Feline Lover (Bakugou Katsuki) [Lemon] ||BnHA|| [02]

Capitulo 14

Las cosas había avanzado demasiado rápido, tanto en ese momento como desde que se conocieron, fue culpa de ambos claramente, por su parte Danger decidió jugar demasiado y sobre pasar el límite de lo debido y lo indebido. Pero todo hubiera quedado como un mal recuerdo si el chico no le hubiera seguido la corriente. Y ahora no se encontrarían besándose con Mei sobre su regazo mientras que él estaba sentado en la cama de la chica.

El primer beso de esa noche fue romántico y cargado de sentimientos pero con forme pasaron los minutos la intensidad aumentaba y con ello el que la cargará y se adentraran de regreso a la habitación. Extrañamente no había toqueteo, Bakugou mantenía sus manos sobre la cadera de Mei quién tenía las suyas sobre los hombros del chico, besándose y solo separando sus labios para tomar aire y continuar. Y así continuaron, un largo rato.

Y todo termino cuando ella se separó una última vez, con los labios húmedos, algo hinchados y rosados, sus mejillas también estaban en un ligero tono cereza y sus pupilas estaban dilatadas tan perdida en la intensidad de cada contactó. Jadeaba y se miraban a los ojos, para su sorpresa estaba tranquila, incluso más de lo que estuvo esa mañana, el di anterior y desde que su celo había iniciado, por qué aquel calor en su vientre bajo desapareció.

Se preguntaba si lo que estaban haciendo era lo que necesitaba para calmarse durante sus ciclos o solo era su imaginación, pero las pruebas estaban ahí que al parecer también Katsuki se percató, que incluso el estaba sorprendido por no estar excitado ni erecto en esos momentos. Al notar la tranquilidad de ambos, él decidió levantarse dejándola sobre la cama.

—Ya me voy —dijo en voz tranquila y profunda. Al parecer entro en razón dándose cuenta de que estuvo media hora besandose sin descanso con ella.

En ese momento le echo una vistazo rápido a la habitación, estaba oscuro por lo que no se veía con facilidad. El suelo, las paredes y incluso algunas almohadas y el escritorio estaban destruidos o por lo menos llenos de grandes marcas de zarpazos, reflejando la desesperación de la chica durante aquellos cuatro días, como si hubiera tenido una batalla consigo misma, como si se hubiese peleado con Danger.

—No lo mires —pidio sin dirigirle la mirada.

No necesitaba repetirselo, lo comprendió y regreso la vista a ella por unos segundos, descifrando lo que pasaba por su mente. Termino por rendirse -extraño tratándose de Bakugou- por el momento y se dispuso a salir de la habitación, estaba seguro que los demás ya se encontraban en sus cuarto.

—Espero que mañana tampoco tenga seguro, cola de algodón.

Levanto la vista, detallando su trabajada espalda alejarse hacía la salida, llena de una pizca de felicidad y alivio, sintiéndose por primera vez realmente bien por aquellos besos y por la palabras del rubio quien ya cerraba la puerta estando del otro lado. Dejándola sola nuevamente con sus pensamientos y con la nueva experiencia en la cabeza, pero sobre todo, dejándola con una sensación de tranquilidad.

—... Hasta mañana...

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A la mañana siguiente el rubio se despertó más tarde de lo normal, era común que estuviera en el comedor incluso dos horas antes que los demás, aunque no pudiera evitar a Kirishima que ya se encontraba fuera de su puerta esperándolo cada día. Pero ahora había dormido más, nadie se atrevió a despertarlo -ni siquiera Izuku- y cuando salió de su habitación podía escuchar desde ahí a los demás hablando abajo.