TURBO.

CAPÍTULO 7

Llevaba ya una semana laboral aquí en la costa. Mi hermano me llamaba cada día y me suplicaba regresar, o me insistía y depositaba ridículas cantidades de dinero en mi cuenta, o cualquier locura que se le ocurriera para incomodarme.

Debería tener un poco más de fé en mí, me he tomado todas las pastillas cuando me corresponden, mantengo limpia la casa, como a las horas que corresponden y siempre que salgo le aviso que lo haré y a dónde iré.

Acababa de salir del conservatorio y esperaba el Uber para regresar a casa, la verdad estaba cansada como la mierda.

Cuando subí al auto y el conductor avanzó, revisé mi teléfono, mi hermano no me había llamado en todo el día y eso se me hacía curioso, conociéndolo a él y a sus amigos estaban haciendo una estupidez para que regrese a salvarles el culo.

suspiré con pesadez y recogí mi cabello en una coleta en lo alto de mi cabeza. Me despedí del conductor y bajé del auto cuando llegué a mi destino, caminé hasta el interior de la playa y cuando estuve cerca de la casa escuché risas.

Me estremecí ¿Y si eran adolescentes locos o drogadictos? Respiré con fuerza  y aumenté mi ritmo. Cuando tuve vista al pórtico vi algunos bolsos tirados en todo el lugar y personas de espaldas sentadas sobre ellos; fruncí el ceño y caminé aún más rápido. Cuando llegué a los escalones que daban entrada al pórtico me sorprendí con lo que vi.

Mi hermano, Dallas, Donovan y Walter; todos sentados sobre una gran cantidad de equipaje con su vista pegada a los celulares. Dejé caer mi bolso al piso provocando que las cuatro montañas frente a mi, me mirarán sorprendidos;me crucé de brazos y enarqué una ceja, esperando una explicación.

- Schwester! [¡Hermana!]- Exclamó mi hermano antes de tomarme en brazos como si fuera un juguete.- Te extrañé tanto.- Cuando me bajó y me soltó de su abrazo notó que seguía mirándolo con seriedad y suspiró, lanzó una sonrisa nerviosa y miró a los chicos pidiendo ayuda.

- ¡Oye, linda! ¿Porqué tardaste tanto? Llevamos desde las 13 horas esperando aquí.- Pasé mi mirada seria hasta él y de inmediato abrió sus ojos asustado.- ¡Yo le dije que sería una mala idea pero no me escuchó!

Miré de vuelta a mi hermano y él sonrió asustado mientras caminaba lentamente hacia atrás. Dejé caer mis brazos de mi pacho y eso le bastó para correr a esconderse detrás del cuerpo de Walter, el cual seguía sentado en su bolso mirándome con cautela.

- ¡Eres un jodido traidor!- Exclamó mi hermano hacia Donovan.

- ¿Puede alguien explicarme por qué están aquí?- Pregunté con voz ronca y suave mientras miraba a Walter.

- E-ellos querían ver si es-estabas bien.- Contestó con dificultad Dallas mientras gateaba lentamente hasta la espalda de Walter con mi hermano. Donovan se quedó de pie mirándome con atención.

- Los quiero ver sentados en la mesa de la cocina en diez minutos y empiezo a contar desde que abra la puerta.- Ordené provocando que todos asintieran al mismo tiempo con desenfreno. Caminé lentamente hacia Donovan y me planté intimidantemente sin importarme que sea proporcionalmente más grande que yo.- El que tarde, dormirá con los peces.- El enorme chico frente a mí tragó con fuerza y lo empujé para abrir la puerta e ingresar a la habitación principal.

Los cuatro enormes hombres ingresaron corriendo a los cuartos vacíos que ya yo había desempolvado. Me cambié por ropa más cómoda e ingresé a la cocina. Sorprendentemente cuando llegué, ellos ya estaban sentados. Como solo habían cuatro sillas yo me quedé de pie mirándolos atentamente. Los cuatro miraban sus manos nerviosos por mi presencia. En un momento Walter se inclina hacia Wendell y fijo mi mirada en ellos.

- ¿Qué nos hará?- Mi hermano cerró los ojos y luego lo miró.

- Una vez que liberas al Kraken.- Empezó susurrando.- No sabes lo que va a pasar.

- ¡Callense!- Gritó/susurró Donovan.- No quiero morir, mi titán es muy grande como para desperdiciarlo.

- Donovan.- Riñó Dallas de la misma forma.- Estamos a punto de ser enterrados y tú solo piensas en tu pipí.

- ¿Pipí? Creo que esa es una manera de ofenderlo.- Contestó Donovan algo ofendido.

- ¿Porqué le dices Titán si las uñas de Emma son más largas que eso?- Mofó Walter haciendo que Wendell riera por lo bajo. Todos estaban susurrando y, al parecer, se habían olvidado de mi presencia.

- Y cuando hace el frutifantástico las chicas no gimen, lloran.- Se burló mi hermano haciendo que todos rieran menos Donovan.

- Es mejor estar con este Titán que con un tipo que llama al acto "El frutifantástico".- Se defendió haciendo que Dallas y Walter tuvieran que cubrirse las bocas para no reír fuerte.

Decidí que fue suficiente y carraspeé haciendo que todos regresaran a la postura seria del principio.

- ¿Por qué pensaron que era buena idea venir? ¿Que no tienen entrenamientos y esas mierdas?- Pregunté acercándome a la mesa para que todos me miraran, colocándome entre Walter y mi hermano.

- De hecho, tenemos unos cuantos meses de vacaciones por haber ganado la final.- Comenzó a explicar Dallas muy animado hasta que vio la seriedad en mi mirada.

- Tut mir leid. [Lo siento.]- Dijo mi hermano mirándome a la cara.- Debí haberte avisado que vendríamos pero es que fue muy repentino, no quería que estuvieras sola mucho tiempo.- Suspiré al escuchar eso.

No puedo molestarme con él, es todo lo que tengo, quizás estoy siendo muy dura y él solo quiere cuidarme. Y el que haya traído a sus amigos, no me molesta, solo no sé cómo mierda vamos a caber tantas personas en esta casita.

- Nada de traer mujeres extrañas, ni fiestas, no quiero que fumen o beban dentro de esta casa y está prohibido romper o "remodelar" algo.- Comencé a establecer reglas porque los conozco, por lo menos a Dallas y a Wendell, harán desastre a toda costa.- Deben llevar a lavar su propia ropa y hacer su propia comida porque mi horario de trabajo es desde las 8 horas hasta las 18 horas.- Continué y me acerqué hasta la cocina para ver por la ventana.- Y por el mal rato que me hicieron pasar, deberán comprar un refrigerador entre los cuatro.- Terminé y los volteé a mirar, me observaban fijamente con los ojos abiertos.- Alles klar? [¿Todo claro?]

Todos asintieron, dando a entender que comprendían y me saqué mi teléfono celular para pedir pizza y comer, es lo único que he comido desde que llegué aquí.

- Y ustedes pagarán la pizza.- Asintieron y me adentré a mi habitación, en serio necesitaba un baño.