Lo que somos tu y yo

8. Breaking

Alexey estaba fuera del salón que se supone debía limpiar, era su primer día, así es que estaba esperando que todo el mundo saliera de ahí sin prestar mucha atención a su entorno y tratando de pasar desapercibido, pero tratándose de Lexy eso era algo imposible, no solo por el hecho de ser él mismo, sino por el par de artefactos para limpieza que le acompañaban.

Conforme los bailarines salían de aquel salón miraban al rubio, que ya se encontraba exactamente en el portón de aquel recinto con pisos de madera y espejos enormes que funcionaban como paredes.

Alexey, con su característica indiferencia entró... se puso los audífonos después de seleccionar un playlist y comenzó a hacer lo propio.

Primero los espejos y después el piso, pensó.

Lo importante era terminar su labor e irse de ahí, después de todo, tenía mejores cosas que hacer y no es como si alguien fuera a llegar para verificar la calidad de su trabajo.

Mientras cantaba internamente somebody else de The 1975 pasaba un trapo sobre los espejos hasta donde la extensión de su brazo le permitía, ya que el rubio no era precisamente alto. Estaba demasiado concentrado creando un escenario imaginario súper dramático entre él y Anái con esa canción como soundtrack, que no se percató que alguien había entrado al salón y se acercaba a Lexy paso a paso.

De pronto el rubio sintió la presencia de alguien a sus espaldas, apenas pudo reaccionar pero la persona contraria fue más rápida y logró asustar al rubio, quien por un segundo sintió que el corazón se le salía del pecho.

‒ No andes por ahí todo distraído jajaja no pensé que asustarte fuera tan fácil ‒

‒ No me asusté, solo me sorprendiste ‒

‒ Si claro ‒ dijo Ellie mientras seguía riendo a carcajadas

‒ ¿Qué quieres? ‒

‒ Solo vine supervisar que hagas bien tu trabajo, mira te falta un poco por ahí‒

‒ Si no me vas a ayudar mejor vete ‒

‒ ¿Estás enojado porque te asuste? jajaja ‒

‒ No. pero ¿solo has venido a molestarme? ‒

‒ Ay relájate. Aunque no lo creas no todo gira en torno a ti. Es que he quedado con Kenickie, lo veré fuera del edificio así es que le estoy esperando ‒

El pelirrojo y Ellie eran cercanos, eran en realidad muy buenos amigos. Nickie pasaba por lo menos, una o dos veces a la semana por Ellie para ir a comer juntos, tomar un café o solo para ponerse al día sobre sus vidas y las de sus conocidos. Así es que era común verlos juntos por esa zona de la facultad, o a Nickie esperando por Ellie, quien tenía un horario de prácticas y clases bastante desordenado.

‒ Le diré que venga por mí hasta aquí para que también te vea jajaja ‒ dijo la chica‒ Ya me respondio, dice que no encuentra este salón jajaja ¡que tonto es! mejor me voy antes de que se pierda ¡que termines pronto! ‒

‒ Ellie, cierra la puerta ‒

La chica salió casi corriendo del salón, iban tan deprisa que al abrir el potón se impactó con una figura masculina.

‒ Ah, lo siento ‒ dijo la pelinegra. Mientras cerraba la puerta le dio la impresión de que esa persona iba a entrar al salón, así es que preguntó

‒ ¿Tienes clase o algo? ‒ Porque en este momento están limpiando la sala.

‒ No, yo ya me iba ‒ dijo el chico