Cap. 21

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Oh. Mi Dios.

Se puso de pie cerca del árbol con una sombrilla, pareciendo como si acabara de salir de algún estudio  de Hollywood. Su pelo castaño, iluminado por el sol, caía sobre sus hombros en suaves y perfectas ondas. Llevaba un vestido verde azulado hasta la rodilla, sin medias, por supuesto, y zapatos de tacón alto. Oscuras gafas de sol cubrían sus ojos, los cuales yo sabía que eran marrones. Se levantó las gafas de sol mientras se volvía hacia mí.

— Hola, Selena. — dijo la hermosa mujer.

— Hola, mamá —.

Me di cuenta de que estaba nerviosa por la forma en que  dio un paso hacia mí. Parecía frágil, y sus ojos estaban muy abiertos,  yo podía adivinar, el miedo. Por una buena razón, también.

Por no advertirnos a ninguno de nosotros. Así que le dispare una advertencia  y me aparté cuando ella se acercó a mí. Esto debió  confirmar sus preocupaciones, porque miró al suelo y se centró en la punta de su zapato. —Te he echado de menos, Sel. — Dijo mi madre.

—Claro que sí. —Digo sarcástica y me levante del suelo, Harry después de mí. Parecía confundido. Mi madre lo observo de arriba a abajo y me sonrió.

—Sra. Gomez. Harry, Harry Styles. —Se presentó Harry, estrechando su mano y dejando y beso en ella.

—Amanda… Teefey. —Dijo mi mamá. Con  su voz suave y natural. Casi me ahogo con mi propia saliva.

— ¿Podemos hablar? —La tome del brazo y caminamos lejos de Harry, ya había parado de llover. — ¿Si? —Pregunto. —Tu amigo es muy lindo y amable. — Ríe. Ella ahuecó su pelo y sonrió.

—No es mi amigo, es mi novio.

Mamá sonrió aún más. —Oh, ya mi bebé tiene novio. Me alegro de conocer a una persona quiera a mi hija. —Puse los ojos en blanco.

—Como sea...— miré hacia Harry y este parecía estar concentrado en su teléfono y por un momento, pude sonreír, hasta que volví a la realidad.

—Veo como lo miras. —Me giro para ver a mi madre sonreírme. —Hace mucho que mire a tu padre de esa manera. —Dijo y luego pude notar como la nostalgia creció en sus ojos, al punto de casi llorar. Parecía arrepentirse de haber hablado de papá.

—Mamá…— Trate de consolarla pero se vino a mi mente como nos había abandonado y todo mi consuelo y tristeza se volvió un increíble deseo de gritarle. —Mejor dicho… Amanda Teefey.

Ella me miro con cierta timidez pero yo solo reí sarcástica y sentí como mi vista se empezó a nublar. —Te volviste a casar.

Ella asintió lentamente y una lágrima cayó de su ojo. —Déjame explicarte…

—No hace falta. —Admití y camino hacia Harry pero me detuvo tomándome por el brazo y me giro sobre mi misma, quedando frente a mí. Pude notar que su maquillaje se comenzaba a correr con las lágrimas.

—Por favor…— susurro.

Parecía realmente dolida y por más que sea Zayn no me perdonaría si no escucho lo que tiene que decir. Suspire. —Está bien. Iremos a algún lugar. —Sonrió. —Pero… —su sonrisa se desvaneció. —Debe venir Zayn.

— ¿Zayn? ¿Mi pequeño está bien? —preguntó preocupada

—Sí. —Aclare y continué caminando hacia Harry. —Cariño. —Le llame y desvió su mirada de la pantalla del teléfono para mirarme con una sonrisa. Miró más allá de mí y pude notar que su sonrisa se desvaneció lentamente.

— ¿Qué pasa? —se levantó y me tomo de las manos.

—Es solo… yo...— tartamudeé y Harry pudo notarlo. —Necesito…

Maniac |H. S.|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora