Hojas escritas

41- No más otoños tristes

41- No más otoños tristes "02-01-2015"

Pensaba que la vida era bonita, pero resulta que yo no estaba hecha para la vida, ni la vida estaba hecha para mí, somos totalmente opuestas como el Sol y la Luna, no se compaginan, y siento que necesito mi espacio sobre mi vida, necesito estar sola un tiempo para poder aliviar todo lo que siento y no de una mala manera como lo hacía antes, quiero empezar bien este 2015, quiero de una puñetera vez que un año me vaya bien, quiero ser feliz y lo acepto, en noviembre me volví a cortar, y llore, y grite y ese hecho me hizo dar cuenta de que no quiero volver a vivir eso, no quiero volver a utilizar esa vía de escape porque me siento ridícula, este año va a ser diferente, voy a apartarme de este mundo oscuro, no quiero volver a vivir más inviernos vacíos, más primaveras sin vida, más veranos agobiantes y mucho menos otoños tristes, quiero por una vez no sentir que las hojas de los arboles caen y el frío se acerca como se acercaban las lágrimas que caían de las ramas de la vida y el frío se acumulaba en mi ser haciéndome sentir pequeña e insignificante, por una vez en mi vida quiero pensar en mí, por no caer, por sonreír, por vivir, por mí. En cierto modo sigo teniendo mis momentos de esos en los que no estas mal pero tampoco estas bien y no te pasa nada, no sientes nada, esa sensación de vacío, de no interés por nada, y como cuando poco a poco la nada se convierte en todo, pero creo que ha llegado mi hora, quiero hacer feliz a aquellos que lo pasaron mal conmigo y no me abandonaron y yo también quiero serlo, a pesar de que tenga mis problemillas, no quiero seguir llorando por las noches de tristeza y frustración por lo horrible que ha sido mi día, quiero llorar de felicidad, porque a pesar de que haya baches los he superado y sé que todo irá bien. Por las noches es cuando más emociones tengo y más sola me siento, pero aún que suene siniestro a veces siento la presencia de mi abuela sentada en la silla al lado de mi cama esperando hasta que me duerma como solía hacer cuando yo era pequeña.
Mi abuela solía decirme que tenía un don y que tenía que aprovecharlo, de ella aprendí muchas cosas, ella decía que podía hipnotizar a las personas con mis palabras y expresiones, con mi forma de mirar y de hablar, decía que era algo mágico, ojalá ella siguiese aquí, cuando se fue se llevó mucho con ella.