Cambios Inesperados | Jenlisa [COMPLETO]

Esto no era lo que esperaba

La vida de Kim Jennie no era en general tranquilidad absoluta, pero estaba bastante bien con ella.

La mujer nacida en Seúl trabajaba en la firma de abogados mas prestigiosa de toda la ciudad, aún asimilaba como habían transcurrido cinco años desde que ingresó al estudio como interna recién graduada de 23 años, por supuesto el haber salido de las puertas de la gran Seoul National University fue un enorme plus a su currículum para postular.

Toda madre deseaba en Corea que su yerno o nuera fuera de aquella universidad. Todos recomendaban a estos profesionales. Así de grande era el prestigio de esta casa de estudios.

Ahora ella con 28 años estaba a dos pasos de volverse socia y su nombre atemorizaba a más de un abogado cuando sabía que tendría que enfrentarse con ella en los juzgados.

Esta mañana se despertó, como todos los días, a las siete en punto para darse una ducha y enfundarse en su traje Chanel y sus tacones de Louis Vuitton. Tomó las llaves de su coche deportivo rumbo al Buffette de "Johnson &Deller". Sólo un café latte con leche de soya se atravesó en su camino ¿para qué necesitaría comer más? Esa sería una mañana pesada, como todos los viernes cuando tienes que dar el último esfuerzo para merecer el fin de semana libre.

La guapa joven de cabellos castaños llegó a su destino haciéndose notar con sólo el ruido de sus altos tacones escuchándose en todo el piso, evidentemente era ese tipo de mujer que hacen voltear verla y Jennie lo sabía muy bien; las personas la miraban, unos con miedo, otros suspirando y otros con aparente... ¿compasión?

Un "El jefe la espera" fue lo último que esperó escuchar al entrar, pero fue lo primero y eso no era buena señal.

-Kim Jennie -nombró un hombre de cabello oscuro y gesto severo.

-Luces serio, Kou -dice indiferente la joven que se sienta sin esperar la invitación que nunca llega.

-Lo estoy ¿has escuchado las noticias?

-¿Sobre el divorcio de los Sweeney? Claro. ¿quién no? Se suponía que eso pasaría desde su discusión en la fiesta de fin de año de inversionistas en el Ritz. Cuentan que la señora Sweeney lo planeaba por años, al menos eso canturrean las señoras del Salón de belleza, pero bueno... Si, lo sé.

El pelinegro puso mala cara pero eso no pareció molestarle mucho a la de ojos marrones.

-¿Qué hay con eso? -cuestionó Jennie

-La bruja te pidió a ti para que te hagas cargo de su caso

-¿En verdad? ¿La bruja Sweeney me pidió a mi? -Jennie estaba sorprendida, necesitaba un caso fuerte para aumentar su reputación.

-Eres sanguinaria y supo de ti por el caso de la cadena Miller.

Una sonrisa de orgullo se mantuvo en el rostro de la joven.

-Eso no te mantendría preocupado...

-La bruja Sweeney no es la única que se ha fijado en tu trabajo. También mi padre.

-Entonces si gano...

-Te hará socia

-¿Quién defenderá a mi víctima?