Tu mano

1.8K 152 17
                                    

Caminaba con un gran sonrisa en su rostro,  se notaba lo nervioso que iba, las manos le sudaban demasiado.

«Calmate Theo» se repetía

Se fijó que la secretaria no estaba y decidió entrar a la oficina de su novia. Apenas la abrió se encontró con una sorpresa nada agradable para el.

Dentro de la oficina se encontraban su novia y la comadreja, conversando animadamente como en los viejos tiempos.

— ¿Recuerdas aquella vez en la que a Malfoy lo transformaron en hurón?— dijo Ron divertido.

— ¡Claro que lo recuerdo!— aseguró Hermione para luego soltar una sonora carcajada, a la cual se unió el pelirrojo.

Theo se aclaró la garganta para llamar la atención de los presentes.

— ¿Interrumpo algo?— cuestionó seriamente.

Rápidamente la pareja de amigos dejaron de reír.

— Claro que no, amor— aseguró Hermione sonriendo dulcemente lo que derritió a Theo, pero no lo demostró ya que seguía tieso por la presencia del pelirrojo.

— ¿Que haces aquí, Weasley?— interrogó cruzado de brazos.

Ron se encogió de hombros.

— Solo vine a disculparme con Mione. Pero veo que estoy de más, así que mejor me voy.

Sin más el pelirrojo se fue de allí.

Hermione quedó algo triste al ver que Theo no soportaba a Ron, el estaba en todo su derecho, pero le gustaría que se llevarán bien.

Theo noto esto, suspiró con pesadez.

— Hermione, prometo que me llevaré bien con él, pero si hace una estupidez le daré una patada en el trasero que nunca olvidará.

Hermione río ante su comentario, se acercó y le dió un inocente beso en los labios.

— Gracias, Theo.

El muchacho sonrió ante el gesto dulce.

— ¿Venías por algo en especial?— quiso saber ella rodeado su escritorio para poder seguir con el papeleo que el ministro le había encargado.

— Solo venía a invitarte a almorzar, conozco un restaurante italiano muy bueno— comentó tomando asiento frente a ella, rogando que dijera que sí—. Además, luego quiero llevarte a otro lugar.

— Está bien, solo espera que termine con esto— respondió ella leyendo algo muy concentrada.

— Bien.

Theo se quedó en silencio, tratando de mantener la calma, pero no sé podía estar quieto que comenzó a jugar con la mano libre de Hermione.

— ¿Te sucede algo?— cuestionó con gracia—. Pareces ansioso.

Theo se puso recto y sus mejillas tornaron rosas de la vergüenza.

— Perdón, es solo que...¿Te falta mucho?

Hermione frunció el ceño.

— ¿Que me estás ocultando, Theo?¿Sucedió algo malo?— se empezó a preocupar—. Si es así quiero que me lo digas.

— ¡No! No es nada de eso— intento calmarla.

Hermione suspiró.

— ¿Es algo respecto a Stephanie?

— No y espero no saber nada más de esa bruja— se quejo el hombre.

La Francesa se había vuelto muy ofendida y humillada a su país.

Juntos Por El Destino (SIN EDITAR) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora