Promise. [SasuNaru]

Capítulo 1.

-Idiota.-insultó Sai.

-Ya, deja eso.-habló Sasuke.- Fue divertido.

-Tal vez para ti fue divertido arruinar mi cita, con la qué en un futuro pudo ser mi esposa, pero para mi no.-dijo Sai de mala gana, haciendo qué Sasuke soltará una carcajada.

-Sí lo dices así es más divertido. ¿Tú futura esposa, Sai?, la encontramos en un bar, y estábamos ebrios.-río.

-Eso no quita qué pudo ser mi esposa.

-Hay qué ir a casa, parece qué sigues ebrio.-propuso Sasuke mientras ambos salían del bar dónde habían pasado la noche.- Ya quiero contarle a Itachi.

-Espero qué mis tíos no se enteren en dónde dormimos. Se supone qué la tía Mikoto me trajo acá para supervisarte, ya qué Itachi pasa más tiempo con Deidara.

-¿Entonces no estás conmigo porqué soy tú primo favorito?.-preguntó con burla.

-Sí tuviera un primo favorito, sería...¿Deidara?.-respondió Sai.

-...el no cuenta.-dijo indignado.

Ambos azabaches tomaron camino hacía su casa.

Sasuke y Sai Uchiha, vivían juntos en una casa qué los padres de Itachi y Sasuke habían comprado -Fugaku y Mikoto Uchiha-, mientras qué Itachi vivía con su esposo doncel; Deidara Namikaze. Eran herederos de esa gran empresa, pero les faltaba mucho para estar al mando, mientras tanto, se divertían. Los tres eran bastante apuestos, caracterizados por su cabello y ojos de color negro.

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-¡Naruto-sensei!.-chilló Sakura, una pequeña pelirosa de cinco años.- ¡Ino me está molestando!.

-¡No es cierto, Naruto-sensei!.-chilló indignada ahora una pequeña rubia, -de la misma edad.- ¡Sakura me está molestando!.

El llamado apareció al escuchar los gritos. Naruto Uzumaki, un joven doncel, bastante lindo, quien era maestro de la guardería Konoha, encargado de los más pequeños del lugar.

-Niñas. No griten tanto, despertarán a Hanabi y a Konohamaru.-pidió el rubio en voz baja, -los bebés del lugar.- ¿Qué paso?.-les preguntó a las niñas, una vez estaban lejos de los bebés.

-¡Sakura dijo qué...dijo qué...-Ino comenzó a mover su piecito de manera nerviosa.

-¡Después Ino dijo...qué...-ahora Sakura también se puso nerviosa.

-¿Qué dijeron?.-preguntó Naruto confundido, hincándose, quedando a la altura de las pequeñas.

-¡Qué usted no se casará conmigo, sino con ella!.-gritaron las dos al mismo tiempo.

Naruto soltó una risilla al escuchar aquello.

-No tienen porque pelear por eso.-dijo el rubio.- Me casaré con ambas.

-¡Sí!.-brincaron de emoción y abrazaron a Naruto.

-¿Peleando por quien se casará contigo?.-preguntaron a sus espaldas.

-Sí, de nuevo.-respondió Naruto, viendo a las dos niñas correr hacía el pequeño patio de la guardería.- ¿Y Konan y Yahiko?.-preguntó por los más grandes del lugar -seis años-.

-Ya llegaron sus padres por ellos.-respondió el pelirrojo, -Gaara Sabaku, su mejor amigo doncel, con quien compartía departamento y el encargado de los niños más grandes del lugar-. ¿Nagato sigue con Neji y TenTen?.-preguntó nuevamente a lo qué el rubio sólo asintió.

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-Y no para de reclamarme por arruinar su cita con su esposa.-término de contar.

-¿Enserio, Sai?.-preguntó Itachi.-¿Por eso estás buscando una foto de Sasuke?.-Sasuke asintió.

-Uno nunca sabe donde encontrará el verdadero amor.-respondió como sí nada, mientras seguía buscando entre las cajas.- Mirate tú, Itachi. Te tropezaste con Deidara en el súper y ahora tienen u...¡ajá!.-gritó emocionado al encontrar un pequeño broche en forma de girasol.- Supongo qué esto es lo suficientemente vergonzoso.-habló más para sí.

-¿Qué encontraste?.-preguntó Sasuke, acercándose a Sai.

-¿Usabas broches, Sasuke?, ¿De los qué usan las niñas y los donceles?.-dijo Sai con burla moviendo el pequeño objeto cerca del rostro de Sasuke.

-Sai...no creo qué...

-Dámelo.-ordenó Sasuke interrumpiendo a Itachi de manera brusca.

-Nop, me toca dejarte en vergüenza.-sonrió.

-Dame el broche,Sai.-ordenó nuevamente.

-Sai...da-dale el broche...-pidió Itachi.

-Sí qué te gustan eh.-dijo Sai un poco confundido por el actuar de su primo.

-Vete a la mierda.-espetó Sasuke saliendo del lugar.

-¿Qué fue eso?.-preguntó Sai confundido.

-Ese broche no era de Sasuke.-respondió Itachi suspirando.

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-Qué idiota.-murmuró Sasuke.

Ni siquiera debería afectarme

Sasuke entró de nuevo a la casa, pero se detuvo al escuchar a su primo y hermano, hablando.

-Sasuke se la pasaba diciendo qué se casaría con el. Entonces mis padres le prohibieron volver a verlo, porque se supone qué ya estaba comprometido. Además... puede que suene cruel, pero, Sasuke tenía ocho años y el cinco, no era posible qué eso tuviera futuro. Pero aún separándolo de el, Sasuke no se casó con la que era su prometida. Sé qué Sasuke ya no recuerda nada de aquel pequeño doncel...lo único qué tiene es ese broche.-término de contar Itachi bajo la atenta mirada de Sai.

Itachi tenía razón.

Ni siquiera estaba enamorado.