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Íbamos sobre Appa, pero esta vez iba perdida en mis pensamientos. Que hubiera pasado si ellos no hubieran llegado a ayudarme? Hubiera querido seguir viviendo después de eso? Me relami los labios, la herida que quedó en mis labios me acompañaría un par de días.

-Izumi te encuentras bien, has estado muy callada desde que salimos - yo solo lo mire y sonreí devilmente. - te duele tu labio?

-Sokka, no te preocupes estoy bien- que mentirosa, aun siento asco de mi.

-Esta bien, si no quieres decime no lo hagas, no te presionare- me recueda a Misuhara.

-Sokka soy una tonta- dije en un susurro y comencé a llorar, él me abrazo y me contuvo hasta que deje de llorar, era un buen amigo.
Ya estaba atardeciendo cuando por fin llegamos al polo norte, al bajar de Appa fuimos recibidos como héroes, fue realmente genial incluso hicieron un banquete en nuestro honor.

- Esto está delicioso - dijo Angg alegre.

- Si, deberías probar esto - dijo Katara entregándole otro platillo.

-Sabes Yue yo también soy un príncipe- Sokka me miró con cara de ayudame.

-Ohh claro Princesa Yue, Sokka es el hijo del jefe de la tribu del agua del sur- ella comenzo a perder interés, debo ayudar a Sokka- sabes Yue, Sokka es un gran amigo, me salvo la vida en el polo- ella volvió a tener interés en lo que él hablaba.

-Agradezco la a todos por esta maravillosa comida- hice una reverencia - me retiro a dormir.

Al fin se acabó este día horrible, quisiera dormir eternamente y no despertar jamás. Estaba por apunto de caer dormida cuando sentí una gran presión en el pecho, algo le pasó a Zuko eso fue lo último que pensé y perdí el conocimiento.

-Por favor quedate quieto- dijo la muchacha tratando de limpiar la herida de su compañero.

-Eso duele Izumi - dijo quejándose.

-Lo sé Zuko, aguanta un poco- Izumi terminó de limpiar la herida y comenzó a vendarlo- No puedo creer que Osai te hiciera esto, solo por hablar fuera de turno.

-Fue mi culpa, no debí ser así de insolente.

-Acaso estas loco?! Esta bien si cometiste una falta, pero esto - dijo Izumi terminando de vendar a zuko- no tiene justificación, tu padre es un moustro- ella estaba muy enojada - ya estas listo - dijo besando su frente.

-Gracias por curarme- se levantó de la silla, la abrazo y la beso, un beso lleno de ternura y amor, ella no dudó en corresponderle.

Al despertar ya era de día otra vez, hace mucho tiempo no recordaba eso, pensé estirandome hoy sería un nuevo día y todo lo malo se lo quedó el ayer. Cuando salí Sokka estaba tratando de cortejar a Yue y Angg estaba aprendiendo agua control, pero no veía a Katara, donde estará? Ella estaba muy emocionada por aprender de un maestro agua. Me dispuse a buscarla hasta que al fin la encontré, resulta que las mujeres que pueden hacer agua control solo se dedican curar.

-Puedo pasar? - pregunté insegura, no sabía si me resibirian

- Claro que puedes muchacha- me senté a escuchar lo que la señora explicaba, resulta que hay que dejar la energía fluir hacia tus manos con buenas intenciones, me pregunto si eso aplicará para el fuego control. Estuve muy atenta a lo que ella hablaba tanto que ni siquiera me di cuenta cuando Katara salió. La clase terminó y al salir me enteré que Katara se peleó con Paku, el maestro agua que se dedicaba a enseñar, pero por lo que me enteré Katara lo hizo tan bien que él no tuvo excusa para no aceptala como alumna, me alegro por ella.

-Por qué la nieve cae oscura? - preguntó la princesa Yue, Sokka y yo intercambiamos miradas cómplices.

-Eso significa que la nación del fuego se está acercando- se veía preocupado- son muchos, princesa Yue debo llevarla con su padre - Sokka la llevo de la mano y yo los seguí.

Todos se reunieron y hablaron sobre lo que harían, Sokka se unió a una mision suicida, acaso esta loco!!, en que mundo es buena idea infiltrarse en un barco de la nación del fuego. La reunión terminó y todos se retiraron a lo suyo, yo por mi parte seguí a Sokka.

- Hombres, para infiltrarse ocuparán estos- Sokka me miró y estallamos en risa, que clase de uniformes son esos.

-Dígame que esto es una broma por favor - dije parado de reír, pero todos me miraron serios- Bueno esos uniformes ya no se usan desde hace muuuucho tiempo-hable tratando de recuperar la compostura.

-Tu como sabes eso? Solo eres una mujer - que acaba de decir este tipo? Pensé incrédula.

-Pará tu información Izumi es una gran guerrera y desertora de la armada de fuego, creo que sabe como se ve su maldito uniforme - me defendió Sokka, el muchacho y el rey de este lugar me miraban con asombro.

-Como decía, así es como se ve un uniforme actual - dije mostrando el uniforme que alguna vez fue mío.- Sokka tu usa este.

- Señorita Izumi seria tan amable de compartir lo que sabe con estos humildes guerreros - me pregunto el Rey yo solo hice una reverencia.

Pasó un rato, el idiota no dejaba de hablar sobre las mujeres como si fueran objetos, ya me tiene arta.

- Así que crees poder ganarle a S
Zhao- dije sonriendo con malicia.

- Por supuesto que puedo - dijo con aires de superidad. - soy el mejor guerrero de aquí.

-Ya veo entonces no te molestará enfrentarme- dije sacando mi espada.

- No voy a pelear contra una niña - dijo mirandome despectivamente.

- Si, eso es lo que probablemente Zhao diga al verte- Sokka tuvo que contener la risa- pero no pregunté si querías enfrentame- dije atacando con rápidos movimientos - vamos pelea, Zhao no tiene piedad en las batallas.

-Detente- dijo tratando de golpearme, es demasiado lento, realmente es muy fácil ganarle.

-Estas intentado golpearme? No se nota - dije volviendo a esquivar - vamos no solo lo intentes, hazlo - me dio un golpe en el estómago pero ni siquiera perdí el aire - si quieres ganarle a un maestro fuego debes dejarlo sin aire, quedará indefenso- lo hice caer y apunte a su cabeza con mi mano - de otra forma- lance una llama- te matará  - él se quedó ahí inmóvil, por supuesto erré mi ataque, el fuego ni siquiera pasó cerca de él.

Luego de mi demostración, salí de ahí dejando a todos con la boca abierta.

- Eso fue grandioso Izumi lo pususte en su lugar - dijo Sokka contento.

-No fue nada - comencé a acomodar mi cabello en una trenza - a demás pensé que tu también querías golpearlo por lo que dijo de Yue. Sé que ella te gusta.

- Quién te lo dijo?! - preguntó muy alterado.

-Era un secreto? - dije incrédula - eres muy obvio - dije terminando de trenzar mi cabello.

- Bueno hablando de Yue, su padre me pidió que fuera su guardia personal- genial ya no irá a ese maldito barco.

-Genial podrás estar con ella - dije goleando su brazo.

-Si! - pero el entusiasmo de su voz se desvaneció rápidamente - crees que ataquen hoy?

-No, ya está por oscurecer y Sao no es tonto, no ordenará un ataque contra la tribu del agua a la mitad de la noche- después de todo él también le teme a la luna y a los poderes de los maestros agua- ve a alistar tus cosas para mañana, apenas el sol salga atacará, descansa.

Dicho eso me dirijo a la habitación que me asignaron en el palacio de hielo del norte. Estaba prepando mis cosas cuando encontré el pañuelo con el que cubro mi identidad- supongo que ya no lo necesitaré - dije en voz alta para luego quemarlo, ya no volveré a ocultarme, no tiene sentido.

¿En Verdad Eres Tu?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora