Mi Enamorada Secreta ✔️ [Borrador]

21

XXI

Cumpleaños feliz (2)

Camila

Vale, esto se iba a descontrolar.

Habían pasado horas de risas, admirar motos, conversaciones y bromas.

También almorzamos en el bar del tío de Liam, que es el padre de Leydi y nos quedamos ahí un buen rato conversando.

Hasta que llegaron las seis de la tarde y tuvimos la grandiosa idea de hacer carreras detrás del evento.

Era un gran parque algo desolado con extensas calles, bastante cómodo para hacer carreras.

Los primeros fueron Max contra mi hermano, el primero se subió a la moto del padre de Liam junto a Destiny y Carlos en la moto de papá con Riley.

Fue una carrera algo caótica.

Nunca había escuchado en mi vida rugir tanto unas motos.

El ganador fue Carlos que hizo su baile de la victoria en la meta.

Después le siguieron mi padre y el padre de Liam, ganó el padre de Liam pero al final se chocaron las manos.

Y ahora tocaba lo mejor, Liam contra mí.

Él se subió a la moto de su padre con una sonrisa mientras que yo lo miraba con los ojos entrecerrados ya subida en la moto de papá.

—¿Desde cuándo tú conduces en moto? —pregunto y él sonrió más.

—Desde siempre, bebé —me guiñó el ojo y yo hice una expresión de asco.

—Oh no, eso no —rió y se puso el casco, yo hice lo mismo y empezamos la carrera cuando una medio borracha Lady sonó el silbato.

Él tomó la delantera y entrecerré los ojos. Al rato logré alcanzarlo e íbamos al mismo tiempo.

—¡Hoy es mi cumpleaños! ¡¿No vas a dejar ganar a tu querida novia?! —bromeo y él ríe.

—¡No dejaré ganar a nadie! ¡Mi querida novia tiene que demostrarme que es fantástica! —dijo y tomó la delantera.

—¡Idiota! —exclamé sonriendo mientras aceleraba.

En la jodida curva logré tomar delantera y reí alegre.

Hasta que se nos borró la sonrisa al oír una jodida sirena de policía.

Miré a Liam asustada.

—¡Tranquila, hay que huir de aquí!

—¡¿Que hay de mis padres, del tuyo, y nuestros amigos?!

—¡Ellos no son idiotas, van a escapar! ¡Aceleremos de una vez antes de que cojan el número de chapa!

Le hice caso y aceleré, vimos como nuestros amigos y familia se ocultaban en el bar, mientras que Liam y yo manejábamos como locos, buscando perderlos de vista.

Gire a la izquierda y Liam se detuvo confundido un momento para después seguirme al darse cuenta de que era un atajo para llegar a mi casa.

Tenía razón, se descontroló.

Liam y yo nos paramos en otra curva que estaba despejada y vimos como los carros de policía se iban por otra dirección.

Respiré aliviada.

—¿Quieres ir a tu casa? —miré a Liam cuando me hizo la pregunta.

—Todos están en el bar, no quiero preocuparlos —dije al instante.

—Podemos ir un momento y volver, estás muy acelerada, venga —dijo él y yo suspiré aceptando.

Conducimos un poco más normal para llegar a mi casa.