—¿Por qué no podemos?
—Porque no.
—¡Una razón de verdad! —Chilló, berrinchudo levantando los brazos y pateando el suelo.
—Es la razón que están teniendo.
—¡Papá! —La pequeña rezongó en un quejido alto.
Él solo puso en blanco los ojos y se levantó del escritorio, se refregó el rostro para contener el bufido de exasperación y para no gruñirle a sus hijos. Lo estaban sacando de quicio con una facilidad tremenda.
—Fuera de mi oficina. —Dijo finalmente luego de un par de minutos en silencio, las miradas penetrantes en él, exigiendo una respuesta más concreta, movió la mano hacia la puerta en señal de despedida cuando vio que ellos no se movieron ni un centímetro, levantó una ceja cuando ellos siguieron renuentes—, fuera. Ahora. —Masculló firme y seriamente, apretando la mandíbula y mirándolos directamente a los ojos, tuvo que intercalar la mirada en ambos, por supuesto.
—¡No es justo! —Cameron exclamó dándole un golpe a la parte trasera de la silla antes de girar y salir de la oficina, sus pisadas resonando con fuerza cuando caminó hacia la puerta.
Suspiró con fuerza y observó a su hija cuando ella no se movió en lo absoluto, ella cruzó los brazos y levantó una ceja, desafiante. Él solo se paró más recto y la miró con fijeza, serio hasta que ella se doblegó y soltó un bajo bufido, quizá una maldición entre el sonido aireado, antes de girar y salir de la oficina. Georgia dio un fuerte portazo cuando cruzó el umbral, él pudo escuchar el sonido de sus pies corriendo por el pasillo al siguiente segundo.
—Castigo anotado. —Farfulló por lo bajo volviendo a sentarse en su silla, se quitó los lentes y se masajeó las sienes con los dedos, los ojos cerrados.
—No los vas a castigar. —La voz fue suave desde la puerta, él abrió los ojos al escucharla y levantó el rostro con inmediatez, la sonrisa se formó en su rostro en un solo segundo—, Hola papá.
—Mi dulce cachorrita —, Él respondió levantándose de su silla y caminando alrededor de su escritorio, se encontró con su hija en la mitad de la oficina, apretó sus brazos por sobre los hombros de su pequeña y la apretujó contra su cuerpo todo lo que pudo, inhaló el aroma de ella cuando le besó la frente.—Dios —Susurró bajando una mano hacia el estirado vientre, el movimiento en el interior vino al instante en el que su palma acarició por encima de la ropa—, Que grande está.
—Sí, los siete meses hicieron que se estirara demasiado... seriamente, estoy preocupada de reventar.
Él se río mientras se alejaba, inclinándose besó el vientre de la omega y luego giró y agarró una silla, la movió para que su hija se sentara, él tuvo que hacerle una mueca seria cuando ella negó a sentarse.
—Buena niña —, dijo cuando ella estuvo sentada, caminó hasta el escritorio y se apoyó en la madera, le sonrió a su hija cuando la vio acariciarse el vientre con una mano, era un acto natural e instintivo—, no te vas a reventar, bebé.
Eso la hizo reír, ella, delicada como siempre se cubrió ligeramente el rostro cuando soltó una risa baja y suave. Sinceramente, esas eran maneras que su abuela había terminado inculcando en su hija, siempre la había hecho ser una omega educada. Pero, no de la manera normal, su abuela nunca fue normal, ella iba más hacia lo estricto y medieval.
La verdad era que su bebé nunca se quejó realmente, ella amaba a la mujer. Y cada cosa aprendida solamente hacía que ella pareciera mucho más una princesa. Había sido adorable mientras Hope había crecido, siempre educada, recatada, servicial y muy responsable, una pequeña damita de la sociedad. Ahora, ella era toda una mujer elegante y astuta. La belleza, por supuesto que estaba en cada poro de su piel.
ESTÁS LEYENDO
Styles ~LS- A-B-O~
FanfictionLos gemelos Styles pueden absorver la vida de Louis. AU donde Louis necesita pasar el año escolar y para eso debe brindar servicio social, es mandado con los Styles y ellos pueden hacerlo enloquecer. Advertencias- xx- ~Larry como Romance. (y Edward...