Destino [Larry Stylinson] AU.

Capítulo 13. Who is he?

NARRADO POR ZAYN.

Me encontraba en el sofá de casa, acariciando el cabello de la que iba a ser mi esposa mientras que mi rubio amigo y su novia se encontraban haciendo la comida. O destrozando la cocina que, en su caso, es sinónimo.

Estaba mirando al techo en silencio, con la cabeza apoyada en el respaldo del sillón y acariciando mi perilla con mi mano sobrante.

-¿Qué piensas, amor? -me preguntó Perrie, oh dios Perrie. Esa rubia había cambiado completamente mi vida. Y solo ocupando mi corazón, dios lo que hace la falta de espacio.

-Pensando en cual tonto fui al pedírtelo.-Contesté ahora girando el anillo de la rubia que estaba acostada en mi regazo.

Ella rió.-Estuvo increíble. -Afirmó.

-Si tú lo dices-bufé.

*FLASHBACK*

Me levanté hecho un manojo de nervios, aparte de porque fuera mi cumpleaños, iba a pedir su mano.

Unos días antes, conduje hasta su casa para pedir el permiso de sus padres que fue aceptado al momento. La verdad es que estaba temblando cuando vi a su padre con ese semblante serio.

Se me ocurrió hacerla prepararse para ir a un paseo por la playa Brighton Beach, en Brighton obviamente.

Cuando llegamos era el atardecer y tomé su mano sigilosamente mientras caminábamos por el puerto. Mi otra mano jugueteaba en mi bolsillo con los anillos, juntos gracias a un pequeño cordón.

-Perrie-susurré mientras rodeaba sus hombros con mi brazo, soltándome de su mano.

Ella viró su cabeza hacia mí, dejándome embelesado con lo guapa que iba. Llevaba una falda negra, unos leotardos del color de sus ojos, amo ese color y un jersey de color blanco. Ella conjuntaba, a su manera. La cual me volvía loco. -Dime-susurró a la misma manera que yo lo había hecho anteriormente.

Suspiré intentando tragarme los nervios y paré mis pies, girándome y colocándome delante de ella.

-Perrie, hoy es mi cumpleaños y lo sabes. Me has hecho un fantástico regalo y no hablo de lo material. Has estado aquí conmigo ahora y siempre. Por eso yo quiero...

-Zayn...-ambos llorábamos de alegría. Creo que ella sabía lo que venía ahora.

-Perrie Edwards, -me arrodillé y tomé su mano.- ¿Me harías el hombre más feliz de este mundo casándote conmigo?

-¡Zayn! ¡POR SU PUESTO QUE SI! -la coloqué el anillo en el dedo mientras trataba de tragarme las lágrimas y nos fundimos en un abrazo.

Minutos después yo y mi torpeza caímos al agua empapándonos por completo.

Aquella noche acabó en un tierno beso debajo de la luna ambos siendo mecidos por las olas del mar.

*FIN FLASHBACK*

-¡NIALL HIJO DE PUTA!

-JOANNE, IMBÉCIL.

Ya estaban insultándose en idiomas que ni Perrie ni yo entendíamos. Joder en Londres y estos dos hablan español. Luego el raro soy yo.

-¿Qué os pasa ahora? -pregunté lo suficientemente alto para que ambos me oyesen.

-¡NIALL SE HA COMIDO TODO EL CHOCOLATE! ¡¿AHORA CÓMO HAGO EL PASTEL?! NIALL GILIPOLLAS.

-Chicos, -avancé hasta la cocina dejando a Perrie en el sofá- no os insultéis en español que no me entero.

-Negra que te jodan.