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XIV

Bailes

21 de febrero de 1997

Camila

Ya era viernes, estos días habían pasado volando. Tuve varios exámenes que no sé si aprobé uno, Destiny seguía feliz con Max, cada vez me gustaba más la pareja que hacían, la verdad que se veían muy tiernos. Mi querido hermano ya no estaba teniendo sus crisis por Destiny, de hecho estaba bastante tranquilo. A Liam lo había visto poco, raro, pero cierto, le preguntaría hoy en la fiesta.

Que hablando de fiesta, Destiny y yo estábamos en mi cuarto arreglándonos.

Destiny ya había terminado de arreglarse y estaba sentada en el sofá viendo cómo me hacía la línea del ojo.

En lo que consistía esta fiesta/gala, es en que sería un poco elegante porque era en un bar de lujo, y había que ir bastante presentable porque la temática era de bailes.

Por eso me quedé maravillada con el vestido de Destiny. Era largo y negro brillante. Se le ajustaba perfectamente al cuerpo dejando su pierna izquierda al descubierto, llevaba tacones de punta fina bastante altos de color dorado. Y su maquillaje consistía en la cantidad de base perfecta para parecer una muñeca, labios pintados de beige claro, delineado en ambos lados de los ojos color negro, pestañas pintadas y un poco de rubor. El cabello se lo había recogido en una coleta alta con algunos mechones sueltos risados.

Mientras que yo me seguía maquillando. Había elegido un vestido rojo también ajustado al cuerpo, con un corte sirena al final, y un reluciente escote, amé este vestido y Destiny gritó al verlo totalmente de acuerdo con mi decisión. Los tacones no eran casi visibles pero son rojos de punta ancha bastante altos. El maquillaje que me estaba poniendo consistía en base, un poco de rubor, labios en un brillo claro, las líneas de los ojos solo arriba y negras, a la derecha le coloqué un corazoncito, las pestañas pintadas un poco porque ya las tenía largas de naturaleza y terminé por pintarme también las cejas del mismo color de mi cabello. Este mismo lo dejé suelto en ligeras ondas.

Destiny se levantó del sillón sonriente también mirándose en el espejo.

—Vamos a impactar, cariño.

Sonreí—Menos mal que lo sabes.

Al bajar las escaleras encontramos a mi hermano con sus amigos que también irían al cumpleaños. Mi bello hermano estaba con un traje negro y su cabello peinado hacia los lados, ahí noté que el traje le hacía ver mejor sus ojos azules.

Óscar tenía un traje color café y se había dejado el cabello rizado, le había crecido estos días por lo que caía por lados de su rostro.

El tímido Petter -que por cierto se quedó rojito al vernos, a veces pienso que le gusta alguna de nosotras dos- vestía un traje rojo vino y se había peinado el cabello completamente hacia atrás. Sus ojos se veían más grises que nunca.

Riley llevaba un vestido largo negro, ajustado en la cintura y suelto hasta los tobillos. Su maquillaje iba bastante llamativo y el cabello suelto.

—Bellas esas chicas —elogió Óscar y yo reí.

—Ustedes también están genial —dije yo fijándome más.

—Venga, que el taxi ya está afuera —dijo Carlos y mamá se despidió desde la cocina, papá estaba muy ocupado viendo fútbol que no nos puso atención.

Nos subimos en el taxi donde íbamos torturando al pobre taxista cantando las canciones que salían en la reproductora.

Al llegar al bar me puse un poco nerviosa. Destiny lo notó porque me agarró del brazo.

Mi Enamorada Secreta ✔️ [Borrador]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora