Lo que somos tu y yo

4. Charlemos

 Nickie: Hoy vine a la universidad. El viernes casi no hablamos (carita llorando) ... vamos a comer. ¿A qué hora sales?

Ellie: Estoy saliendo. ¿Dónde te veo baby? ¿Quieres comer en la cafetería de la universidad?

Nickie: De ninguna manera, vamos por pizza.

La chica pelinegra jugaba con la pajita del agua gasificada mientras le contaba a su amigo pelirrojo como iban las clases, éste mordía una rebanada de pizza mientras asentía. Cuando Ellie terminó sus anécdotas lo miró.

‒¿Cómo te va a ti de pasante?

‒Bien, ya estoy pensando en que instituciones podría tener algunas oportunidades de trabajo cuando finalmente sea libre de la universidad ‒

‒Pero aún te falta la tesis ¿cierto? ‒

‒ Si...bueno... pero me gusta pensar y planear a largo plazo‒

Antes de que Ellie comenzara una nueva historia y hablara sin parar, partiendo de la última frase que acababa de escuchar, Kenickie dijo.

‒Oye, en realidad también quería preguntarte algo. Sobre lo que pasó el viernes‒

La chica abrió los ojos esperando que no fuera lo que temía, aunque estaba consciente que no iba a poder eludir la siguiente conversación.

‒ ¿Por qué te llevaste a tu amigo? ¿Lo cuidas mucho? No parece alguien que necesite protección y además ¿qué fue eso de emparejarme con Rebecca tan de repente frente a Alexey?

‒ Pues yo solo pensé que nos podríamos divertir entre todos, además no fue mi culpa que ella anduviera por ahí cerca y a decir verdad, no es como que te haya molestado... estabas encantado besándole el cuello apenas te dí la espalda cuando me dijiste que no irían ‒

‒ No soy tonto. Me fui porque ustedes no me querían ahí por alguna razón y no iba a terminar la noche yo solo aburrido mientras ustedes... más bien TÚ te habías deshecho de mi. Escucha Ellie, solo quiero me expliques qué pasó ‒

Ellie exhaló. Le contó solo lo necesario para que entendiera que Anái tenía un crush con Alexey y esa vez habían salido para tuvieran la oportunidad de conocerse un poco, pero las cosas no iban del todo bien porque el castaño se acobardó de último minuto.

‒ ¡Qué tontería!

‒ No es tonto, no todas las personas son igual de fáciles como... otros. A algunos chicos aún les interesa avanzar lento y firme hacia un romance sabes y además...

‒ ¿A Lexy le gusta eso? ‒ La interrumpió.

Ellie miró fijo al pelirojo.

‒ ¿Por qué es de tu interés?

‒Esta bien si no me quieres decir. Puedo averiguarlo por mi cuenta ‒ Sonrió.

Ellie decidió que era mejor terminar la conversación. Desde luego que le preocupaba que alguien con los hábitos de Nickie se involucrara fugazmente con su amigo rubio. Lexy podía ser un pesado en muchos aspectos pero estaba segura que no era esa clase de persona y no iba a permitir que Anái quedara fuera de todo esto sin haber intentado algo... no después de percatarse de la manera en que el castaño miraba a Alexey, como si fuera una deidad en la tierra.

 

...

Anái se encontraba solo, sentado en el salón de clases esperando al profesor de asignatura mientras bebía un espresso y revisaba su móvil, cuando llegó una notificación de un número desconocido que casi hace que se ahogue con el sorbo que había dado.

Hola Anái. Ellie me dió tu número. Soy Alexey.

De inmediato abrió la aplicación y vió la foto de perfil de la persona que acababa de enviar el mensaje. En la imagen se observa al rubio sentado en una mesa de lo que parecía la terraza de alguna cafetería local, con una disimulada y arrogante sonrisa... apoyando su mentón sobre una mano, cubriendo un poco de su mejilla mientras el cabello dorado, algo despeinado, caía sublime sobre su fino rostro.

Esa foto... definitivamente había sido tomada por la persona que compartía mesa con Lexy ¿alguna clase de cita?

Anái hizo zoom para observar cada detalle y terminó por reconocer el lugar; se trataba de Margotte's, una cafetería cercana a la universidad conocida por servir pasteles y bebidas deliciosas además de tener precios más elevados de lo que un universitario común podía pagar.

Anái: ¡Hola Alexey!

Alexxey: ¿Cómo estás? No te molesta que le haya pedido tu número a Ellie ¿o si?

Anái: Para nada es molesto. Yo estoy bien, tan solo esperando a que comience mi clase ¿y tu?

Alexxey: Pues no me quejo. ¡hey! en realidad quería disculparme por haberme quedado dormido aquella vez, no fue intencional jaja me dió un poco de pena cuando desperté.

Alexxey: Y otra cosa ¿por que te fuiste tan temprano? es decir, tal vez no sea de mi incumbencia pero ¿tuviste algún contratiempo? Me quedé un poco preocupado.

Anái: Lamento haberte preocupado... es que recordé que tenía algo de trabajo para una clase y quería llegar a casa para descansar un poco para empezar lo antes posible.

Eso era mentira. El castaño pensó que su excusa era terrible pero fue lo más rápido que se le ocurrió. No podía decirle a Lexy (el cual se había quedado dormido como piedra producto de su intoxicación de esa noche) que el motivo de haberse retirado del departamento fue el mismo rubio... que estaba recostado, inconsciente, hermoso y vulnerable. Esa imagen lo volvió loco pero antes de que continuara con su tortura, prefirió marcharse.

Anái: ¿En esa foto estás en Margotte's?

Alexxey: Si, es de hace un par de días. Es de mis lugares favoritos, entonces... ¿ya has estado ahí?

Anái: Solo una vez, el café es delicioso pero ya sabes... sería una tarde en Margotte's... o el alquiler.

Alexxey: ¿Que planeas hacer hoy por la tarde?

Anái: Pues he estado trabajando en las entregas de los siguientes parciales, ya están un poco cerca.

Alexxey: Te estoy invitando a Margotte's hoy. ¿quieres?

escribiendo....

borrado...

escribiendo...

escribiendo...

Anái: Si quiero (carita súper sonriente) pero justo ayer pagué mi parte del alquiler

Alexxey: Te veo a las 6pm hoy en la entrada de Margotte's.

...

Gracias por seguir leyendo.

Uwu