Una canción de amor

28.- Luna

Miraculous, les aventures de Ladybug et Chat Noir y sus personajes son propiedad de Thomas Astruc y Zag Entertainment.

Palabras: 2714.

28.- Luna

Adrien había desfilado con naturalidad, haciendo gala de su amplia experiencia como modelo, jaleado por Rose e Iván, probándose todo lo que le lanzaban. Rose le tomó el relevo con desparpajo y alegría poniéndose encima cualquier prenda de cualquier tono de rosa que se plantase frente a ella. E Iván, tímido y enfurruñado por estar haciendo aquello que le parecía absurdo porque allí todos tenían una imagen definida, procuró acortarlo lo máximo posible.

Juleka miró con terror las barras llenas de ropa con su timidez e inseguridad estallando en un breve ataque de pánico, hasta que Luka se ofreció a desfilar con ella. Los dos hermanos se pusieron las primeras prendas que les lanzaron, con colores chillones, formas diferentes. Iván le lanzó unos pantalones con brillos y rayas a Luka a la cara, le habían parecido horrendos, pero al darse cuenta de que podrían ser unos de los que usaría Jagged había entrado en pánico moviendo las manos nervioso, pero Luka no pareció molestarse y tomó el reto de ponérselos junto a aquella camiseta amarilla chillona que le había dado Adrien, al fin y al cabo aquello no era más que un juego. Juleka salió con un traje masculino con la camisa perfectamente abotonada y la corbata bien colocada y anudada, Luka se había puesto el vestido negro con encajes que le había lanzado Rose a Juleka y que esta se había negado a ponerse por sentirse incómoda. Marinette se tapó los labios tratando de ahogar su propia risa, pero acabó contagiándose de los demás y riendo libremente mientras él les hacía una reverencia sin ningún tipo de vergüenza o incomodidad murmurando algo similar a un "a lo mejor me lo quedo".

No se quitó el vestido durante un buen rato viendo como Rose y Juleka empezaban a probarle ropa también a Marinette, pasando de conjuntos estrafalarios a ropa elegante, haciéndola reír. Hasta que, finalmente, cada uno recuperó su propia ropa.

Se dispersaron, Iván regresó a su cuarto para hablar con Mylène, Rose y Juleka se encerraron a ver una película, Luka se quedó atrás para hablar a solas con Jagged y, Adrien, le pidió a Marinette hablar un rato en la sala de descanso que había frente a los ascensores de su planta. Ella aceptó deseando poder constatar si Adrien estaba enfadado con ella y cómo solucionarlo.

—No sabía que a Luka se le daba tan bien hacer de modelo —musitó Adrien sentándose en el elegante sofá.

—Yo tampoco —contestó riendo de nuevo imitándole.

—Yo no habría sido capaz de ponerme ese vestido como si nada, tiene tanta seguridad en sí mismo.

Marinette sonrió, Luka tenía inseguridades, pero no en ese campo y le parecía genial que pudiera ponerse cualquier cosa como si estuviese hecha para él.

—Marinette... hay algo que tengo que decirte.

—Te escucho —pronunció cantarina.

—Hace algún tiempo que... bueno, ya sabes.

Ella disintió suavemente.

—Lo he dejado con Kagami —declaró inspirando hondo—. No estaba siendo sincero con ella, pretendía estar con ella cuando no la quería.

—Pero tú querías salir con ella, me pediste que te acompañase a la pista de hielo.

—Es que creía que la quería, pero me he dado cuenta de que estoy enamorado de otra persona.

—¡Oh! ¡Dime quién es y te ayudaré, Adrien! —exclamó emocionada—. ¡Confía en mí! No hay chica que se te pueda resistir, ya lo verás.

—Creo que ella ya no siente lo mismo por mí.