Qué tanta riqueza tienes?
Una mujer siempre será dependiente hasta que lleve un bolso propio.
Elizabeth Cady Stanton, activista por los derechos de las mujeres (1815-1902)
Una mañana abrí mi correo electrónico y reconocí una dirección que no había visto en un tiempo. El mensaje decía lo siguiente:
"¡Hola, Kim! ¡Soy yo, Janice! Estaré en Phoenix mañana por un viaje de un día que surgió casi sin pensarlo. ¿Estás disponible para un rápido almuerzo?
¡Ciao! Janice." Respondí:
"¡Hola, Janice! Mañana me queda perfecto. Me encantaría saber cómo te ha ido y escuchar qué has hecho. Saludos, Kim." Decidimos la hora y el lugar.
En su último correo electrónico, Janice escribió emocionada: "Kim, he estado pensando mucho en lo que hablamos en Nueva York. Estoy empezando a entenderlo cada vez más, en especial mientras trabajo día y noche en mi negocio. Estoy ansiosa por hablar más al respecto. ¡ Te veo mañana! Ciao, Janice."
Al día siguiente supe que debía estar emocionada porque era la primera vez que podía recordar a Janice sentada a la mesa cuando llegué. ¡De hecho había llegado temprano! Se estaba despidiendo de alguien en su celular cuando me acerqué a la mesa.
Se puso de pie de un salto y nos dimos un gran abrazo. "Te ves ma-ra-vi-llosa", rió.
"Me alegra mucho que me escribieras", dije. "Tú, por supuesto, te ves fabulosa como siempre."
Desde ese momento, el almuerzo fue un poco confuso. Hablamos sin parar durante casi dos horas. Sé que comimos algo, pero la comida no fue el centro de nuestra reunión.
Comencé: "A ver, dime qué ha pasado."
"¡El dinero me controla!"
"Mi mente ha estado dando vueltas desde que nos vimos la última vez. Sin duda, no tengo todo claro, pero estoy empezando a ver atisbos de cómo podría ser mi vida si el dinero no fuera un problema. Nunca me di cuenta de cuántas de mis decisiones se basan simplemente en ganar más dinero versus lo que es mejor para mí y mi negocio", confesó Janice.
"Por ejemplo", prosiguió, "la semana pasada tuve que tomar una decisión. Había dos eventos a los que podía asistir, pero eran el mismo día así que tuve que elegir. Uno era más que nada un día educativo y de relaciones con algunas de las personas más importantes en la industria de las ventas al menudeo. Ése era el programa al que en realidad quería asistir. El otro era como una miniferia comercial donde podía vender mis productos."
"Cuéntame qué hiciste", dije con curiosidad.
"Mi proceso de decisión no tuvo nada que ver con lo que sería mejor a largo plazo para mi negocio", dijo frustrada. "Toda la decisión se redujo a qué me haría ganar más dinero hoy. Así que elegí la feria comercial." "¿Y?", pregunté.
Janice continuó: "La feria comercial básicamente fue una pérdida de tiempo. Vendí muy poco. Los asistentes en realidad no eran mis clientes. Y no la disfruté. En cambio, de haber asistido al otro evento, hubiera conocido y hecho preguntas a dos de mis principales 'héroes' de negocios, cuya asistencia no se anunció. La retroalimentación de los amigos que asistieron fue fenomenal. Sentí que pude aprender muchas cosas excelentes para el crecimiento de mi compañía. Yo me fui por el dinero rápido, a corto plazo." "Muy buena lección", comenté.
"De nuevo, fue un pequeño vistazo de cómo podría ser mi vida si mis decisiones no dependieran tanto de cuánto dinero ganaré hoy", dijo. "Lo que estoy empezando a entender es que si supiera que mis gastos básicos están cubiertos y no dependieran de mi negocio, entonces sería mucho más divertido porque tomaría las mejores decisiones a largo plazo para mi negocio... y para mi vida.
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mujer millonaria
Historical FictionElla es la espoza de Robert Toru Kiyosaki, se lo recomiendo si estan empezando a conseguir tu libertad financiera 🤧 y a ser mas seguro de tus habilidades