Capitulo 8

177 6 0
                                    

Sus manos se agarraron a su pelo, tensando su cuerpo mientras un gemido enrabietado llenaba los oídos de ella y sentía su caliente pre-eyaculación gotear en su lengua. Era salado, rico, haciendo que se percatase de lo desesperada que había estado por degustarlo. Ella quería todo eso, quería sentir que los chorros calientes de su semen llenando su boca, recubriendo su lengua y atormentándola mientras él encontraba su liberación en ella.

- _______, nena - Su voz sonaba ronca mientras él follaba sus labios lentamente - Nena, esto es tan jodidamente bueno que podría morir, pero voy a caerme al suelo en cualquier momento.-

Para demostrar sus palabras él casi tropezó, una risa ahogada, torturada llenando el aire cuando ella despacio lo liberó. Alzando la vista lentamente, su aliento quedó atrapado en el hambre que asomaba en su mirada.

- Hijo de puta, finalmente consigo meter mi polla en esta dulce boca otra vez y no puedo tenerme en pie el tiempo suficiente para disfrutar de ello.-

_______ estaba temblando mientras se apartaba duramente, manteniendo los labios firmemente cerrados mientras miraba fijamente la húmeda longitud de carne masculina. Dios querido, ¿Qué estaba haciendo? Había perdido la cabeza completamente.

- Demonios - Dijo él mientras se apuntalaba contra la pared para mantenerse en pie - Supongo que puedo olvidarme de la liberación, ¿No? ¿Puedo al menos tener algo de ayuda para ir a la cama?-

Ella sacudió la cabeza lentamente. Él la miraba con una apasionada intensidad y un hambre sexual que hacía llamear su cuerpo conscientemente. Esto era una locura, se dijo ella ferozmente. Ella sabía de qué iba esto suficientemente para saber que esto no aliviaría su hambre por él. No hacía más que empeorar las cosas.

– Maldición - Ella caminó hacia él, colocando su brazo alrededor de su cintura y conduciéndolo del cuarto de baño a su cama.

- Sí, los dos estamos malditos - Gruñó él mientras ella apartaba las sábanas al final de la cama y él se sentaba lentamente - Hijo de puta, no va a haber manera de poder dormir bocabajo con esta erección, ______.-

- Ya la tenías antes de que te tocase - Dijo frunciendo el ceño mientras él la miraba en suave acusación.

- Por ti - Gruñó él - Ha estado duro desde la noche en que saliste de entre las sombras de Sandy Hook. Maldición, no puedo estar demasiado lejos de mi gata.-

Ella casi perdió el equilibrio con la protesta apenas expresada. Luego lo perdió realmente cuando la sujeto para echarla sobre la cama a su lado. Recostándose contra él, se quedó mirándolo fijamente, la alarma pasando como un rayo por su sistema. Demasiado cerca. Él estaba ahora demasiado cerca para que ella pudiera mantener cualquier tipo de control.

- Necesitas dormir - Por favor duérmete pensó ella, oh Dios hazlo dormir.

Pero ella no podía resistirse a tocar la incipiente barba a lo largo de su mejilla, sus dedos acariciando, las sensibles yemas estremeciéndose de placer con la áspera sensación. Él la miraba, relajado para variar. Ella nunca lo había visto tan controlado, sonriéndole tranquilamente, con sus ojos oscuros llenos de calor.

- Necesitas follarme - Él sonrió abiertamente, provocativamente, sus ojos dilatados casi negros mientras la miraba - Ven, una sola vez. Prometo que no me quedaré dormido sobre ti - La engatusó con una voz aterciopelada, ronca, que enviaba llamaradas eléctricas de pasión a través de su cuerpo. ¿Cómo se suponía que ella podría luchar contra este nuevo y repentinamente gentil Zayn?

______ se quedó mirándolo en estado de shock. ¿Estaba bromeando con ella? Nunca antes lo había hecho. Él le había contestado bruscamente o le había dicho algo imposiblemente arrogante con la única intención de enfurecerla. Él le había gruñido, se había burlado de ella, la había llamado por hermosos diminutivos cariñosos y, en general, hizo todo lo imposible por convertir su vida en un infierno. Pero nunca le había gastado bromas tan amablemente. Tan dulcemente.

Besos Ardientes (Zayn&Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora