Martes: 27:05:2036
Al despertar, Claudine se levantó lentamente del suelo, con los ojos llenos de lagañas e hinchados, podía escuchar el sonido de la televisión que provenía desde la sala de estar del piso de abajo.
Talló sus ojos y con la vista un poco borrosa, miró el reloj de su habitación: 1:36 a.m.
Intentó abrir la puerta, pero el cerrojo estaba aún asegurado desde el otro lado con llave.- ¡Laura! - Tenía la voz ronca. - ¿Laura?, abre, necesito salir - Le volvió a llamar, pero ni un insultó respondió. Tal vez se quedó dormida: Pensó Claudine.
La madrugada era gélida, el cristal de las ventanas estaba empañado.
Claudine, caminó hacia la ventana de la habitación donde estaba. A través del cristal podía ver la densa neblina en el ambiente. La preocupación no la dejaba, era intrigante y triste no saber algo sobre su madre.¡estúpida! Tenías que dejar la mochila en la entrada de la puerta principal - goleó su frente y volteó los ojos.
Se puso un abrigo y tomó algo de dinero del cajón de su madre. Abrió la ventana y salió lenta y cuidadosamente, el techo estaba inclinado, echo de tejas. Sus zapatos del colegio no le ayudaban mucho. Se tomó con fuerza de la ventana, pero al intentar dar un paso, resbaló; su pecho y cara golpearon contra las tejas, lo que provocó que se soltará de la ventana. Resbaló sobre las tejas. Al terminar el techo y ver el suelo, intentó agarrarse del desagüe de chapa galvanizado del techo, pero fue inútil, calló hasta el piso de abajo en la acera. En cuestión de segundos, se sofocó al caer.
Agh - Se quejaba intentando levantarse - ¡Maldito seas Charly!
¿Y cómo no culparlo?, dejó la casa a cargo de la estúpida de Laura, ¡Maldito seas Charly!.
Cuando por fin pudo levantarse, se dirigió hacia la entrada principal, por su puesto su mochila estaba dentro de casa. Tocó varias veces la puerta, pero nuevamente, no hubo ninguna señal.Dispuesta a ir hacia el hospital donde probablemente tenían a su madre, comenzó a caminar.
¿Estaría su madre en el hospital que tenía en mente?, era lo más probable, pero en caso de no encontrarla allí, haría lo posible por rastrearla.2:08 a.m
La neblina era un poco más densa y el ambiente aún más gélido, se podían oír sus apresurados pasos por las calles, bajo la luz de las farolas.
¡Debo apresurarme!: se decía a sí misma. Lanzaba vapor por su boca al respirar, el mismo vaporsito que lanza nuestro cálido aliento en tiempos fríos.Llevaba casi una hora caminando, entre calles y callejones, con la garganta a dolorida por el aire frío.
Se estaba agotando demasiado, así que decidió tomar un descanso; se sentó en los escalones de una de las muchísimas casas que había.
Respiró profundamente y suspiró, hacia demasiado frío y aunque había estado caminando, eso no le impedía temblar de frío.Dio otro suspiro angustiada.
Maldita sea, tienes que estar bien mamá - murmulló y casi a punto de derramar lágrimas...Se miraba alguien en una oscura calle, parado, o tal vez ¿parada?
Estaba allí, sin moverse, sin decir nada...
Un poco asustada, dijo Claudine - Buenas noches - con la voz temblorosa; después preguntó -
¿Puedo ayudarle en algo?
Pero siguió sin decir, ni hacer algo. Inmediatamente Claudine se levantó, cuando observó que se acercaba lentamente. Su mente empezó a llenarse de pensamientos sumamente terroríficos, comenzó a lamentarse por dentro el haber salido a tales horas de la madrugada. Estaba preparada para correr cuando...¿Eres Claudine? - aquella persona salió a la luz, era una anciana, se notaba débil y vulnerable.
¿Perdón? - preguntó Claudine, confundida.
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Quiero morirme en ti.
Bilim KurguDeliremos un rato y clavemos el ojo más allá de la infamia, para poder visualizar un mundo mejor. Un mundo libre de todo veneno que no provenga de los miedos humanos y de sus vanas pasiones. Un mundo libre del amor trivial e ideologías vanas. Piensa...