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Primer día de clases y un secreto revelado


















Escuché el claxon del auto de Mason y tomé rápidamente mi mochila, baje las escaleras de dos en dos, pise mal en un escalón y caí rodando por los demás.

—Mierda. —Gruñí cuando me golpee en la cara con el suelo. Me levanté, sacudí mi trasero y el resto de mi ropa. —¡Ya voy! —Grité cuando mi amigo sonó el claxon exageradamente. —Ya me voy mamá, te amo. — Le tiré un beso y sin esperar contestación abrí la puerta y corrí hacia el auto de mi amigo, abrí la puerta trasera y entre. —Buenos días chicos.

Me levante un poco y bese las mejillas de Liam y Mason.

—Buenos días, Lizzy.

—Buenos días mugrosa. —Así es amiguitos, Liam es muy cariñoso conmigo. — ¿lista para ver a tu príncipe?

—Cierra la boca, Liam.

—¿Príncipe? ¿Qué príncipe? —Preguntó el moreno. —¿Acaso encontraste a un chico y no me dijiste nada?

—No hay ningún príncipe, solo que ayer un viejo conocido regreso a Beacon.

—Si, y no olvidemos que ese conocido era tu "novio" a los ocho años y siempre que jugabas a los príncipes y princesas con tus hermanos, ese chico era el príncipe y los chicos tus bufones.

—Ya no te contaré nada. —Me crucé de brazos infantilmente e hice un puchero. 

—¿Y esta guapo?

—La pubertad hace cosas maravillosas. —Dije. —Me costó un poco reconocerlo, no fue hasta que habló que reconocí su voz, ahora es mucho más ronca y varonil, pero aun así, físicamente si cambio bastante. 

—Si además, tu eres un claro ejemplo. —Se burló Liam y le golpee la cabeza. —Ya deja la agresividad conmigo. —Se quejó sobando la parte donde lo golpee.

—Tu te lo buscas.

—Bueno ya dejen de pelear, es divertido, si, pero hay veces que son irritantes. —Liam me sacó el dedo medio y yo miré hacia el techo.

—No hay nada arriba. —Señalé con dedo índice y me reí cuando vi su cara de fastidio.

Durante el resto del camino Liam y yo nos lanzábamos insultos y uno que otro golpe, tanto así que en un semáforo en rojo mi mejor amigo se paso al asiento de atrás solo para poder golpearme cómodamente, y Mason se la pasaba quejándose de nosotros y hablando sobre las criaturas del bestiario que había conseguido hace poco.

Mason aparcó el auto y acomodé mi cabello antes de bajarme del coche. Miré a Malia, Stiles y Artie hablando en la entrada, los salude desde lejos y caminé hacia la entrada del edificio, con Liam pisándome los talones y molestándome.

—Liam por el amor de Dios, ya deja de joderme con eso. —Pedí y recargue mi cabeza en mi casillero.

—Oh vamos. —Picoteo mi estómago. —¿Me lo vas a negar?

—Claro que voy a hacerlo, por supuesto que voy a negartelo, porque no es cierto. —Me crucé de brazos. 

—No escuchó tu corazón. —Acercó su oído a mi pecho, coloque mi mano en su frente y lo alejé. —¿Desde cuando sabes controlar el pulso de tu corazón?

—Estoy diciendo la verdad.

—Hace días que ocultas tu olor, ¿como le haces? 

—Brett me enseño. —Respondí desinteresada y me voltee para abrir mi casillero. 

𝙇𝙄𝙏𝙏𝙇𝙀 𝘽𝙀𝙏𝘼 #2 | ᵗᵉᵉⁿ ʷᵒˡᶠDonde viven las historias. Descúbrelo ahora