El alfa que lo cambió todo-[Arsilex y tu]

Capítulo 10:

___ Pov's:

Pude apreciar como sus bellos ojos se llenaban de lagrimas y me sentí como la peor omega del mundo, ¿cómo alguien en su sano juicio haría llorar a esta persona de corazón tan puro?

Al parecer yo.

Pero esto es por su bien, y espero que algún día pueda perdonarme...

-¿Estás escuchando lo que dices?- cuestionó incrédulo- ¿Acaso me escuchaste a mi siquiera? ___, te acabo de declarar mi amor. ¿Y quieres que nos separemos?

+Claro que me estoy escuchando- respondí con la voz quebrada y con lagrimas que amenazaban con salir de mis ojos- Estás dispuesto a arriesgar tu vida por la mía...Y yo no puedo permitir que  hagas esa estupidez solo por mi.

-Es lo que un alfa hace.

+¡No quiero que seas un alfa!- grité exasperada-.

-¿Prefieres que sea como tu? Alguien indefenso.

+No soy indefensa Maryan. Y lo sabes- dije molesta-.

-El hecho de que seas independiente no significa que no necesites ayuda de vez en cuando.

+Claro que necesito ayuda- aclaré- Lo que no quiero es que mueras por mi...-susurré entre hipidos causados por mi llanto que no supe ni cuando comenzó-.

-Para eso vine al mundo como un alfa.

+Ese es el problema, ¿sabes? Estas tan concentrado en que eres un alfa que no te das cuenta que te necesito aquí, vivo.

-¿Qué sería de mi si tu...mueres?

+¿Y qué sería de mi? ¿Te detuviste a pensar en eso? Los omegas somos los seres que más sufrimos cuando nuestra pareja no está- le recordé- No quiero seguir discutiendo- aclaré- Y si tu quieres seguir conmigo y ayudarme en esta horrible etapa que se aproxima...Te pido que no des tu vida antes que la mía.

Un silencio incómodo se hizo presente durante un par de minutos y cuando supe que no obtendría un "si" de parte de Maryan, supe que lo había perdido para siempre.

+Bien...creo que ya tomaste una decisión- dije y me giré para comenzar a caminar en dirección a la cabaña-.

-Espera...-susurró tras tomar mi muñeca con firmeza y delicadeza a la vez-...solo...solo promete que tu tampoco pondrás nuestra vida antes que la tuya.

+Maryan...esta es mi guerra, no la tuya- aclaré- Si está en mis manos salvarte, lo haré...por que yo también te amo- dije y sentí un tirón en mi mueca para después sentir sus labios chocar contra los míos-.

-¿Osea que tu si puedes arriesgar tu vida pero yo no?- preguntó luego de separarnos-.

+Ya te lo dije- me volví a girar- Es mi guerra...

Me alejé de aquella zona, dejándolo solo. Me adentré en la cabaña y todos se giraron a verme, vi que Samuel estaba por hablar pero pasé de ellos y me dirigí a una de las habitaciones del lugar. 

Estoy cansada y paso de dormir en el suelo, pasaré la noche aquí y mañana a primera hora, me iré a casa; no puedo dejar que los chicos se arriesguen por mi y ellos ya dejaron en claro su decisión, es hora de dejar clara la mía.

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Desperté por unos rayos del sol que comenzaban a filtrarse por la ventana de la habitación, sentí unos brazos rodear mi cintura y me giré con cuidado de no despertar a la persona que estuviera detrás de mi espalda-Maryan-verlo dormido, tan relajado, me dio una enorme sensación de culpa pero él tomo su decisión y yo debo seguir firme con la mía.