.

El solo hecho de pensar que los dos estuvieran con otra personas los hacía enfurecer.

Sarawat estaba sentado en una silla frente al lugar donde lo maquillaban y recibió varios mensajes

Torpemente creyó que serían de Tine.

Pero no, eran de Lalaby.

"¿Podemos vernos hoy en la noche?"   

Era lo que decía aquél mensaje de la chica
El otro tan solo negó y con molestia volvió  a guardar su celular en su bolsillo del pantalón.

Una voz detrás de él lo hizo asustar

—¡Sarawat!


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