No nos hace falta esperar mucho cuando llegamos para ver a los chicos.
Entramos en la pista que hay al lado del telesilla y les vemos venir hacia nosotras.
Cada uno con cara de estar más cansado que el anterior.
-Yo te mato- oímos a Hugo decirle a Javi.
-No haberme hecho caso- se ríe.
-Tranquilo que no lo volveré a hacer- ríe con él.- Lo de tomarme cuatro chupitos seguidos no lo hago nunca más.
-Para acabar potando en casa- entra Flavio en la conversación.
-¿Vomitaste?- ríe Eva cuando llegan a nosotros.
-Y no una vez- añade Javi.
-Joder...- ríe Nia.- Iba peor que yo...
-Es que tu ya llevabas todo lo de la otra noche encima- ríe Eva.
-Anaju fue la más lista- concluyo yo.- No bebió a penas, y hoy va a poder beber todo lo que quiera sin que le siente mal en la fiesta.
-Pues sí- dice ella.- Por eso soy la mami del grupo.
-¿Ya habéis llamado al bar para reservar?- pregunta Nia.
-Sí, Javi lo ha hecho hace media hora- comenta Hugo.
-Perfecto, pues vamos a aprovechar el ultimo día que tenemos, ¿no?- dice Anaju sonando más nostálgica de lo que quería.
-A aprovecharlo hasta las cinco que cierren.
-Sí hombre, yo quiero un rato para comer, eh- me quejo yo ante esa idea, y todos se ríen.
Subimos al telesilla bastante separados. Yo voy con Hugo y Flavio.
Estoy sentada entre los dos, y hablando de trivialidades vamos subiendo la montaña.
-Pues yo no hubiera pensado esto jamás- comenta Hugo.
-Ya... es que fue todo una coincidencia- respondo.
-Es que recuerdo a Flavio empezando a bajar sin decirme nada, en medio de la bajada- se empieza a reír.- Y yo pensando, ¿dónde va este loco ahora?
-Hombre... imagina que le hubiera dado a alguien, eso iba a toda ostia, y con Eva gritando detrás... Se veía venir desde lejos- ríe ahora Flavio.
-La otra...- responde Hugo.- Yo la vi pasar, así, pum- dice haciendo gestos con los brazos.- La seguí y cuando la atrapé le dije que te esperara.
-Y ahí fué cuando pensaba que no la había recuperado- acabo la historia.
-Pero esto no acaba aquí- dice Hugo.- Luego nos fuimos a tomar un café.
-Ahí todos tan tranquilos- añado yo.- Y yo muriendo bajando a pie.
-Y cuando vimos a Eva viniendo con Samantha hacia nosotros en la cafetería...- dice Hugo.- Me costó tanto no reírme...
-No, si no se os va a olvidar nunca, seguro que lo recordaréis siempre- digo yo.
-Ni que lo digas- responde Flavio sonriéndome, y sabía que no se refería al snow, sino a mí.
Llevamos todo el día bajando sin apenas parar. Hemos estado media hora comiendo, y hemos vuelto a las pistas.
Ahora con mucha pena, ya estamos haciendo la última pista del día.
Son las cinco ya, y llevamos unas cuantas horas haciendo diferentes pistas, algunas en un momento, otras parando a la mitad...
Mientras subimos en el último telesilla que vamos a subir hoy, a Nia se le ha ocurrido la gran idea de bajar todos de golpe.
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Un Golpe de Suerte
Teen FictionEsas debían ser las mejores vacaciones de sus vidas. Y todas pensaban que así sería, sin incidentes, sin complicaciones, unos días tranquilas en la montaña. Pero con Sam entre ellas, eso es casi siempre imposible. Debido a algo inesperado, conocer...