La humanidad estaba a punto de ser extinguida, sin embargo, llegaron a sobrevivir consiguiendo la muerte del Rey Demonio, Lucifer.
Dicho suceso le trajo a la humanidad un siglo lleno de paz, en donde aprovecharon para reconstruir, mejorar el mundo y...
La resolución de la guerra humano-demonio dio a conocer la gran amenaza latente que existe y lo devastadora que puede ser. Reconociendo los riesgos, la humanidad decidió que un suceso de esa magnitud no se repetiría, creando así las guardias contra demonios llamadas "Guardias Espirituales", estas se determinan en base a la gravedad y las necesidades del asunto.
Las Guardias Espirituales consisten en:
Guardia Espiritual, está conformada por estudiantes y egresados de las Academias Celestiales, se centran en cualquier tipo de problemas, pero se mantienen alejado de problemas severos. Esta guardia es la principal para empezar como Espiritista.
Guardia Dragón, se centra única y especialmente en problemas que tengan que ver con la horda demonio, estos están más familiarizados al respecto y son tan eficaces a la hora de actuar.
Guardia Extravagante, esta guardia se ve envuelta en problemas sociales con las personas que se niegan a la paz y buscan el caos a como dé lugar. Aunque no es tan solicitada como las otras Guardias Espirituales.
Guardia de Apoyo, no se relaciona en combates como las otras guardias, es más, esta guardia tal y como su nombre indica, se centra en dar apoyo a las demás, pero para restaurar el orden y a los civiles que se vean afectados en el proceso.
Y, por último, pero no menos importante; la Guardia Celestial, siendo esta la élite de la élite, centrada en cualquier tipo de problemas como la Guardia Espiritual, pero a diferencia de ella, la Guardia Celestial es reconocida por ser la más eficaz en cualquier situación y el último recurso en el peor de los casos.
Retomando la historia, en la sede principal de las Guardias Espirituales se registró una anomalía en la superficie terrestre. Los datos de dicha anomalía se les fueron otorgados a la Guardia Dragón, quienes se apresuraron en alistarse y prepararse para una misión de búsqueda y rescate.
— ¿Cómo va el teletransporte?
Preguntó la líder de la operación con los brazos cruzados.
— Los excéntricos llevan media hora reuniendo el prana necesario para llevar a cinco grupos en distintas localizaciones de la ciudad. Según me comentan, estaría listo en cinco minutos.
— Muy bien. Quiero que la operación se lleve a cabo de una manera rápida y limpia, no necesitamos más bajas, una vez hayamos terminado de despejar la ciudad necesito que envíes a toda la Guardia de Apoyo. Debe haber cientos de civiles heridos y es nuestro deber atenderlos y ayudarlos en la medida de lo posible. ¿Ok?
La líder mostraba la preocupación en sus palabras, después de todo, saber que dos Zekrysh eran los responsables de la horda era preocupante. Aunque ese no era el mayor de sus problemas.
— Entendido, directora. Si me permite tocar el tema, quería preguntarle si estaba segura de llevar a esa estudiante, no pertenece a ninguna Guardia Espiritual y podría entorpecer la operación. Si le soy sincero, no creo que ella esté preparada para lo que viene.
La directora se encogió de hombros y desvió levemente la mirada.
— Me estuvo rogando por mucho tiempo, además ver lo preocupada que está por su mejor amiga me hizo sentir empatía, supongo. De todas formas, ella estará buscando junto a un grupo pequeño alejados de los Zekrysh, así que no le veo ningún problema.
— Si usted lo dice... Es mejor que vaya a hablar con ella, no ha soltado ese teléfono desde que llegó.
La directora volteó a ver a la joven de cabello castaño y se acercó discretamente, conforme avanzaba seguía escuchando el buzón de voz proveniente de su teléfono; muy en el fondo sabía que, debía decirle algunas palabras.
<Lo sentimos, el número con el que se trata de comunicar está fuera de servicio...>
— Tsk. ¡Contesta el bendito teléfono!
— Hmph. Por lo que veo, aún no has podido comunicarte con ella.
— ¡No! No contesta mis llamadas. Puede que haya apagado su celular, pero no estoy segura... Temo que le haya pasado algo.
— No tienes por qué preocuparte. Ella estará bien.
Aquella afirmación hizo que la poca paciencia que tenía la joven explotará en mil pedazos desatando al Kraken.
— ¿¡Cómo demonios pretendes que no me preocupe!? ¡Ella podría estar siendo devorada por unos malditos demonios mientras nosotras estamos aquí hablando como si nada pasará! ¡AGHH!
La voz de la chica poseía un sentimiento crudo, pero sabía que desquitarse con la directora no mantendría a su mejor amiga sana y salva. Así que, una vez calmada prosiguió una merecida disculpa.
— Perdón, perdón, no era mi intención gritarte... Pero es que pensar en eso me pone de malas...
La pelinegra de iris verdoso, poso su mano en el hombro de la chica, y con una mirada segura de sí misma, soltó las siguientes palabras:
— Entiendo cómo te sientes, pero debes mantener la cordura, de lo contrario morirás una vez estemos allá. Además, no creo que "él" lo permita.
— ¿A quién te refieres con él?
Preguntó la chica confusa.
— Descuida, ya lo verás...
La directora fue interrumpida por un anuncio circulando en toda la habitación, lo cual marcaba el inicio de la esperanza de los ciudadanos de Brumaria.
<Atención a todo el mundo, el teletransporte ya está en su punto máximo, hagan el favor de presentarse junto a su escuadrón dentro de sus respectivos sellos mágicos, repito, el teletransporte ya está en su punto máximo, hagan el favor de presentarse junto a su escuadrón dentro de sus respectivos sellos mágicos>
— Muy bien, ya es hora, ve y reúnete con tus compañeros. Buena suerte.
— Entendido, directora.
☆ FIN DEL CAPÍTULO 1 ☆
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Nota del autor: Eso ha sido todo por esta última parte del capítulo 1, espero que les haya gustado tanto como a mí me gustó escribirla. Sé que no esta última parte no es una continuación directa de —Acorralados—, pero las grandes cosas siempre tardan en llegar y eso se verá en la primera parte del capítulo 2 titulada —Zekrysh vs Prodigio—.
