Délicatesse | Kunten

chapitre 1

París, 1946.

Céline Von Teese, aquel nombre se encontraba en cada esquina de la ciudad de París. Relucía en afiches junto a la ilustración de una sensual chica bañada en perlas, brillos y plumas, cautivaba la atención de cualquiera y es que el nuevo show del burlesque "Délicatesse" no era menor. La estrella y posiblemente favorita de todos quiénes hayan tenido el privilegio de ver alguno de sus shows, sería la protagonista en el cabaret durante una larga temporada, aquello había llamado la atención de Qian Kun, pero él, siendo un hombre de negocios tan importante y ocupado no tenía tiempo para ese tipo de cosas, además, su esposa posiblemente no estaría para nada contenta si sabía que asistía a ese tipo de lugares.

—¡Kun!— Exclamó un joven alto de tez canela, la cual hacía un bello contraste con aquel elegante traje. Wong Yukhei era amigo y socio de Kun, trabajaban juntos en la empresa de sus padres desde que estaban en la universidad como pasantes, ahora estaban a cargo y eran reconocidos por ser parte de los hombres más ricos en París en ese entonces.

—¿Qué necesitas, Yukhei? Estoy ocupado.— Habló el mayor mirando apenas a su compañero con una ceja alzada, estaba realmente inmerso en unos papeles importantes de la empresa.

—¿Podemos empezar por relajarnos un poco? mira la tensión en tus hombros, amigo. Respira.— El moreno hizo un gesto con sus manos a la vez que inhalaba y exhalaba con la intención de molestar al castaño. —Estaba pensando en ir al cabaret délicatesse, necesitamos descansar un poco, liberar el estrés, ¿Qué dices?—

Al hombre sentado en aquella elegante silla de cuero tras el escritorio no se le veía muy convencido, pero tenía claro que aunque lo negara mil veces, su amigo podría pasarse el día entero en su oficina y definitivamente era lo que menos quería, así que con una expresión bastante desganada finalmente accedió. —Espero que no planees pasar la noche entera metido allí, debo ir a casa, sabes que Fleur se molesta, no tenemos mucho tiempo para estar juntos.— Yukhei asintió con una ligera mueca en su rostro la cuál disfrazó rápidamente con una sonrisa antes de salir de la oficina.

El resto de las horas de trabajo Kun se las pasó pensando en aquél nombre, Céline, era realmente atractivo e imaginar que realmente existía una mujer como la del afiche lo ponía un tanto ansioso. ¿En verdad había accedido a la invitación de su amigo por prevenir el berrinche que este posiblemente hubiese hecho? o era que la curiosidad que le causaba la realidad de aquella mujer lo estaba tentando. Soltó un suspiro levantándose de su asiento, de uno de los cajones de su escritorio sacó su pipa y colocándola en sus labios con un fósforo quemó el tabaco, miraba la ciudad desde el enorme ventanal, se cuestionaba si estaba bien ir a esos lugares estando casado, concluyó en que no haría nada malo, solo pasar un buen rato con su amigo, no quería decir que fuese a caer en la tentación causada por las bailarinas o algo.

—Hey, ¿ya estás listo?— El menor interrumpió sus pensamientos al entrar estruendosamente por la puerta.

—Oh, sí.— Asintió tomando el reloj de su bolsillo para mirar la hora. 9:30 PM, solo treinta minutos para llegar al renombrado cabaret, por suerte y gracias a las indicaciones de Yukhei, pudieron estacionar el lujoso auto de Kun a las afueras del lugar en pocos minutos. Ambos hombres de sombrero e impecables trajes bajo unos abrigos de color beige, el más alto de estos llevaba un bastón con detalles dorados, (herencia de su padre que el chico llevaba con orgullo.) Al momento de entrar, una señorita con un vestido elegante y coqueto los recibió, les indicó el precio de la entrada por la cual ambos pagaron sin problema alguno, el dinero les sobraba a ese par, posterior a ello tomó sus abrigos y sombreros dejándolos en un lugar especial.

—La noche en ningún lugar es más brillante que en délicatesse, disfruten caballeros.— Habló con un sensual asento frances el cual cautivó por unos segundos al más joven de ellos.

—Yukhei despierta.— Habló con frialdad el más bajo, comenzando a caminar por un pasillo decorado con fotografías e ilustraciones de shows anteriores.
En el momento en que ambos estuvieron en el salón principal, otra joven los guió hasta una de las mesas en frente al escenario, tomó sus pedidos y minutos después regresó con una bandeja con un par de tragos para ellos. El par comenzaba poco a poco a disfrutar del ambiente, conversaban y fumaban de sus pipas, eran la viva imagen de sus padres en su juventud.
De un momento a otro el silencio invadió el local debido a la voz de un hombre con un micrófono en las manos, tenía una sonrisa brillante y su manera de hablar era atrapante, luego de una pequeña introducción finalmente lo que todos estaban esperando, el nombre de Céline Von Teese salió de sus labios, este desapareció del escenario y las cortinas de terciopelo rojo comenzaron a levantarse con lentitud a la vez que el público aplaudía con furor. Kun estaba atento, detrás de esa tela rojiza apareció una silueta, una mujer de cabello rubio, cintura pequeña y en general un cuerpo delgado, parecía esculpida por los ángeles. Un vestido apegado a sus curvas, perlas, plumas y brillos por todas partes, el castaño creía que estaba soñando, pero no, no era así, esa mujer era real y estaba danzando coquetamente frente a ellos. Era hermosa, su voz también lo era, todo en su persona estaba atrapando a Kun, lo cual podría ser un tanto preocupante, ¿qué cosas pasaban por su mente? nadie podía asegurarlo, solo estaba claro que el guiño que Céline le dió al acabar su primera presentación había hecho que su corazón se acelerara.

Dos horas de show pasaron desapercibidas, ambos jóvenes ya un tanto afectados por el alcohol se ponían de pie para aplaudir cada performance en cuanto estas terminaban. —Te dije que era buena idea venir aquí, ¿En serio eres el mismo Kun con el que hablé en la oficina?— habló el menor de ambos con un tono bastante burlón. Aquello normalmente le hubiese molestado al señor Qian, él no era de bromas, pero en aquél momento no fue de importancia, pues su atención estaba puesta en la joven que bajaba de un costado del escenario y se aproximaba hacia ellos.

—Buenas noches caballeros, es primera vez que los veo aquí.— Las finas manos de la mujer se posaron sobre la mesa, llevaba guantes pero aún así se podía ver lo delicadas que eran.

Al castaño le tomó un par de segundos retomar su compostura, en cosa de segundos le dió una mirada a su amigo y regresó con la bella dama a su lado brindándole una sonrisa confiada. Su elegante vestido rosa dejaba descubiertos sus hombros, brillantes y finos accesorios adornaban diferentes partes de su cuerpo, podría parecer demasiado, pero en ella, en ella era simplemente perfecto y Kun sí que lo había notado.

—Realmente eres asombrosa.— Habló el de tez morena, sus ojos brillaban tal como si fuese un cachorrito. La rubia sonrió mirándolo con cierta ternura.

—Pues... Muchas gracias lindo.— Ahora la atención de la joven se encontraba en el hombre más bajo de ambos. —Estás muy callado cariño, ¿qué sucede?— Con una de sus manos acarició delicadamente el rostro de este, intentando cautivar su atención.

—¿Eres Céline, verdad?— Solo eso atinó a decir. Dios Kun, ¿qué fue eso?
La mujer rió y caminó hasta encontrarse detrás del asiento del mayor, con sus manos posadas en los hombros de este se aproximó para hablar cerca del oído opuesto.

—Tengo muchos nombres, Cielo... Pero sí, supongo que puedes llamarme Céline por ahora.— Se alejó de ellos caminando de esa manera en que su cuerpo podía parecer una serpiente, pero una hermosa y posiblemente la más peligrosa.

—Mierda Kun, ¿Qué fue eso?— El más joven habló entre carcajadas, molestando a su amigo quién le miraba con el ceño fruncido.

—¡No supe cómo reaccionar, ¿bien?!— Se puso de pie tomando de un solo trago lo que quedaba en su vaso, agarró del hombro a Yukhei para salir lo antes posible del lugar. Estaba nervioso y ya era muy tarde, debía llegar e inventar una buena excusa para Fleur, además de intentar sacar de su mente a Céline, ¿qué significaba aquello que le había dicho?

Holaa <3 es mi primera vez escribiendo una historia, espero que les guste.