Estafa de Amor

Capítulo Diecisiete

Flavio observó atento la impresión de su amiga ante la noticia, en todos los medios en México se hablaba del compromiso de Samuel y Sofía, y de cómo esa unión haría que se fusionaran dos de los imperios más importantes del sector industrial en el país, por más que buscaba en las notas, noticias de ella, de su rubia, no había nada, pareciera que a Irina se la hubiera tragado la tierra, pudo encontrar miles de imágenes donde aparecían Cayetana, Ignacio, Samuel y Sofía, hablaban de lo que ellos hacían, de cómo día a día sus empresas crecían, de su felicidad, pero para nada mencionaban a Irina, ¿qué pasaba con Irina? Se preguntaba una y otra vez todo este tiempo.

Flavio – ¿entonces cancelamos? –Le acercó a Andrea un vaso con agua–

Andrea – no, yo necesito que Said conozca a su padre, cada vez pregunta más por él, ya no tengo más excusas que decirle

Flavio – sí, desde un principio le hubieras dicho que su padre estaba muerto, ahora no... –Andrea lo interrumpió–

Andrea – no puedo Flavio –suspiró con pesar– de hecho no sé cómo vaya a tomar todo esto

Flavio – ¿tienes miedo que no te crea?

Andrea – no exactamente

Flavio – entonces tienes miedo de que te lo quiera quitar, de que comience una lucha legal por él –Andrea suspiró dándole a entender que realmente eso era lo que ella creía–

Andrea – tengo miedo de muchas cosas, pero también sé que esto es lo correcto

Flavio – no sé Andy, Samuel nunca te busco, el sólo se desapareció en el momento que más lo necesitabas

Andrea – lo sé, pero bueno yo tampoco le dije nada, aun no entiendo que le dijo Cayetana a mi madre para que se pusiera tan mal –sus ojos se cristalizaron– sabes que ella amaría a Said

Flavio – lo sé, Said es un niño que se gana el corazón de cualquiera, entonces ¿Cuándo te vas?

Andrea – me voy, que tú no piensas venir conmigo –Flavio negó–

Flavio – bueno con Leonora decidimos, dar el siguiente paso –Andrea lo observó sorprendida–

Andrea – ¡te vas a casar!

Flavio – ¡no! oye eso ya no se usa –Andrea sonrió negando–

Andrea – ya sé, lo de hoy es la unión libre –Flavio asintió–

Flavio – pero bueno, tenemos que ver los últimos detalles del departamento, y bueno –se rascó la cabeza, Andrea lo observaba sin entender– al parecer, bueno tiene sospechas –Andrea frunció el ceño– creo que pues –se levanto se acercó hacía la pared de cristal que le daba una hermosa vista de la ciudad y suspiró ante lo que iba a decir– Leonora esta embarazada

Andrea – ¡qué! ¿De verdad? –Estaba emocionada– pero eso es... –el se giró observándola– ¿Qué pasa Flavio? Que acaso tú no quieres tener un hijo

Flavio – Andrea no estaba en nuestros planes, y bueno Leonora necesita tiempo, y yo quiero convencerla que tenerlo es lo mejor

Andrea – no estoy entendiendo Flavio

Flavio – a pesar de no ser algo planeado, para mi fue una buena noticia, pero para ella no, necesito convencerla que estando juntos todo lo referente a la niña estará bien

Andrea – ¡niña! – lo miró completamente sorprendida–

Flavio – llevo años soñando con una niña, recuerdas que te lo he dicho –Andrea sonrió– pues creo que es ella