Corazones de Hielo

Cristián Russeau

-Asique Camus ha ido a hablar con ese psicólogo

-Sí necesita hablar con él para ver después cuando verá a la manzanita

-Cierto que la pequeña rosita iba seguido desde la muerte de Solange tengo entendido

-Así es Afro además nos ayudará para poder comentarle a la manzanita, de mi relación con Camus

-Increíble que ya sean novios. Cortó una rosa y la dejó en un canasto junto a otras

-Novios en secreto. Río por lo bajo

-Bueno pero novios al fin y al cabo

-Sí y no podría pedir otra cosa

-Salvo que Camus se enamore de otro. Máscara había escuchado parte de la conversación y quería hacer renegar al escorpiano

- A Camus solo le gusto yo y nadie más

- ¿Estás seguro?, digo porque el cubo de hielo podría querer a alguién más

-¿Que insinúas crustáceo de agua dulce?. Lo miró penetrantemente, Máscara Mortal le devolvió la mirada con algo de picardía

-No le hagas caso, Máscara solo está fastidiando cómo es de costumbre

-Una broma de mal gusto. Tenía sus cejas fruncidas y los ojos cerrados

-Jajaja, lo siento es que escuché la conversación y fue inevitable no hacerlo, además te preocupas sin sentido todos sabemos que Camus no te dejaría nunca

- Espera ¿Cómo es eso de que "todos sabemos"?. Milo se quedó un poco perplejo con lo que dijo el de cáncer, al parecer había hablado de más, Afrodita negó con la cabeza y suspiró

-Mejor dile que ya toda la orden lo sabe pero, que están tratando de ser discretos hasta que lo anuncien oficialmente. El pisciano dirigió su mirada a Milo y esté a Máscara

-¡Rayos! Sabía que debí quedarme en mi templo. Ahora tendría que explicarle al escorpiano

Por otro lado el Acuariano volvía con Nadja de la escuela, la pequeña tenía ganas de jugar con Kiki por lo cuál Camus no tuvo ningún tipo de problema se la encargó a Mu y le pidió que se asegurará primero de que haga los deberes de la escuela, luego de eso fue rápido hasta su templo, se cambió y partió a su cita con el psicólogo, el consultorio estaba a unas calles del Santuario, casi llegando al centro del pueblo, llegó frente a una oficina amplia dónde fue atendido por una secretaria le comentó que tenía una cita y ella lo hizo esperar en la recepción a los minutos le informó que el Dr Ya lo esperaba, Camus agradeció y entró al consultorio allí se topó con un hombre que aparentaba unos 25 años como él, de piel blanca, cabello castaño atado con una colita en su nuca, ojos grises acelestados y una barba sofisticada sin mencionar los anteojos negros y el elegante traje que vestía.

-Usted debe ser el señor de Acuario, mucho gusto Cristián Russeau para ayudarle. Extendió su mano, Camus la tomó con seriedad

-Mucho gusto. Después de ese saludo Cristián hizo que se sentará en una silla de su escritorio para hablar frente a frente

-Prepararé café mientras, está va a ser una conversación muy larga. Le sonrió

-Está bien. Mientras el acuariano esperaba, observaba los títulos del profesional, tenía un doctorado, más dos reconocimientos, era impresionante y se notaba que era un experto en el asunto

-¿Cuántas cucharadas de azúcar?. Lo sacó de sus pensamientos

-Ehh, con dos está bien. Le sirvió la taza y procedieron a conversar