Dulce Misterio ( Spencer Reid x TN)

XXII

Narra TN

Ya habían pasado dos semanas desde que Spencer y yo hablamos ¿Y en qué quedamos? En nada. Luego de sus palabras yo solo dije que necesitaba tiempo para intentar confiar en nuestra relación pero la diferencia de ahora es que ya no lo evitó como antes sin embargo aún me enoja que JJ se quede con él pero cuando él me preguntó si podía dormir conmigo yo le dije que no estaba lista para estar cerca de él de esa forma.

¡Ah! ¿Quien me entiende?

Estaba ordenando todo cuando un fuerte mareo casi me hizo caer pero unos fuertes brazos me sostuvieron y en el fondo deseaba que fuera Spencer pero cuando alcé la cabeza vi a mí jefe preocupado.

– TN, ven.– Dijo para hacerme sentar en la silla y darme agua.–¿Te sientes bien ? Respira hondo.

Y le hice caso, a veces me daba miedo estás mareos pero no es que ocurran muy de seguido sin embargo creo que no es muy normal.

–¿Mejor?

– Si, gracias señor.– Dijo cansada.

– Tomate unos días libres. ¿Tienes a alguien quiere lleve a casa?

Yo negué. Penélope estaba en un caso y Spencer también, seguramente estaban muy ocupados.

– Está bien,te llevaré a casa.

– No es necesario señor, yo puedo ir sola.

– No me discutas TN, no me voy a arriesgar a que tengas un accidente con el auto.– Dijo serio y yo solo asentí.

Poco a poco fui recuperándome y el señor me ayudó a ir al auto luego de recoger mis cosas. Normalmente me niegaria pero tenía miedo por mí bebé ¿Y si teníamos un accidente? No, mejor no. Prefiero que hablen de mí a perder a mí bebé.

Luego de haberle dado mí dirección a mí jefe él comenzó a manejar y por un momento me senti un poco atraída a él. Generalmente lo veo como un idiota egocéntrico pero ahora lo veo como un hombre amable y considerado ¿Será que las hormonas me están jugando una mala jugada?

– ¿Sucede algo?– Preguntó él.

– No, solo... Estoy muy agradecida por este favor que me está haciendo.

– Estás embarazada TN, debes ser más cuidadosa. Ya no debes trabajar más, sabes que tienes un permiso materno que puede ir hasta un año.

– Lo sé... Solo es que me aburro estar en casa sola.– Dije jugando con mis dedos.

– Bueno, puedo darte algunos archivos y puedes trabajar desde casa. Tengo muchas cosas pendientes y podrías ayudarme.

–¿Enserio puedo trabajar en casa?– Dije emocionada por la idea.

– Si, pero por ahora quiero que descanses bien. Tu salud y la del bebé son lo más importante.– Dijo serio y sentí mí corazón acelerarse.

¿Que me sucede?

– Entiendo.

El resto del trayecto fue silencioso pero no incómodo sin embargo me sentía muy cansada que se me cerraba los ojos.

– Hermosa ya llegamos.– Dijo alguien en mí oído y pensé que era Spencer.

Sin media dormida me sacaron del auto y me cargaron. Escuché que abrían mí puerta y luego de unos minutos le dejaban en la cama y me tapaban. Luego sentí unos labios sobre los míos y correspondi el beso.
Era un beso apasionado y necesitado, yo lo necesitaba. Necesitaba a...

– Spencer...– Gemí y todo se detuvo.

Él se alejó de mí y me beso la frente.

– Descansa hermosa.– Dijo una voz suave en mí oído y me beso en la mejilla.

Y luego me dormí.

(*)

A la mañana siguiente me desperté porque alguien golpeaba mí puerta como loco. De mal humor me levanté y caminé furiosa a la puerta.

–¡¿ QUE ACASO NO SABES QUE DESPERTAR A UNA EMBARAZADA ES TU FIN?!– gritë abriendo la puerta y me encontré con Spencer.– ¡SPENCER REID MAS TE VALE QUE SEA BUENO POR LO QUE VIENES!

–¡Y LO ES!– gritó enojado.– ¡¿QUE CARAJOS HACÍAS CON ESE IDIOTA DE TU JEFE ANOCHE?!

–¿Que?

Y entonces recordé lo del mareo y que mí jefe me trajo a casa y luego lo del... Beso. ¡Esperen! Spencer no me dice "hermosa" y no olía a él ahora que lo recuerdo... Entonces ¡Mierda, besé a mí jefe!

– ¡TN!– Dijo el furioso.

–No estuviste anoche acá en el departamento ¿Verdad?

– No.

¡Mierda, mierda y más mierda!

–¿Sucedió algo que yo deba saber?– Preguntó cruzados de brazos enojado.

– Creo que besé a mí jefe creyendo que eras tu.– Dije sorprendida.

–¡¿Que hiciste que?!– Gruñó molesto.

Él entro molesto y yo retrocedí, nunca lo vi tan furioso y realmente me asustaba este lado de él.

– Explicate ahora TN.

– Bueno yo... Yo tengo unos mareos fuertes a veces, anoche me mareé en el trabajo y si no fuera por mí jefe me habría caído. Él me sostuvo y luego me trajo a casa, estaba agotada por lo que debí dormirme, él me habrá llevado a la cama y...creí que eras tú porque estaba medio dormida y lo besé.

–¿Solo un beso?– Dijo dudoso

– ¿Crees que tuve sexo con él?– Pregunté ofendida.– No soy una cualquiera Spencer, y no me acuesto con alguien a quien no amo.

– Te acostaste conmigo sin saber quién era yo.

– Estaba ebria.

– Y a noche estabas cansada, y cuando estás en ese estado pareces ebria.

–¡Spencer Reid no puedo creer lo que insinuas!– Dije molesta.–¿ Pero sabes que? No te incumbe si me acosté o no con él. Si no confías en mí amor por ti entonces no puedo hacer nada mas, me lastimas realmente... Primero JJ y ahora esto ¿Debo tomar esto como una señal que juntos no somos buenos?

– TN yo no quise decir...– Comenzó arrepentido cuando gemí de dolor.– ¡¿TN?!

– Spence...– Dije agarrándome del vientre y luego sentí que algo escurría por mis piernas.

–¿Es pis?– Pregunta confundido viendo lo que yo.

– No...– Dije tratando duro y nerviosa, lo miré asustada.– Rompí fuente.

–¿Quieres decir que...?

– El bebé va a nacer.