Corazones de Hielo

Día de Actividades

- Haber si entendí, me estás diciendo que Lorena no vendrá este mes a ver a Nadja, ¿ni a entregarte los documentos?

-Dijo que estaba con mucho trabajo, que recién podrá venir para el cumpleaños de Nadja. Camus observó tranquilo al escorpiano
-Sin embargo dijo que no tenía problema en enviarme los documentos desde París

-¿Que opinas al respecto?

-Que es un poco sospechoso, hasta no tener esos documentos y verificar que son auténticos no bajaré la guardia

-Me parece bien, por otro lado me alegra saber que la manzanita ya será totalmente parte de nuestras vidas. Lo abrazó

-No cantemos victoria antes de tiempo. El acuariano estaba un poco preocupado algo no le sonaba bien de todo eso, pero quiso pensar que Lorena no tenía malas intenciones

-Camus tranquilo, todo saldrá bien relájate. Le besó el cuello

-Sí supongo me dejó llevar por mis pensamientos. Agarró las manos de Milo y las besó
-No sé si te dije pero, me llamó el Dr. Russeau

-¿A si?, ¿Y que cuenta?

-Solo que pasado mañana volverá a Rodorio por otro caso, me propuso aprovechar a tener la otra cita. Camus lo abrazó por el cuello
-¿Me acompañas?

-Claro que sí. Se despidieron con un beso y el escorpiano regresó a su templo y Camus se quedó ordenando la habitación del copito de nieve

Por otro lado, la manzanita estaba de compras con su tío Kanon, y la novia de su tío quién no era otra que la señorita June, la amazona de camaleón, los tres fueron a almorzar y le regalaron un lindo vestido de verano a la pequeña, fueron a una plaza y se sentaron a descansar, más tarde iría con su tío Afrodita a ayudarle con el jardín

-¿Te has divertido princesa?. El gemelo menor, la tenía sentada en sus piernas

-¡Muchísimo tío Kanon!

-Me alegra saberlo, la próxima si quieres podemos ir al cine. June le acariciaba la cabecita con ternura

-¿En serio tía June?. La miró con brillos en los ojos

-Claro, si tu tío Kanon quiere traernos. Le dió un beso en la mejilla a su novio

-Solo digan cuando y le pediré permiso a Camus. Estaba muy confiado

-¿Podemos venir cuando den Frozen 2 , tío?

-Sí podemos. Le sonrió

-¡Sí!

Después de eso regresaron a acuario, el geminiano la traía en sus hombros, June un poquito preocupada vigilaba cada tanto que no fuera a caerse

-¡Hola papi ya estoy en casa!

El francés apareció con una toalla en sus hombros acababa de darse un baño, se agachó y Nadja fue corriendo a sus brazos

-¿La pasaste bien?

-¡Si! Y mira. Le mostró el bello vestidito que le habían regalado

-Está hermoso, ¿Les diste las gracias?

-Sip

-Bueno nosotros nos retiramos pero antes, quisiera pedirte permiso para llevar a Nadja al cine para ver Frozen. Kanon no perdió oportunidad

-Sí claro no hay problema

-Genial gracias Camus. June respondió con una sonrisa

-Adiós princesita. Dijo la Felíz pareja