Mentiras Enemigas

Bienvenido

Silencio e incomodidad es lo que se percibe en todo el lugar, el doctor notó eso desde antes de Frank y yo entrar a la habitación del hospital, poco después se excusó al salir diciendo que debía atender a otro paciente nosotros comprendimos pero no dijimos nada creo que esa noticia nos dejó pensativos. Frank toma asiento en una pequeña silla en la esquina de la habitación, Edgar esta junto a Camille apoyado en la cama procesando todo haciéndole mimos a la mujer que está igual que nosotros.

- ¿Tendrás al bebé? - La pregunta de Frank se escucha en toda la habitación que justo ahora está más fría que antes al igual que las palabras del hombre sentado en la esquina. Proceso la pregunta, muy estúpida para decirla en voz alta y aún más estúpida es pensarla. El rostro de Camille se endurece y le da una mirada que jamás había visto en ella, intenta levantarse pero mi hermano se lo impide ella asiente y vuelve a mirar a su esposo de la misma manera que antes .

- ¿Qué piensas que haré? ¿Qué sugieres? ¿Qué estás insinuando? - Vocifera esta con los ojos cargados de ira y tristeza por la pregunta tan fuera de luga . El silencio vuelve a reinar pero no por mucho porque Frank lo llena con otra pregunta. ¡Dios este hombre no desiste!

- ¿Desde  cuando sabes que estás en cinta? - Vuelve preguntar con frialdad mirando a la mujer de la misma manera en que ella lo mira.

- Desde que lo acaban de decir - Responde resignada

- Vuelvo a preguntar Cam, ¿Tendrás al bebé? - No comprendo el motivo de la pregunta, el tanto empeño en saber la respuesta pero luego comprendo la necesidad. No se sabe desde cuando ella está embarazada y ella la estuvo bebiendo desde que Frank se fue; hace ya más de un mes, eso podría hacerle daño al bebé. Doy un respingo al sentir un cuerpo junto a mi.

- ¿Piensas en lo mismo que yo? - Pregunta tomándome por sorpresa las manos y apretandolas seguido.

- ¿Lo llamaste? - Respondo, él niega. Por un momento temí en que este enfrentamiento entre miradas pase a mayores. 

-¿Sabes quien puede ser el padre? - Pregunta una vez más sacándome de mis pensamientos, miro sus ojos azules chispeantes iguales a los de Camille .

- Solo hay dos opciones  Frank o Christian - Susurro el último nombre con rapidez temiendo que los demás en la habitación escuchen. Para ninguno es un secreto que hay una tercera persona en esta historia de amor de dos, sin embargo, por el momento no es sensato hablar de eso.

- No deberías preguntarme eso Frank, tendré al bebé y nadie impedirá eso ni siquiera tu. Tengo una segunda oportunidad Frank esta vez lo haré bien - Los cuatro comprendemos a que se refiere con esto último, el hombre de la esquina se pone de pie y con paso decidido se acerca hasta la cama con el rostro relajado depositando un beso en la frente de Camille.

- Felicidades preciosa, tienes una segunda oportunidad de ser madre lo harás de maravilla confío en ti. Perdón por irme sin avisar y hacerte pasar unos malos días, ya debo irme - Dice en un susurro casi inaudible cargado de tanto arrepentimiento e incertidumbre que se me es imposible no sentir un dolor en el pecho. La besa nuevamente en la frente y uno corto en los labios. Edgar y yo observamos la escena en silencio; el amor entre ellos es palpable aún recibiendo las miradas de ira del otro. Ella lo mira confundida y temerosa de dejarlo ir una vez más.

- ¿Te irás otra vez?, recién llegas, te enteras de todo esto al igual que yo y te vas de nuevo, no me puedes hacer esto Frank - Le dice atrapando su brazo en sus manos para no dejarlo escapar, en sus ojos se ve el temor de dejarlo ir y que él no regrese otra vez.

Una sonrisa tranquilizadora aparece en los labios de él, la mira con amor, dulzura y anhelo ¿Por qué ella tuvo que buscar el amor en otro hombre?, solo ellos pueden responder a mi pregunta pero muy a mi pesar no se si estoy lista para escuchar la respuesta. Frank acaricia con ternura y delicadeza los pómulos de su amada, por instinto esta cierra sus ojos quizás disfrutando de la acción inesperada tal vez no todo está perdido entre ellos.

- No, cariño no me iré. Voy hablar con el doctor no quiero verte en esta deprimente y fría habitación de hospital, te prometo que tendremos una larga conversación quiero arreglar las cosas contigo Cami - Todos nos miramos entre sí, la mujer en la camilla cree en las palabras expresadas y asiente dejándolo ir con una sonrisa radiante y llena de optimismo. 

- Otro bebé, estoy feliz por ti - Me dirijo hacia ella con un sonrisa en mi rostro. Es claro que no esperaba esa noticia pero es muy importante para ella este bebé, se notan las ganas de ser una madre real en sus ojos. Bueno de por sí ya lo es solo que esta vez ella sí verá crecer a ese pequeño, le dará tanto amor y seguridad como seguro siempre quiso darnos a nosotros y no pudo. Es una gran mujer la que está frente a mis ojos, tengo ese sentimiento de que será una madre excepcional. ¿Qué razón tuvo para no criarnos a Edgar y a mi? otra pregunta a la que no le encuentro respuesta. 

- Felicidades Cami, ahora ya comprendo los vómitos y mareos de cada mañana ¿Qué nombre piensas ponerle si es niño? - Ambas nos miramos atónitos por la ocurrencia y ella habla soltando un suspiro cansado.

- Gracias chicos, no sabía que estaba embarazada pero lo sospeché pero estoy sorprendida de que tendré otro hijo -   Hay tanta felicidad en ella en este momento, en sus palabras que puedo sentir como dentro de mi algo se desploma dejando que la felicidad controle mi cuerpo.  La puerta de la habitación se abre y deja al descubierto a Frank con ceño fruncido que cambia a neutral al vernos.

- Hable con el doctor ya te pueden dar el alta, tenemos que comprar algunas cosas devuelta a casa, no más bebidas alcohólicas eso está rotundamente prohibido para el bienestar tuyo y del bebé - Todos nos miramos y asentimos, no hay nada más que decir solo nos levantamos y nos vamos de la habitación. El doctor nos repite lo que Frank ya nos ha mencionado dándole veracidad a las palabras de este último. Salimos del hospital y a la vista de todos parecemos una familia feliz, tal vez lo somos pero hay cosas que arreglar, muros que derribar dentro de cada uno de nosotros. No somos infelices, debemos dejar el pasado atrás.

Debes dejarlo ir Jane, deja el pasado atrás junto al rencor  

Esa voz dentro de mí tiene razón debo aprender a perdonar.

He regresado despues de tanto tiempo queridos lectores, ya tengo mas inspiración y tengo visiones nuevas para esta historia que para mi recién empieza. Tengo algunos planes para hacer un cambio en ella como en el título y la portada (aun debo pensarlo). 

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   Besos lectores anónimos ❤