Capitulo 31

62 4 0
                                    

Pov Jess

Desperte un poco desesperada. Se supone que ya estuviéramos en el aeropuerto ya, pero aquí me encontraba totalmente atrasada. Kian se encuentra preparando su maleta, mientras  yo hago lo mismo. Sinceramente no hemos mencionado más el tema de April Lee es lo mejor solo por ahora.

30 minutos después

Habiamos llegado al aeropuerto, nos encontrábamos todos juntos, pero se sentía un incomodo silencio. Esto no me gustaba para nada Todos hemos cambiados, todos hemos pasado por cosas, todos somos distintos.

Lo mas curioso de todo esto es que no sabíamos a donde iríamos cada uno. Nadie sabia el destino de cada quien por un tiempo. Esto no me agradaba para nada, yo hubiera preferido quedarme aquí en mi isla, ya que todo puede suceder.

Siento como Kian toma mi mano y las entrelazamos.

-Creo que ya es hora. –dice mi padrino un poco dolido-

Todos comienzan a abrazarse hasta que ellos mis padrinos llegan a mi.

-Tengan mucho cuidado. –dice mi madrina en mi oído- Eres igual que tu madre, cuida de mi niño, el te ama y se que tu también. Se fuerte en lo que esto se tranquiliza. –mis mejillas se encontraban ya empapadas-

Aunque me mostraba fría por dentro si tenia sentimientos, siento que algo ocurrirá y esto no me gusta para nada.

¿Por qué tiene que decirme eso a mi? ¿Por qué a mi y no a mi hermano o hermana?

Esta limpia mis lagrimas mientras luego observo a mi hermano y a Glenda. Esta me sonríe, aunque no quiera admitirlo Glenda es mi prima de mi misma edad, ella me conoce tan bien que sabe que solo soy asi o fui asi por el hecho de que mi madre nunca habia estado. Ella y yo fuimos mas criadas como hermanas que como primas.

Aunque por dentro querria gritar y pedir que esto no sucediera tenía que callar. Karlos e yo nos observamos fijamente, sus ojos se encuentran cristalizados, aunque no quiera llorar se que lo hara. Nosotros no hemos sido unidos desde esta etapa, siempre nos mantuvimos como si nos odiaramos.

Me tiro encima de este abrazandole, este me corresponde y dejamos escapar el llanto.

-Porfavor cuida de ti. –dice en mi oído para que nadie escuche- Eres lo mas importante en mi vida, gracias por siempre ocultar mis mayores secretos y perdona por este tiempo ser tan fuerte contigo. –deje escapar alguna lagrimas-

Siento como alguien se une al abrazo y era April Lee. Este nos abraza con fuerza.

-Cuidensen ambas, esto no será por mucho. –susurra-

Asiento.

Me acerco a Glenda y me pongo de cuclillas mientras acaricio su panza. Sonrio mientras limpio mis ojos.

-Sere la madrina de esta niña. –esta alza su ceja mientras le demuestro una sonrisa mas amplia- Sera una niña, lo se. –la acaricio por ultima vez-

Me levanto mientras todos acaban de despedirse. Cada quien toma su rumbo, esto si estaba doliendo como nunca.

En la tarde

Habiamos llegado a Nueva York, todos nos encontrábamos acomodándonos. Bueno yo decidi irme a vivir a lejos de mis padres ellos se fueron a Bronx, yo preferí irme a Manhatan. Esto era gigantesco para decir la verdad.

Marjorie y April Lee vinieron con nosotros rentaron el apartamento de abajo mientras yo rente el único que quedaba que era el de arriba. Cada uno conviviramos, aunque ya sabemos las manias e costumbres de algunos.

La Hija De La Boxeadora Donde viven las historias. Descúbrelo ahora