CAPITULO 2

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"Conectar con tu alma gemela es conectar con tu propia alma"

Un Mes
Después

Mi mente no dejaba de maldecir a las personas que tenía en frente. Me estaba asfixiando de tanto bullicio y ajetreo. Solo veía como las cosas iban y venían de un lado para otro

Mi corazón quería explotar y lo único que hacía era morderme la lengua para que de estas no salieran los míl y un insultos que mi mente ya está preparando

Pero como la vida es tan injusta no podía ni siquiera maldecir en voz baja, es que hasta creo que pensar en querer maldecir en este pueblo es un pecado

Estoy harta de vivir aquí, odio este lugar y a la gente en si, me parecen tan hipócritas y falsos. No me creo eso de que en verdad todo aquí sea como lo pintan, todos felices, llenos de colores pasteles, unicornios volando, de sólo pensarlo me entran unas inmensa ganas de vomitar

Pero no podría decir que soy infeliz, he tenido una linda infancia, unos padres muy amorosos todo lo que he necesitado lo he tenido y no podría olvidar a los dos mejores amigos que alguien ha podido tener, mi vida no podía ser mejor si solo quitáramos el simple hecho de que estamos destinados a vivir una vida con alguien que no elegimos. Desde que nacemos lo hacemos con un propósito y una obligación, serle fiel a alguien que no conocemos

miro mi reflejo en el enorme espejo de cuerpo entero que tengo delante, no puedo negar que el vestido que mi madre y hermanas eligieron para mi es precioso. No era el típico vestido de quinceañero, este era en Strapless, se mantenía sujeto a mi cuerpo sin ninguna ayuda visible aparte de mis senos que eran apretados por la tela, este me llegaba arriba de la mitas del muslo, se ajustaba perfectamente a mi figura, era de un color azul y lo que mas me encantaba eran los detalles que estaban impregnado en el. Estos eran de color plateado, sus formas eran raras y diferentes entre si, pero eso lo hacia aun mas bello y lo mejor era que lo acompañaba con una chaqueta del mismo color y mantenía los mismos detalles pero este tenia unas pequeñas no exageradas hombreras que lo hacían lucir elegante, y para completar la vestimenta mis pies eran calzados por unas cortas botas blanca.

Mi madre se había encargado de contratar a un grupo de expertos para que nos arreglaran en esta ocasión, estaba maravillada con el resultado, a mi cabello le habían quitado mis ondas naturales y me lo habían dejado más liso de lo normal, me gustaba como se veía, así que les dije que no me hicieran ningún peinado que simplemente me lo dejaran suelto, en mi maquillaje si no pude opinar, de eso se encargo mi mamá, diciéndoles que me hicieran uno natural pero que a la vez le dieran vida a mis ojos y no podía negar que si que lo habían hecho, mis ojos resaltaban como dos enormes esmeraldas, me habían colocado mucho rimel realzando mis pestañas, mis cejas pobladas me las habían depilado y sombreado, mis parpados habían sido pintados con sombras rosadas y en los lagrimales me habían untado un toque de iluminador,  mientras que mis pequeños pero carnosos labios habían sido coloreados de un rosa fuerte, por otra parte mis mejillas tenían ese rosa pálido que me caracterizaba, así que con eso decidieron dar por  finalizado mi maquillaje.

Todos quedaron fascinados con los resultados.

Cuando termine de detallarme vi el reflejo de mi segunda hermana detrás de mi. Amaranta Sallers, tenia un hermoso vestido negro y largo, este le llegaba hasta los tobillos, pero tenia un corte en el lado de su pierna derecha que lo hacia lucir muy provocador. Ella era  muy parecida a mi físicamente, lo único que nos diferenciaba era el color de nuestros cabellos el mio era de un castaño oscuro mientras el de ella al igual que nuestra hermana mayor lo tenía de un rubio claro.

Amaranta tenia 17 años, estaba a tan solo uno de encontrar a su alma gemela, ella a diferencia de nosotras si estaba emocionada por eso, quería conocer a la persona con la que compartiría el resto de su vida. Su alma gemela se hacia notar muy pocas veces, no mostraba mucho sus emociones por lo cual mi hermana pudo vivir una adolescencia normal y tranquila en lo que cabe llamar "Normal en este pueblo"

Almas GemelasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora