La Hija De La Boxeadora

Capitulo 49 1/2

Pov Jess

Mi cuerpo dolia como mil demonios. Abro mis ojos con dificultad mientras observo a Kian dormido en el sofá, este se encontraba sosteniendo mi mano. Sonreí mientra sin que el sintiera solte, miro a Fabian que esta totalmente dormido.

-Fabian... -comence a acariciarle- Despierta cariño, en 30 minutos comienzan tus clases. –le digo bajo mientras este se mueven al otro lado ignorándome-

Muerdo mis labios mientras me levanto de la cama con dificultad. Observo la cama completamente mojada y siento como se me baja un poco la tensión.

-¡Kian! –grito un poco asustada ocasionando que ambos despierten- Creo que rompi fuente. –suelto nerviosa-

Este me mira y sin más me toma en sus brazos.

-¡Fabian, toma el bulto de los pequeños! Llama a las tias, a los abuelos. –dice este caminando lo mas rápido posible mientras comienzo a llorar-

-¡Avanza! –grito desesperada-

Entramos al auto y esperamos por Fabian. Al este entrar Kian enciende el auto y comienza a manejar.

-Demonios... -respiro agitada- Pense que habia dormido mal. –digo llorando-

-Yo pensé que me habia orinado, pero segui durmiendo. –suelta Fabian mientras le miro seria comenzamos a reir- Lo siento, debi a haberme despertado. –alza sus manos como rendición-

30 minutos mas tardes

Me encontraba dentro del hospital. Kian entro a la sala mientras los demás esperaban afuera. En verdad no sabia como diablos iba a soportar tanto el dolor, pero aquí me encontraba.

-Amor, respira hondo. –dice este sosteniendo mi mano-

-¡Eso hago Kian! –suelto agitada-

-Lo siento, vamos a comenzar. –dice la Doctora-

Asiento sin más mientras esta me da ordenes que empuje y hago caso a su mandato. Me sentía débil y que no podría hacer esto.

-Vamos, ya viene uno en camino. –dice la doctora mientras Kian continua sosteniendo mi mano y yo le añado un poco de fuerza-

Sale en primer bebe y le escucho llorar.

1 hora con 30 minutos después

Comence a abrir mis ojos, no recuerdo ni cuando me desmaye, pero ahora me encontraba en otra habitación, la cuales me recordaban a cuando peleaba. Miro a mi alrededor y no hay nadie aquí, ¿Qué demonios?

Comienzo a escuchar algunas personas afuera de mi habitación, al parecer discutiendo.

Observo como alguien abre la puerta y entra como una centella.

-Fabi no, deja a mamá descansar. –escucho a April Lee decir mientras entra y le saludo- Ohh... Despertaste.-

-Si... -digo acomodándome-

-Amor... -miro a Kian que entra tomando asiento-

-Mamá, diles que tu vas a ponerle nombres a los niños.. –dice Fabian alterado-

Este comienza a mover mi mano mientras termino aceptando.

-Tienes muchas visitas afuera. –escucho a Kian decir- ¿Quieres que entren? –asiento sin más-

Recuesto mi cabeza mientras cierro mis ojos. Al escuchar esas voces tan reconocidas abrí mis ojos lo mas rápido que pude.

-Hola idiota. –me abraza Sophia-

-Al fin... -esta vez Antonella revolcaba mi cabello-

-Felicidades, son preciosos. –suelta Maximus-

Muerdo mis labios mientras asiento. Aun no los veía, en algun momento tendría que hacerlo.

Horas más tardes

Kian se encontraba buscándome de que comer, estaba hambrienta.

-¿Estas segura? –salgo de mis pensamientos al escuchar a mamá-

-Prefiero tenerlo yo a que en algún momento papá decidida cagarla y hacerle un daño a los niños. –observo a April Lee-

-¿Saben? No tengo animos de pelear. –digo sin más- Solo... Quiero ver a los bebes. –ambas se quedan calladas- Al fin alcabo quiero verlos, darles sus nombres. Tengo ese derecho aunque valles a ser su madre adoptiva Lee. –suelto cabreada por primera vez-

-Okay, ya. No quise que te enojaras. –dice encogida de hombros-

Por alguna razón sentía que me ocultaban algo. Pero, quise ignorar eso.

Escucho como alguien abre la puerta y veo a Kian.

-Aquí esta. –toma asiento a mi lado y yo comienzo a comer-

10 minutos después

Entran las enfermeras, ahora solo nos encontrábamos Kian, mi madre y yo. La enfermera salio mientras observaba a los bebes.

-Tengo algo que decirte. –habla Kian rápido-

-Kian, porfavor no creo que sea el mejor momento. –dice mi madre un poco preocupada-

-¿Qué esta sucediendo? –les miro-

-No daras a la niña en adopción a April Lee. –suelta sin más y antes de que vuelva a hablar lo hago-

-Si, en eso habíamos quedado. –digo seria-

-No, tu habias quedado en eso. Me hice unas pruebas de ADN, porque recuerdo que habíamos tenido relaciones, tu nunca te hiciste un examen ni nada para saber si estabas embarazada y si lo estabas. –suelta un poco alterado- Me hice las pruebas y la niña es mi hija, es nuestra hija. –Comence a llorar descontroladamente-

-Hija... -escucho a mi madre decir-

-Quiero que nos dejen a solas. –esta asiente mientras sale de la habitación-

-Porfavor Jess, piensa bien las cosas. –dice en suplica- Son tu hijos. –los miro mientras niego-

-Necesito mejorarme. –este alza su ceja-

-¿La niña? –me mira esperanzado-

-Quiero cargarlos.-

Este sonríe mientras deposita ambos niños en mis brazos, estaban llorando desconsoladamente. Comienzo a darle leche mientras Kian me observa.

-Ellos no tienen la culpa de nada. –susurra-

-¿Crees que no lo se? –sale una lagrima mientras este la limpia- Necesito aceptar todo esto, no podre, simplemente necesito recuperarme y olvidarme de todo, por un tiempo necesito aceptar que no fue mi culpa y esto no es fácil Kian. No sabes lo que pienso, no sabes lo que sufro, son mis hijos lo se, pero ahora necesito que alguien que este mejor que yo los cuide. –este respira hondo-

Observo detenidamente a los niños y suspiro.

-Este se llamara Kian –observo al niño con ojos azules- Este lo llamaremos Joshua... -tambien tenían los ojos azules-

Termino de darles leche y Kian los toma mientras los pone en el carrito.

Este toma a la niña y me la pasa a mis brazos. La observo detenidamente mientras esta lleva el mismo color de ojos de Kian color cafes claro.

Los rastros de rostros se parecen a los mios. Mi corazón se detiene por un tiempo, ahora las lagrimas comienzan a salir descontroladas.

Acaricio el rostro de la bebe mientras Kian se acerca abazarme.

-Jess... -su voz llama mi atención- Porfavor.

Asiento sonriéndole un poco. Este besa mi frente mientras sale de la habitación.