►Díada◄

Maravilla

Palabra del día: Marvel/ Maravilla

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—¿Disfrutando de la vista?

Si Takodana le pareció alucinante, Naboo era una maravilla con su espléndido verdor y sus edificios dignos de la realeza. Quería seguir deleitándose con la belleza del paisaje, pero unos fuertes brazos rodeándola la obligaron a despegar su vista del amplio balcón.

—¡Es bellísimo! 

Y ahí estaba él, su enemigo acérrimo en la guerra, con quien compartía una divertida vida llena de viajes y aventuras, sonriéndole cálidamente mientras la abrazaba con fuerza.

—Me alegra que te guste, cariño.

Rey lo tomó de la mano y lo guió hacia la baranda para que también contemplara. Fue idea de Ben ir al precioso planeta después de terminar sus encargos en la Resistencia. El chico era consciente de que su pareja disfrutaría del lugar, y no se equivocó.

—Podemos quedarnos aquí, si así lo deseas...

La chica volteó nuevamente en su dirección, sorprendida por su propuesta; pero antes de que pudiera hablar él completó:

—Este podría ser nuestro nuevo hogar, es hermoso, acogedor y muy amplio para establecer una nueva academia Jedi. ¿Qué opinas?

Ben se le acercó con cada palabra que decía, terminando a su lado hasta tal punto de rozar sus brazos; el muchacho hablaba en serio, sus ojos oscuros no podían engañarla.

Para su desconcierto, Rey lo abrazó y apoyó su cabeza en su pecho, sintiendo los desenfrenados latidos de su corazón; tardó un poco en corresponder.

—Ben —lo llamó —No importa donde vivamos, sea como sea, contigo a mi lado es mi hogar.

El ex Líder Supremo la cargó de la cintura y la alzó mientras repartía besos en su pecoso rostro, ella rió.

—Sí así es como lo deseas; entonces jamás me apartaré de tu lado —aseguró besándola antes de bajarla.

—Te amo Ben Solo —confesó cariñosa.

—Lo sé. Yo también Rey —sonrió.

Y sin más, ambos jóvenes contemplaron juntos el paisaje. Estaban seguros que, donde fuera que fueran, estarían juntos tal y como la Fuerza lo dictaba.

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Ya sé... Fue corto y, para colmo, tarde, pero si hoy quería tener el día libre tenía que hacer mis tareas ayer. Lamento eso y mucho porque fue fatal el quedarme con la idea y no poder plasmarla.

Así pues amigos, se despide Solana. Adiós.