Dulce Misterio ( Spencer Reid x TN)

XXIV

Narra TN

1 mes después.

Me desperté a la madrugada al no sentir a Spencer a mí lado. Me gire y efectivamente: él no estaba ahí.

Las cosas cambiaron este último mes, desde que Jason nació Spencer se tomó unas vacaciones para estar con nosotros la mayor parte del tiempo. JJ ya no se mete en nuestra relación y aceptó frente a Spencer que me dijo esas cosas, ahora ella vive en el departamento de Spencer, ya que está divorciada, y Spencer vive conmigo en nuestra casa. Sip, finalmente nos mudamos y vivimos en una hermosa casa, aún hay cosas por desempacar.
Aún recuerdo cuando me dio esa sorpresa.

Flashback

Ya nos dieron de alta a Jason y a mí así que era hora de volver a casa. Spencer dijo que JJ se quedaría en el departamento de él hasta que pueda conseguir otro lugar, algo que aún me molesta pero no puedo hacer nada contra eso porque la entiendo, ella está divorciandose y apenas pudo sacar un bolso de ropa de su casa y eso que fue con policías y todo porque Will es bastante violente y le teme.

–¿Iremos a mí departamento?– Le pregunté a Spencer quien acomodaba a Jason en si silla para bebés.

– Antes debemos hacer algo importante.

– ¿Que cosa?– Dije extrañada.

– Ya verás.– Dijo él sonriendo traviesamente.

Él comenzó a conducir y de pronto nos dirigimos a una zona recidencial muy segura llamada "Hesler", sin embargo las casas se encontraban bastantes separadas unas de otras y eran grandes con patios muy grandes donde los niños corrían jugando. Miré a Jason dormir tranquilamente y sonreí al imaginarme a mí bebé crecer y jugar con otro niños.

– Llegamos.– Dijo Spencer estacionando frente a una hermosa casa.

–¿Que hacemos aquí?– Dije confundida.

– Ven.– Dijo él para luego sacar a Jason con su silla del auto y me tomó de la mano para dirigirnos a la casa.

Al entrar la casa era mucho más cómoda y hogareña de lo que se veía por fuera. Era increíblemente hermosa y por un momento se me hizo la ilusión de vivir en ese lugar.

–¿Te gusta?– Preguntó Spencer.

– Es muy bonita y acogedora.– Dije maravillada.

–Que bueno... Porque es nuestra.

–¿Que?–Dije sorprendida.

– La compré hace unas semanas. Sé cuánto te gustan este tipo de casas, estilo victoriano, y más en este barrio que es seguro. Así que la compré para ti y Jason.

– Oh Dios mio ¿Hablas enserio Spencer?– Dije aún dudosa.

– Por supuesto, tengo los títulos de la casa en el auto si quieres verlos. Esta casa es tuya, quiero darte todo lo posible y mejor que pueda hacer.

– Pero está casa debe costar una fortuna.

– ¿Que es una fortuna comparado con la felicidad y seguridad tuya y del bebé?

– Spence... No sé que decir, esto... Esto .... No lo puedo creer.

– Solo dime qué me amas todos los días y me confirmó con eso.– Dijo para besarle y yo le seguí el beso.

– Te amo Spencer.– Dije al separarme y él me sonrió.

– Entonces soy feliz.

Fin del flashback

– Estás aquí.– Susurré cuando encontré a Spencer sentado en la silla mecedora con Jason contra su pecho dormido.

– Tenía el pañal sucio, no quería despertarte, necesitas descansar más.–Dijo mirándome con una sonrisa que derrite.

Spencer es un padre estupendo, generalmente a los hombres les fastidia levantarse a cambiarle el pañal al bebé o bañarlo, pero Spencer incluso me pelea por hacer esas cosas, aún recuerdo hace unas noches cuando Jason lloró por el pañal sucio, Spencer parecía emocionado por atenderlo.

– Vas a malcriar al bebé y a mi así.– Dije acercandome.

– Eso sería un placer para mí.– Dijo para luego acostar al bebé en la cuna y arroparlo.

Yo me acerqué por detrás y lo abracé, él tomó mis manos y las besó.

– Entonces soy muy afortunada.

– ¿Sabes que deseo en este momento?

–¿Que?

– Que el tiempo se detenga y seamos felices así por siempre, no quiere volver a la UAC si debo estar lejos de ustedes mucho tiempo.

–¿Y que piensas hacer?– Dije besando su mejilla.

– No lo sé,aún estoy pensando en eso.

– Sea lo que sea yo te apoyaré.

– Lo sé, siempre cuento contigo. Ahora...¿Que te parece si volvemos a la cama a dormir?– Dijo sonriendo pícaramente.

– ¿Me abrazaras toda la noche?– Pregunté inocentemente.

– No te soltaría por nada del mundo.

Él apagó la luz de Jason y me guío al cuarto para seguir descansando, pero él cumplió su palabra y no me soltó hasta el día siguiente.