Poco después de la partida del mago Asufel detuvo a la compañía para reagruparse con Erkenbrand y así darle las nuevas noticias que llegaban desde el Este, noticas que habían revitalizado a los hombres y llenando de esperanza cada uno de ellos, además de apartar todo miedo, temor y duda que se pudiese sembrar en sus corazones, pues las palabras y la voz hermosa del mago fueron tan fuertes que les trajo gran consuelo a estos hombres que tanto habían perdido. Muchos se preguntaban que les estaba esperando a las puertas del Abismo de Helm pues ya sabían que una gran hueste de enemigos marchaba hacia la fortaleza, y tenían la esperanza de entrar en ella antes de llegarán los enemigos y fuera demasiado tarde, pues ya no tenían más tiempo que perder e impacientes estaban todos los Rohirrims a la espera de las nuevas órdenes del joven capitán de la marca. Erkenbrand quien guiaba a los heridos en la retaguardia, por fin había llegado y Asufel no demoró en decirle todo lo que había pasado y le había dicho el mago, Erkenbrand asombrando y maravillado por tales noticias soltó un gran grito de desahogo pues por fin sus temores se habían disipado y sabía que Rohan volvía a tener a su Rey y a su líder en la guerra.
Así siguieron la marcha los hombres en cambio al Abismo en dónde enfrentarían la mayor prueba que nunca antes habían enfrentado pues eran cerca de 10 mil enemigos los que se disponían a asediar el bastión, todos con un solo propósito, una sola misión y una sola tarea, la cuál era acabar con toda la vida en el reino de Rohan, orden dada por el mayor de los Istari Saruman el blanco conocido en Rohan como Saruman el corrupto o traidor. Pero aún con todo en su contra ahí seguían los soldados de Rohan, impulsados nada más por su amor al Reino y la esperanza de creer que la victoria aún podía alcanzarse, y así iban todos caminando con la cabeza levantada, cantando canciones, recitando poemas de guerra y sonando con gran fuerza sus cuernos para que todo aquel que los escuchará se le uniría a la batalla. Y así fue como poco a poco se reunión más y más hombres que habían desertado de la batalla por los vados, pero aun así seguían siendo muy pocos, no llegaban a las mil lanzas además de que aún seguían perdidos Orofel junto a Galia y sus doncellas, los cuales el mago había tenía la esperanza de encontrar y llevar una gran tropa capaz de hacer una gran diferencia en la batalla que les esperaba. Luego de varias horas de marcha el velo de la noche ya los cubría, pero el que hambre y la fatiga no importaba en estos momentos, el único deseo de los Rohirrims era el de unirse a sus hermanos y a su Rey en el abismo. Mientras la marcha continuaba a cerca de la madrugada se escucharon los cascos de los caballos que iban a toda prisa acercándose a ellos, sin demora alguna Asufel soltó un grito y llamo a los hombres a sus armas, las cuales desenvainaron con gran ferocidad, era una gran hueste la que se acercaba y cuando se disponían a cargar contra viento y marea, vieron una luz, un gran destelló blanco se alzaba en la cabeza de los jinetes que se acercaba, era él, el gris peregrino tal y como había prometido había regresado con todos los sobrevivientes de la batalla, que reagrupados, reanimados y con la fe intacta, llegaban a reunirse nuevamente con los demás Rohirrims. Asufel corrió en búsqueda del mago y sin titubear preguntó:Mi señor, ¿hasta dónde ha ido? ¿Cómo ha conseguido encontrar y traer a tantos hombres?
El mago lo miro y con voz suave y hermosa le dijo:
Asufel hijo de Nandros, yo no he hecho más que dar consejos y llevarle las noticas a los que guiaban a este gran grupo de Rohirrims, estas preguntas debes hacérselas a tu hermano.¿Orofel?!!, Grito Asufel exaltado, ¿En dónde se encuentra mi hermano?
Desde atrás en un gran y hermoso caballo negro se acercaba Orofel hijo de Nandros, si armadura, sin escudo, sin el yelmo ni hombreras, Orofel llevaba solo consigo una larga lanza en su mano izquierda y a su costado tenía envainada su espada. Al ver a su hermano Asufel no podía aguantar la emoción pues él había creído que Orofel no había logrado conseguir sobrevivir de la dura batalla que enfrentaron, al verlo dijo con voz fuerte y quebrada:
¡Orofel hermano!
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Cuentos de la Marca
FanfictionLa tierra media durante la tercera edad pasa por una época oscura, puesto a qué la oscuridad y el mal resurge en las tierras de Mordor. Ante la guerra en el sur, uno de los últimos reinos de los hombres, el Reino de Rohan, golpeado y debilitado por...