Cap. 12 - ¿¡Y el zapato!?

1.7K 303 225
                                    

Ya habian ensayado durante el viaje en bus, llevaban el vestuario y se cambiarían al llegar al teatro. Mina estaba que explotaba de la emoción, actuar junto a sus amigos le parecia de lo más genial del mundo.

Al llegar todos fueron tras bambalinas y se pusieron el vestuario que les entrego la pelirosada.

Los grupos de teatro eran cinco en total -conformado por cinco actores y un narrador-, cada uno iba a representar una obra infantil distinta, los grupos fueron pasando hasta que llego el turno del Bakusquad y bueno... Las cosas se pusieron interesantes con este grupo en particular.

—¡Hola a todos! —exclamó Mina con entusiasmo en medio del escenario y los niños miraron a la joven quien estaba de narrador. —Hoy vamos a contarles el cuento de Cenicienta. —se posicionó a un costado del escenario y arriba el telón. ¡Señores y señoras a empezar el desmadre!

—Habia una vez una bonita familia conformada por tres personas, la madre era una hermosa mujer con un gran corazón, el padre era un hombre guapo, justo y honrado, y la pequeña niña habia heredado lo mejor de ambos, era hermosa, noble y con un gran corazón como el de su madre. —en escena apareció Katsuki (como la bella y sexy madre), Sero (como el padre) y Kaminari (como Cenicienta). —Pero al pasar los años su madre enfermó y murió, el padre no quería que su hija creciera sin la presencia de una madre y se caso de nuevo con una mujer que era la personificacion del mal. —Katsuki salio de escena y llego una de las compañeras del grupo de Mina quien interpretaba a la madrastra (y que por suerte no se habia intoxicado con la comida en mal estado). —Al poco tiempo de casarse su padre también falleció y la madrastra empezó a maltratar a Cenicienta junto a sus dos hijas, las cuales eran feas y envidiaban a la hermosa Cenicienta.

—Y en cuanto termines aquí limpias la cocina, barres el patio y lavas la ropa. —mandó la compañera de la pelirosada en tono molesto (haciendo de la madrastra).

—¡AHH! —exclamó Denki idignado. —¡NI LO CREAS HERMANA! ¡ESTAS DOS MANOS HERMOSAS QUE VES AQUI SE HICIERON PARA HACER ARTE! ¡NO PARA LAVAR TRASTES! —tiró la escoba que tenia en las manos y se cruzó de brazos con molestia, los niños miraron raro a los actores. La chica en ese momento quería golpear al rubio con la escoba que este habia arrojado al suelo, ¿a quién se le ocurre poner a Kaminari como el prota?

—Es una obra idiota. —susurró la chica molesta.

—¡Ah! ¡Sí, cierto! —el rubio recogió rapido la escoba y entro en el papel que su amiga le habia dado. —¡Como hordene señora amargada! —contestó y comenzó a barrer el suelo levantando un poco el polvo del piso del escenario. —¡Qué acaso nadie limpia este lugar! —dijo mirando la suciedad que habia en el piso del teatro.

—Cenicienta, necesito que cuando termines limpies mi cuarto. ¡Y lo quiero impecable, oíste! —ordenó Sero como una de las hermanastras de Cenicienta.

—Oie Men y si te vas, no sé, ¡muy a la mierda! —Denki se olvidaba que era Cenicienta. —Quiero decir —se aclaro la garganta y dijo con voz un poco más chillona —, claro que sí querida hermanita.

—Y luego cuando termines con la mierda de mi hermana tienes que lavar mis calzones, y también hordenar mi cuarto, ¡escuchaste estúpida! —mandó el cenizo, se estaba arrepintiendo de aceptar ayudar a su amiga con esta obra de mierda.

—¡No jodas! —se exalto Denki y luego recordó que era Cenicienta —... ¡Ahh! ¡No hay problema hermanita! —continuó barriendo más deprisa, pero cuando Katsuki iba a salir del escenario Kaminari puso la escoba entremedio de los pies del cenizo haciendo que esté se tropezara y terminara imapactando en el frío -y sucio- suelo del escenario.

—¡ESTAS MUERTA MALDITA MUGRE! —Katsuki se levantó y se fue contra Denki, quien al ver al rubio con su cara asesina no dudo en huir, pero Katsuki lo pillo de la falda que llevaba y empezaron a pelar en frente de los niños mientras Sero los alentaba.

Cartas anónimas. [Katsudeku.] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora