DISFRAZADA

CAPÍTULO 10

Aunque me toma por sorpresa no me pongo nerviosa, llevo mucho tiempo pensado que decir en estos momentos.

- Me aburrí de mi cabello pero me avergüenza un poco que lo haya cortado demás.- Dijo sin quitar la vista de los ojos de Axel quien mira mi reflejo en el espejo.

- Pero te habia dicho que no lo cortaras.- Dice con un hilo de su voz.- ¿En realidad lo cortaste porque estabas aburrida de él o por llevarme la contraria?

Me siento mal porque Axel me mira con tristeza, mucha tristeza.

- Es que estaba muy maltratado y además ya estaba muy largo.- Le digo girandome para frotarle los brazos.

Asiente y sonríe sin ganas. Recuerdo que tengo la Lion dirjiendose a mi casa y que no tengo mucho tiempo.

- Andas muy rara últimamente y...

- ¿Sabes, bro? Tengo que irme, hablemos luego.- Le doy un golpe en el hombro.

- ¿Bro?- Me mira sin entenderme.

Sabia que en cualquier momento me saldría lo hombre.

- Sí, bro. Ya sabes, como brother, es decir hermano y esas cosas. Te quiero como hermano y hermano es bro. Tu me entiendes "BRO".- Le digo nerviosa y me marcho mientras me coloco la peluca.

Salgo del baño y veo a Julie sentada sola hablando por teléfono y me imagino a Lion iendo a mi casa.

La moto esta todavía en manos de Jared y tengo que tomar un taxi.

- ¡Amigo a mi casa ahora mismo!mismo.- le grito al taxista apenas me subo.

Suelta una risa.

- ¿Y dónde se supone que es tu casa niña?

- Oh si.- Le doy la dirección y lo sobornó para que se pase los semáforos en tono y pase sin dudar.

El hombre regordete de color hace su mayor esfuerzo para llegar tan pronto como puede y después de una jugosa propina se detiene una cuadra antes de mi casa.

Corro en medio de los patios de los vecinos y me saltó una cerca pero no me percato y caigo a la piscina. Con la poco fuerza que me queda y el oxígeno que contienen mis pulmones salgo a la superficie y me hecho a correr nuevamente. Agradezco que el entrenamiento de mis tres mosqueteros funcionen de algo porque corro más rápido que choros perseguido por policías. Vuelvo a saltar la utlima cerca y mi celular suena.

- ¡Hola!- Digo agitada.

- Ary llevo golpeando tu puerta como diez minutos y no respondes. Estas en la pizzería ¿Verdad?  Escuche que te llamaban y te escondites. ¿No me quieres hablar o que? ¿Solo me utilizaste para tus entrenamientos?

¡¿Sorry me you?!

Como puedo saltó mi cerca y caigo en la parte trasera de mi patio, arranco la peluca de mi cabeza y la lanzo a los arbustos

- Claro que no amigo. Es que estoy en el patio de mi casa y no te escuche ahora mismo te abro.- Le digo mientras camino por la blanca baldosas de mi casa y llego a la puerta principal.- ¡Ves aquí estoy!

Aún con el celular en el odio me sonríe y me da un abrazo.

- Perdóname bro crei que...

- Tranquilo hermano pasa.- Le digo asiendome a un lado.

Disimuladamente recupero el aire y el se pasea por toda la sala de estar.

- Por cierto. ¿Porque estás mojado?- Me mira de pie a cabeza.

- ¡Esta bañanadome!- Digo lo primero que se me vienen a la cabeza.

- ¿Con todo y ropa? Además me dijistes que estabas en el patio.- Se cruza de brazos como intentado descifrar mi mentira.