Los relatos de la Leona y la Rosa.

Venganza.

_______ P.D.V.

Terminando la primera mitad del último año escolar.

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Fui detrás de ella, pasando por los pasillos de la escuela.

-¡Vamos, Dinah! ¡No te pongas así! -Logré alcanzarla.

-Pudiste haberme dicho. Estoy molesta, no me hables. -Me dio otra vez la espalda.

-Ay, por favor. -La tomé del brazo. -Deja la tontería. No fue mi culpa, ¿sabes? Ella respondió mi petición. Yo de verdad quería planear algo grande para pedírselo, pero me ganó. Sabes que lo hizo a propósito para que fuera algo privado. Se aprovechó de la situación.

Me observó fijamente, pero volvió a ignorarme y yo suspiré, siguiéndola otra vez.

-Escucha, si tanto te duele, entonces organicemos algo grande y así se lo pido de nuevo. ¿Qué dices? -Insistí.

-¡Así no tiene sentido! -Explotó. -¡Ya todo el mundo sabe lo que te va a decir! ¡Ya el compromiso está ahí! -Tomó mi mano izquierda, donde tengo el anillo de compromiso que me dio Lauren, y la agitó con fuerza, sin hacerme daño. Sólo para hacer drama. Me soltó con algo de brusquedad. -Dices todo el tiempo que soy tu amiga, pero ni tú te lo crees.

-Dinah, no seas boba, claro que eres mi amiga. -La abracé y resistí sus empujones de rechazo. -Sólo te duele que no te lo haya dicho cuando me aceptó. Ya, supéralo.

Se cansó de pelear conmigo y suspiró de frustración.

-Como sea. -Dijo por lo bajo. Yo me separé y le sonreí plenamente y ella me sacó la lengua. -Por cierto, Normani clausuró hoy la piscina.

-¿Qué? ¿Por qué? -Fruncí el ceño.

-Los chicos dicen que es por mantenimiento, pero yo no lo creo. Algo se traen entre manos esas estúpidas. Todo por culpa de Nick. -Se cruzó de brazos a regañadientes.

-Todo por culpa de Lucy, querrás decir. -Avisé y ella colocó los ojos en blanco. -Ya, relájate, es nuestro último año. Ya veremos cómo guiar a los peques para que ganemos de nuevo el consejo. Déjalas probar la victoria al menos una vez.

Ella hizo una mueca de descontento.

-Aunque no está mal que hayan logrado los últimos viernes de cada mes sólo para actividades extracurriculares. -Admití mirando las actividades alrededor y ella me lanzó un vistazo de rabia. -¿Qué? Es la verdad. A los estudiantes les gusta. Si ganamos el año que viene, no querrán que quitemos eso.

-Es lo único que han logrado, no lo olvides. Lo demás ha sido mantener nuestros logros y reforzarlos. -Aclaró.

-Lo sé, Di. -Reí un poco. -Organizaré todo y lo dejaré listo para que la generación de relevo te haga honores ganando, no te preocupes. -Le guiñé un ojo y ella sonrió de lado.

-¡Chicas! -Apareció Camila corriendo con rostro angustiado. -¡Normani se cayó de las gradas del gimnasio y se fracturó una pierna!

-¿¡Qué!? -Dijimos Dinah y yo al unísono y salimos corriendo detrás de Camila hacia el gimnasio. Cuando entramos, vimos a Nick y a Lucy atados y amordazados en unas sillas en el medio de la pista de básquetbol, intentando liberarse. Tenían al lado unas sillas vacías. Cuando nos vieron, comenzaron a moverse más fuerte, con miradas de pánico.

-Pero, ¿qué...? -Escuché decir a Dinah y de repente me sostuvieron los brazos con fuerza.

-¡Ey, no! -Las risas de Lauren se escuchaban detrás de mí. Podía sentir sus manos atándome las muñecas con fuerza.-¡Lauren, suéltame! -Volteé a ver a Dinah y ella ya estaba siendo arrastrada hacia una silla, por Normani, Verónica y Camila. Gritaba insultos y las chicas sólo reían.