Styles ~LS- A-B-O~

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La pelota rodaba cada que una persona del equipo le daba una fuerte patada, él desde las gradas miraba atentamente como los 22 chicos peleaban por ese balón, con la pregunta frecuente en su cabeza ¿Por qué ríen tanto?

Si no hacían más que correr, sudar, y disputarse por una pelota, sinceramente tenía la idea en la cabeza de correr a la cancha y lanzar todas las pelotas que el entrenador dejaba en un bolso, todo para ver si todos correrían como perros por las pelotas, sería un evento patidifuso, y un buen experimento social, aunque a él no le agradaba de a mucho que saliera como en su mente se transfiguraba, eso sería elocuentemente malo, aunque no quisiese admitirlo, bufó, repleto de fastidio.

Pero sin la más mínima intención de alejar la mirada de la cancha de fútbol, atento a lo que pasaría a continuación, teniendo el gesto serio enmarcado con precisión sobre el rostro.

"Deberías unirte al equipo" el susurro llegó a su sistema auditivo justo a su lado, su cuerpo tomó la percepción de un cuerpo posicionándose junto a él, con lentitud apenas giró un poco su rostro, solo para mirarle de soslayo, con el gesto gélido concentrado en su cara, aquella era la peor idea de todas las que se le hubieran ocurrido con anterioridad, la incredulidad se dibujó en su mirada, cuando levantó una ceja, siendo eso, apenas perceptible "Bueno, entonces no" su acompañante no invitado le sonrió efusivo elevando las manos "Me ha llamado la abuela Cox, dijo que nos esperan el viernes en su casa para una reunión o algo así, mencionó que era algo de suma importancia" le comunicó con una mueca leve, sin perder la sonrisa.

Él regresó la vista a la cancha sin darle importancia a lo que el otro había mencionado "No iré" negó irguiéndose de su lugar, acomodando la mochila sobre su hombro y sujetando la libreta en su mano, le asintió a su igual y giró bajando las escaleras para salir de las gradas, ignorando a perfección lo que su hermano le gritaba para atraerlo de vuelta.

Edward bufó fastidiado dejándose caer sobre las gradas nuevamente, rodando los ojos y agarrando su celular, frunció el ceño levantando la cabeza cuando escuchó un carraspeo a su lado, igualmente que una sombra estaba facilitando la vista para la pantalla de su celular.

Entrecerró los ojos para observar la figura del chico, que contrarrestaba con los rayos solares dando justo sobre la parte posterior, el cabello castaño claro envolviéndose en reflejos dorados y un aura angelical rodeando la figura curvada y menuda.

La boca se le abrió ligeramente observando hacía arriba al chico, pasmado, sintiendo a su alfa gruñir en su pecho, arañándolo.

El ser más hermoso que hubiese visto alguna vez en su vida. Nariz perfilada, pequeños destellos de una incipiente barba sobre la barbilla sutilmente cuadrada, los labios moviéndose, delgados, de un color rosa profundo, carnosos y tan jodidamente provocativos, los pómulos marcados con ligereza, le era imposible observar con plenitud los ojos por la luz contraria del sol y también por los lentes levemente oscurecidos que sobre las finas facciones estaban decorando, sin embargo el alfa podía apostar que eran de un color plenamente hermoso, justamente como todo lo que podía ver de él, con el cuerpo menudo cubierto con el uniforme escolar algo impulcro pero que le resaltaba de una manera increíble.

"Disculpa" murmuró el alfa con aturdimiento cuando vio que el chico le sonreía dulcemente, un tirón pasó por todo su cuerpo, su alfa rasguñaba por su pecho, exigente de obtener algo más del chico, curvó la nariz un poco, intentando captar algo del castaño pero ninguna esencia llegó a su nariz, frunció el ceño.

Un beta.

Su alfa estaba casi enloqueciendo por haber reconocido a un beta.

Un jodido beta lo estaba jodiendo.