°• Mi Linda Sirena •° [TERMINADA]

III

Estaba sin consuelo alguno. Quería desaparecer, que te destruyan lo que más amas y que desperdicias te tanto de tu tiempo para eso le dolería a cual quiera.
Todoroki con sus pequeñas aletas acariciaba su pelo verde y revoltoso. Kaminari se dejaba acariciar y Shinso, que había llegado minutos después, se sentía la más vil mierda de todo el mundo, ver a su amigo tan triste le hacía sentir tan mal. Aunque... Recordó que Kaminari le había dicho que encontraron una capa que era del enamorado de Midoriya, entonces se le ocurrió que su consuelo sería la capa.
Busco entre los escombros de piedra que había caído de la cueva. Cuando encontró un bulto de arena, se dirigió ahí, quitó la arena, y vio que estaba la gran capa de la que tanto hablaban, entonces llamo al pecoso.

– M-Midoriya. No todo está perdido.-

– Si lo está...-

– De hecho no, mira.- Izuku no quería ver pero hizo el intento y toda su tristeza se esfumó al ver la tela roja.

– Kacchan...- Dijo en un susurro inaudible. Denki y Shoto también la miraron sin hablar, la habían olvidado por completo. Izuku se dirigió al cangrejo y le dió unas palmaditas en su cabeza.- Gracias Shinso.- Con eso agarró la capa aunque aún así estaba triste, pues los objetos que perdió no iban a volver, al menos estaba feliz que su padre no haya desintegrado la capa.

– Pobre... Estas aquí sin saber que hacer...- Hablo una voz desconocida.

– Se ve tan... Miserable...- Escucho a otro.

Todos se quedaron en silencio, tenían miedo, por eso se escondieron atrás del peli-verde haciéndose bolita, ya en esa posición de defensa el que decidió hablar fue Izuku.- Q-quien está ahí?-

– Querrás decir “ Quiénes " y... Solo somos unas viles anguilas, mi nombre es Toga.- Con eso apareció una anguila de la oscuridad con un color ¿dorado?. Valla que el océano tenía criaturas bastante extrañas.- Y aquí también está mi hermano Dabi.- También apareció otra anguila color negro.

– Toga no teníamos que dar esa información.- Hablo Dabi.-. Te vez triste, solo y enojado.-

– U-ustedes no saben nada.- Dijo Midoriya con una voz quebrada.

– Claro que lo sabemos... Se nota en tu pobre rostro.-

– Pobre Izuku...- Está vez hablo Toga.- Pareces estar harto de tu padre.-

– E-eso... Eso no es verdad! Yo lo quiero mucho!-

– Lo quieres pero aún así te has cansado de estar enserrado.- Hablo Dabi.

– Bueno... Si...-

– No te gustaría explorar el mundo de los humanos?- Hablaron al mismo tiempo.

– Eh?-

– Piénsalo. Estar ahí conociendo gente nueva, probar cosas... Descubrir el funcionamiento de algunos utensilios que ocupan los humanos, y sobre todo... Estar con el humano que te trae como loco.- Lo aconsejo la anguila negra.

– Como saben eso?!- Izuku estaba entrando en pánico y sus amigos se ocultaban tras el.

– Lo sabemos y ya... Hay alguien que puede hacerte el favor de acercarte al príncipe.- Dijo Toga.

– Así?... Q-quien es?-

– El brujo del mar... Puede hacer todo tipo de hechizos, solo dile lo que deseas y el hará ese sueño realidad. Claro, a veces tiene un precio.- Dijeron al mismo tiempo