Dulce Misterio ( Spencer Reid x TN)

XII

Hay un aviso importante en mi libro de. Anuncios, se trata de la nueva novela de Spencer Reid.

Narra TN.

"Yo soy el padre de tu hijo."

"Yo soy el padre de tu hijo."

"Yo soy el padre de tu hijo."

"Yo soy el padre de tu hijo."

Esas palabras se repetían una y otra vez en  mi mente, ni siquiera podía concentrarme en nada de lo que hacia.

¿Cómo era posible? Mi amor secreto, mi Crush, mi príncipe perfecto era...
¡EL PADRE DE MI HIJO, Y LO MAS SORPRENDENTE ES QUE TUVE SEXO DESENFRENADO CON ÉL!

¡QUE SUERTE TENGO, POR DIOS!

No podía creerlo pero ahora todo tenía sentido: mi lobo dijo que se llamaba Spencer, su voz me era familiar y cuando se quitó la máscara pensé que me imaginaba que él pero no fue asi porque ERA ÉL.

Me senté y suspiré. ¿Y ahora que? Me había plantado la idea de ser madre soltera pero ahora que Spencer sabe que será padre...¿Lo aceptará en su vida? Es su obligación... Pero del dicho al hecho hay un gran estrecho.

-¿TN?- la voz de Spencer me sacó de mis pensamientos.- ya es hora de irnos.- dijo con su hermosa sonrisa.

Espero que mi hijo herede esa sonrisa.

Miré el reloj y se me había pasado volando las horas y más con todo esto, creo que Penélope tiene razón cuando dice que soy muy distraída.

- Debo cerrar todo.- dije nerviosa.

Él me afecta mucho.

- Te espero afuera.- dijo sonriendo y se fue.

¡Joder! ¡¿Que hago ahora?!

Me moví a la velocidad de la luz y terminé de arreglar todo, tomé mis cosas y cerré el lugar.
Caminé hasta donde está Celia, a quién le estrecho las llaves, y luego me fui a buscarlo.
Spencer me esperaba afuera recostado en su auto mirando hacia la calle.

Bebé, ¿Tu padre sabe lo sexy que se ve así?

Caminé hacia él y al parecer me escuchó porque se dió vuelta y me abrió la puerta del acompañante.

-gracias.- dije ante su caballerosidad.

Él entró por la puerta del conductor y en silencio comenzó a manejar. Durante el trayecto no dijo nada pero en un semáforo sentí como su mano descansaba en mi rodilla y juro que casi muera de la excitación.

Si lo sé, es tonto y raro, pero solo una embarazada hormonal se sentiría así cuando se entera que el chico que le gustó casi todos los años de su existencia es el hombre con el que tuvo el mejor sexo de su vida y por ende el padre de su hijo.

¡NO ME JUZGUEN!

Cuando el auto se estacionó frente a SU departamento me di cuánta que si lo pensaba bien, ese día cuando me fui tomé un taxi de esta dirección y me fui al departamento de Penélope porque aún no tenía un departamento como la gente.

- bajemos, hablemos en mi departamento.- dijo y asentí.

Si les digo la verdad estoy nerviosa, si hubiéramos ido a mi departamento creo que me habría dado más confianza pero ahora estoy entrando en su territorio.

Que Diosito no permita que haga alguna estupidez ni que me vea cómo tonta.

Ambos subimos al ascensor y realmente era incómodo ese silencio pero realmente prefería no hablar aún.
Cuando llegamos a su puerta él sacó sus llaves y al abrir él entró primero y prendió todo par invitarme a pasar.

Esa mañana ni me había detenido a mirar mucho el lugar pero ahora que lo veo me gusta la cantidad de libros que tiene, supuse que tendría una gran biblioteca pero no tan así.

-¿Quieres tomar algo?- dijo Spencer cerrando la puerta.

- Agua.- dije tímida, su mirada realmente me puso nerviosa.

- Enseguida te la traigo, toma asiento, por favor.- dijo señalando su sofá y eso hice.

Luego de unos minutos él volvió con el vaso de agua y me los entregó.

- Gracias.- dije y él asintió para sentarse frente a mi, algo que agradezco porque si se sentaba junto a mi me sentiría más nerviosa.- tienes muchos libros, eso es fantástico.- dije tratando de romper el hielo.

- Gracias, me gusta leer mucho.

- Lo sé.- dije sin pensar y eso me alarmó.

Genial ahora sabrá que lo he acosado toda su vida.

Sin embargo él no pareció darle tanta importancia porque decidió comenzar con el tema que nos importa.

-¿Por que te fuiste esa mañana y ni siquiera te despediste de mi?- dijo directamente.

Yo lo miré y vi como eso lo había molestado.

- Porque eras un desconocido y no sabía si eras o no peligroso, la noche anterior no me has visto bien al parecer porque no me has reconocido,además por algo ya te di mi segundo nombre.

-¿Era por seguridad?- dijo y yo asentí.- entiendo.

- Ahora me toca a mí ¿Cómo supiste que era yo?- dije curiosa y él sonrió.

- Te he buscado mucho, por casualidad vi que Penélope tiene una pulsera casi igual a la tuya solo que en azul y se lo pregunté. Recordé que ella había dicho que iría contigo al Club y que te disfrazarias de Caperucita o de vampiresa. Al final fue ella quién me lo dijo y me confirmó que estás embarazada de mi bebé.

¡CON QUE ERA PENÉLOPE! ¿Porque no me lo dijo ? Así me preparaba para esto.

- Le pedí que no dijera nada.- dijo Spencer adivinando mis pensamientos.

Asentí y respiré profundo para hacer aquella pregunta que era insistente en mi mente y me molestaba mucho.

-¿Y ahora que?- pregunté y él me miró confundido.- es decir, yo había asumido ser madre soltera y criar sola a mi bebé pero ahora...¿Piensas estar en la vida del bebé o no?

Él lo pensó y se levantó para acercarse a mi y me tomó de la mano.

- Por supuesto que estaré en la vida del bebé y le daré mi apellido, es mi hijo y mi responsabilidad, así como tú también lo eres.

- Spencer, una vez que entres a su vida promete que no saldrás de ella. El bebé es inocente de todo, debes estar ahí para él sea cual sea la circuntancia.- dije sería.

-¿Temes que lo abandone?- preguntó acariciando mi mejilla y yo asentí.- nunca lo haría, sé lo que es que tú padre te abandone, yo no le haría eso a mi hijo.

- gracias.- dije aliviada.

- Ahora tenemos que hablar de algo más.- dijo y yo lo miré con fundida.

-¿Sobre que?

- Sobre que quiero que vivas conmigo.- dijo serio.

Y yo me quedé muda ¿Vivir con él? ¿Señor no estoy soñando? Por años desee que me dijera eso pero ahora que me lo dice no puedo creerle.

-¿Hablas enserio?- dije sorprendida y él me sonrió.

- Por supuesto que sí. Podemos buscar una casa y vivir los dos juntos.

- Pero...¿Porque quieres eso?- dije curiosa.

- Porque quiero estar cerca de mi hijo y de mi chica.

¡ALTO! ¡¿ESCUCHÉ BIEN O ESTOY SOÑANDO?!  ¡¿DIJO "MI CHICA"?!

-¿"Tu chica"?- repetí aún sin poder asimilar lo que dijo.

Spencer acunó mi rostro entre sus suaves y cálidas manos y me sonrió.

- Si, TN, si tú quieres serás mi chica y si no quieres, te convenceré de serlo.

¡JODER, CLARO QUE SI! digo eh... Bueno...mmm Por favor ¿A quién engaño?  con una propuesta así no me hago la dificil.

- ¿Que dices TN? ¿Serás mi chica?