°• Mi Linda Sirena •° [TERMINADA]

Vl

¡Atención!

Me equivoqué en eso de los días jeje... Entonces Midoriya solo le queda este día y el que sigue por qué desperdicio un día en eso de encontrar a Bakugō, etc. Entons... Solo le quedan dos días! Es todo! Disfruten

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—Quiero que lo trates muy bien! Oíste mocoso?!

—Si! Maldita vieja! Ya te-

—No me digas así! Maldito engendro!

—Comportense por favor...

En la entrada del castillo, Mitsuki regañaba a Katsuki para que se comportará adecuadamente ese día, pues no siempre su hijo tenía una cita con un ángel caído del cielo.
Masaru un poco nervioso, trataba de calmar a ambos.
Bakugo por su parte, se encontraba feliz, aún seguía con la mentalidad de que ese chico no era el indicado, sin embargo cuando lo ve siente algo en su corazón; eso hace que se confunda de más.

—Ejem ejem! Rey y Reina, principe... Aquí está el joven emmm... Solo el joven jeje.

Hablo la mucama Midnight, había llegado a la puerta cerca de ellos. Hizo una reverencia y mostró a Izuku. Llevaba la misma ropa de ayer, solo que está vez en su espalda traía una mochila de cuero y olía a perfume. Algo así como a rosas.

—Valla! Te vez muy bien pequeño!

—Pareces un viajero.

—De que se emocionan? Trae la misma ropa que ayer, además- Recibió un coscorron de parte de su mamá.

—Cállate imbécil! Tu también traes la misma ropa que ayer!

—DEJA DE GOLPEARME VIEJA DE MIER- Otro coscorron.

—DEJA DE LLAMARME ASÍ! EL JOVENCITO SE VE MEJOR QUE TÚ!

—Pa-para Mitsuki, asustas al joven.

—YA VEZ VIEJA?! NADIE TE SOPORT-

—CIERRA TU MALDITA BOCA!—. La reina le dió tremendo golpe que lo dejo inconsciente—. No te preocupes pequeño, haré que despierte. Midnight!

—Enseguida—. Hizo una reverencia y se alejó de ahí, dejando a Izuku solo.

—Tranquilo, irán a su cita si o si. Te vez bien, la mochila supongo es para aguardar algunos recuerdos, cierto?—. Midoriya asintió con la cabeza—. Está bien, siento que mi hijo sea un cascarrabias... Diviértanse!

—Ya está reina—. Regreso la mucama que traía una cubeta de agua.

(...)

—¡VIEJA YA TE DIJE QUE NO LE HAGAS CASO A LA OTRA VIEJA!

—¡¿DE QUE HABLA?! NO SOY VIEJA! APENAS SOY UNA JOVENCITA!

Tras echarle la cubeta de agua en la cara, se levantó de golpe casi ahogándose, le reclamo a Midnight y así continuo la discusión.
Luego de 20 minutos por fin salieron del palacio en un pequeño carruaje por decirlo así, Katsuki era quien guiaba al caballo blanco que jalaba de la carreta para dirigirlo al pueblo, mientras que Izuku miraba embobado el camino.

Estando casi en el pueblo llegaron a un pequeño puente y abajo de este había un río. En donde estaban ciertos animalitos.

—Ya casi llegamos...—. Anuncio Bakugō al peliverde, que solo asintió con la cabeza emocionado.